Flores casi malvadas 1 - Itachi y Kisame - Naruto (Fanfic)

Histeria

Habían pasado algunos días y ambos iban por el bosque, Itachi había mejorado, pero su vista habia empezado a tener problemas. Habían pasado días desde que ya sabía que Sasuke estaba vivo, ni uno de los dos había tenido ánimo de mantener una charla larga.

Quizás ya gastaron todas sus palabras y lágrimas, ahora parecen dos cadáveres caminando.

Kisame pensó que podría seguir con todo automáticamente, no le gustaba estar encerrado en su mente pero se quedaba perdido en sus pensamientos todo el día, quería permanecer ahí imaginando o arrepintiendose de todo. Sabe que en la mente de Itachi solo está su hermano menor, eso le martiriza más.

El muchacho 'ese' dejo de ser el inocente niño que Itachi cree que aún es, hace tiempo que Uchiha Sasuke ha demostrado no tener remedio.

Su monotonía no pudo mantenerse en la noche, el siendo gran fanático de guardarse en cuevas, había prendido una fogata en una que había encontrado e Itachi se había adentrado en la caverna hacia lo más oscuro, le gustaba esconderse en esa oscuridad y a él le gustaba estar cerca de la luz.

Así son ellos en realidad, siempre ha sido de esa manera, a pesar de que ambos son pecadores empedernidos, Kisame está aquí e Itachi allá, Kisame sonríe en el momento en el que piensa en eso, debería ser todo lo contrario, incluso sus naturalezas de chakra lo indican: Itachi es fuego, luminoso y caliente, vibrante e inquieto; mientras que el es agua, como el océano indica que es oscuro y profundo, frío e infinito.

Despertó de lo que pensaba cuando sintió un fuerte chakra en la cueva, venía de adentro y vio entonces la oscuridad espesa. Le costó analizarlo mejor, pero a la final ese chakra no era desconocido.

Madara.

—Mierda...

El mismo ha colaborado para crear el ambiente perfecto dentro de una oscura cueva para que aparezca a hacer de las suyas. Kisame se levanta sin dudarlo y se adentra en esa oscuridad, camino bastante hasta poder escuchar algo: un golpe seco y no tan ruidoso; no veía nada y se le complicaba seguir pero pronto vio una luz en una parte de la cueva, habían encendido fuego. Se acercó sigilosamente, incluso bajo su chakra, pero no necesitó acercarse mucho para escuchar algo en esa silenciosa cueva.

—No puedo creer que te hayas atrevido a quitarme la máscara— decía Madara— Mírate...estás muriendo.

Escucha un quejido de Itachi, un golpe seco nuevamente y el sonido metálico, quizás su banda shinobi se ha caído de su frente.

—No moriré— dice Itachi— Te lo aseguro.

Itachi sonaba confiado, vuelven a empujarlo contra la fría roca de la cueva. Madara suelta una leve risita al escucharlo decir lo anterior.

—Ni siquiera con la luz del fuego puedes verme ¿No es así? — dice Madara en un susurro que si puedo escuchar.

Itachi estaba contra esa fría pared y su banda ya se había caído al suelo por los empujones. No sentía miedo en absoluto de Madara, sabía que el sujeto estaba ahí porque quería asegurarse de que el no haga algo contra su persona, le temía. Madara teme de sus habilidades y de su poder, por eso lo somete.

Lo sostenía de su cabello y tenía la otra mano fuertemente instalada en su cadera, su cuerpo estaba completamente pegado al suyo y le hablaba cerca de su oído.

—¿Lloraste por tu hermanito? — pregunta con burla y se restriega contra el descaradamente—¿Tus lágrimas fueron tantas que ya no puedes ver?

Kisame estaba cerca, lo sabía. Lo más probable es que Madara también, pero no parecía importarle.

El silencio de Itachi le dice algo a Madara que le provoca rabia—Lo sabes...¿no es así?— lo empuja fuertemente contra la piedra y le jala más su cabello— Está vivo...