NISSHOKU © 《Original Version》

Capítulo 2

⚠️[TW]⚠️
Este capítulo puede contener escenas incómodas/pesadas, porfavor mantener discreción, si eres sensible, te recomiendo saltarte este capítulo.

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02.
"Mariposa"

12 de Septiembre, 2014
9:16 PM

—¡Suéltenme! —gritó con todas sus fuerzas mientras se retorcía como animal bajo el agarre de aquellos chicos.

—¿Piensas que puedes meterte con quien quieras sin ninguna consecuencia? —susurró en el oído de Harper antes de romper una pequeña parte de la blusa blanca que traía— De verdad eres tan estúpida.

Uno de los chicos la estaba sosteniendo de los brazos por detrás de su espalda, otro sostenía sus piernas y el otro estaba enfrente de ella, observando su cuerpo sin pudor alguno.

—Que buena zorrita consiguió Ryan... —El chico que estaba frente a ella rompió por completo la blusa.

Aquella blusa blanca con encaje era la favorita de Harper, tanto que siempre la presumía, pues su madre se la había regalado al cumplir 16 años, pero, ahora estaba rota y sucia, al igual que ella, o al menos así se sentía cuando sus pechos quedaron a la vista, siendo cubiertos únicamente por el sujetador.

No podía dejar de llorar ante la impotencia y el miedo.

No lograba liberarse del agarre de los tres chicos, y justo en el momento en que su corazón se detuvo al ver como frente a ella se quitaba el cinturón, fue cuando entendió lo que pasaría, no había vuelta atrás.

Nadie la escucharía al ser un lugar tan apartado y al tener una corbata en su boca como mordaza.

—Este es un regalito que te envió alguien muy especial, solo para que sigas metiéndote con quien no te conviene. —Al estar inclinada hacia atrás y a su vez inmovilizada, su respiración se agitaba al mismo tiempo en que las lágrimas descendían de su rostro como si de una cascada se tratase.

Comenzó a tocar descaradamente las piernas de Harper por debajo de aquella falda negra que tanto le gustaba usar, rompiendo las medias de malla que traía y despojándola de su ropa interior.

La pelinegra intentaba gritar con todas sus fuerzas, pero nadie la escuchaba, lo único que podía escucharse era la forma en que los chicos se reían de la situación, y la forma en que su llanto aumentaba en súplica de que la dejaran tranquila.

—Más te vale abrir bien las piernas, perra.

Un grito desgarrador salió de su garganta cuando un ardor insoportable se expandió desde su entrepierna hasta su columna, dejándola momentáneamente sin aire por el dolor, el cual aumentaba cuando las bruscas embestidas se hacían más rápidas, con Harper retorciéndose de dolor mientras sus ojos cristalizados miraban el cielo nocturno con la esperanza de que alguien o... Algo la salvará.

01:34 AM

Sus piernas fallaban constantemente mientras un pequeño camino de sangre bajaba por la cara interna de su muslo derecho, la fría brisa golpeaba su piel, haciendo que esta se erizara y que el temblor de su cuerpo aumentará en pocos segundos.

El sollozo era lo único que se escuchaba a tan altas horas de la madrugada mientras caminaba de forma lenta con dirección a su casa, donde nadie la esperaba esa noche. Cada paso dolía, cada lágrima la ahogaba, cada pensamiento la destruía, lo único que quería en ese momento era darse una ducha y dormir abrazada a su madre, como si no hubiera pasado absolutamente nada en aquel callejón.