𝗩𝗜

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Would a kiss be too much to ask?

When you fit me as sunday's frozen pitch
Fits the thermos flask

La tempestuosa noche ya había cesado.
Apenas el rubio abrió los ojos, sentía como el aire le asfixiaba, como su corazón de estrujaba y su mente gritaba.

Su estómago dolía.

Sentía como las mariposas se evenenaban y morían, como su respiración se cortaba.

El olor a canela ya no era dulce, ahora era amargo, casi insoportable.

Todo se sentía más frío, hasta su propio cuerpo, se sentía muerto.

Una sensación muy familiar, desde hace años era así. Pero, el día que conoció al azabache se sintió más vivo que nunca, y así siguió hasta hace unos días, semanas o incluso meses.

El sentimiento hogareño se había ido, el olor a fresas y vainilla se había desvanecido, el amor de su vida, lo había traicionado.
Ya nada tenía sentido, ni su existencia, ni su corazón, ni sus sentimientos, ni su razón de vivir.

Si ya no tenía a Sapnap, ¿de qué servía vivir?, ¿había algún sentido en su vida sin él?, ¿sí ya no iba a tener sus besos y sus abrazos para qué seguir viviendo?.

Sumergido en sus pensamientos, empezó a escuchar sonido externos a la habitación y al desastre que había en su mente.

Toqueteos en la puerta, muy leves, casi inaudibles, parecía que los tocaba alguien sin fuerza, y él sabía perfectamente de quién se trataba.

Uh, ¿Dream?, ¿estás ahí?, solo quiero saber si estás bien ― Dijo, casi en un susurro.

Yo, eh- sí, Sapnap, estoy bien ― No entendía por qué el azabache preguntara cómo está, después de que él le haya gritado.

¿Seguro?, es que, uh. Te fuiste muy alterado de la sala, y vine a verte luego y parecías dormido, no quería causarte más molestias ― Detonaba nerviosismo en cada palabra.

Perdóname por eso. Quieres, uh, este, ¿pasar?, es un poco tonta la pregunta ya que también es tu habitación ― Preguntó luego de disculparse.

― ¿Estas seguro?, no te quiero incomodar? ― Frotó su mano en su nuca.

Sí, te quiero ver, pero sino quieres pasar esta bien...

― ¡NO!, digo, no, no es eso, solo que no quiero incomodarte ― Musitó mientras abría la puerta.

Lo primero que vio fue la cara del rubio, esta se notaba decaída y algo demacrada, parecía sin vida, aunque, apenas él cruzó la puerta, pudo ver como, así fuera un poco, su rostro se iluminaba.

Uh, ¿dormiste bien? ― Preguntó Sapnap.

Fuera sido mejor si fueras dormido conmigo. ¿Y tú?, ¿dormiste bien?.

― El sillón es un poco incómodo, aunque tampoco fuera podido dormir bien aquí, mi mente estuvo muy ocupada pensado en muchas cosasExplicó, mientras se sentaba en el sillón individual en el cual el rubio estuvo sentando la última vez.

Oh, ¿y en qué pensabas?.

― En nosotros. Te dañé, lo volví hacer, me habías perdonado, y yo te volví a traicionar. Dream, sinceramente, creo que es mejor dejar lo nuestro hasta ac-

― ¡NO! ― interrumpió al azabache ― No lo termines de decir, por favor, estoy seguro de que podemos resolverlo ― Sus ojos detonaban suplica y una tristeza gigante.

Pero- Dream, tú sabes que esto nos está dejando mal, te está dejando mal y no me gusta verte así. Te amo, y porque te amo busco lo mejor para ti ― Se levantó para ir a la cama y tomar las manos del contrario.

Si en verdad me amas, no me dejes.

― No dejarte es lastimarte, y el amor no duele, no lastima, y yo lo he hecho, te he lastimado, no merezco a un ser tan puro y maravilloso como tú  ― Le dijo, mientras se acercaba un poco más al rubio.

Sapnap...

― ¿uh?.

¿sería demasiado pedir un beso?  ―

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⏰ Última actualización: Aug 25, 2023 ⏰

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𝗜𝘀 𝗶𝘁 𝘁𝗼𝗼 𝗺𝘂𝗰𝗵 𝘁𝗼 𝗮𝘀𝗸?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora