"Y si un día me miraste con ojos de amor, ¿porque no seguir con este juego que nos une más?".
"¡Mierda Darkar!"
"Nunca me llamas por mi nombre...".
⚠️ Historia de Darkar relacionandose con Mecoboy de forma romántica.⚠️
-Contenido +18
-Situaciones d...
Así que por favor no lo hagas, por favor no lo hagas No hay necesidad de complicar Porque nuestro tiempo es corto Este es, este es, este es nuestro destino, ¡soy tuyo!
I'm Yours-Jason Mraz
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Cómo si de otra dimensión se tratara, Darkar abrió sus ojos y de una forma un tanto desconcertada miro a su alrededor y de pronto sintió como unas manos pálidas se deslizaban en su pecho.
"¿Otra vez...?", pensó, pues las salidas con chicas y el no recordar nada al día siguiente se había convertido en algo muy típico para el, más sin embargo, cuando vio que se trataba su mente mantuvo la calma.
Debía de admitir que las manos del albino se sentían más suaves que de las chicas que traían uñas del tamaño de una regla promedio; ojalá la paz que sentía en ese momento hubiera durado, pues al tener ciertos flashbacks de todo lo de la anterior noche solamente se puso nervioso.
En un movimiento suave trato de deslizar las manos pálidas de su cuerpo, más no tuvo éxito al hacerlo ya que estás se aferraban más.
-No, no te vayas.- Dijo con cierto enojo el peli blanco aún con los ojos cerrados.
El castaño con cierto desdén tomo su mano delicadamente y depósito un beso en esta, así por fin liberando su cuerpo del amarre.
Obviamente muchas preguntas invadía la cabeza de Darkar pero por el momento solamente importaba lo que Mecoboy dijera, ¿y si lo odiaba?, ¿y si no le habla nunca más?, talvez era poco probable pero nunca descartó alguna de esas ideas.
En un plazo de tiempo aproximado de 30 min se podía divisar gotas de agua que caían por el cuerpo del peli blanco, seguido esto caía espuma, el vapor también estaba presente.
A diferencia de Darkar, Mecoboy no recordaba absolutamente nada de la anterior noche, su poca resistencia al alcohol le había bloqueado ciertos recuerdos, lo único que tenía era una marca un tanto rara en el cuello, no ardía, pero ahí estaba, como si de un chupetón se tratará, y aún así no tenía idea de que había pasado, aunque temía lo peor.
"¿Y si tengo hepatitis B?".- se preguntó así mismo preocupado.
Sus pensamientos fueron interrumpidos debido a que la puerta del baño estaba siendo abierta.
-Mierda, ¿qué acaso no sabes tocar la puerta?.- Soltó el albino aún en la ducha.
-Verga, eres muy delicada cabron, solamente quería ver si estabas bien o que onda.- Dijo con cierta ofensa el castaño.
-Al menos toca la pinche puerta, no sabes el susto que me diste.- Siguió con su baño pero noto que el castaño no se iba.- Porque chingados sigues aquí, ¿te gusto o que carajo?.
Con la última pregunta en realidad el castaño no sabía que responder así que esquivo esa pregunta.
