CAPÍTULO 9

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Después de unos 40 minutos hablando los 4 y riéndonos de las aventuras y locuras de julio, vimos llegar a mi hermana Tamara con Gabriel y los chicos quienes entre ellos estaba nada más y nada menos que John, me hice la disimulada para que no notaran que los había visto pero fue demasiado tarde por que ellos empezaron a caminar hacia nosotros, al estar cerca de nosotros Beto y Julio voltearon como si los estuvieran esperando y empezaron a saludarse entre ellos para después saludarnos a nosotras, al saludar a todos los chicos llegó el turno de una persona que me causaba aún el escalofrío en mi cuerpo y un hueco en el corazón, al momento en que se acerco a mi para darme un beso en la mejilla Julio se puso en medio y me jalo con el pretexto de ir a bailar la canción que había empezado “Promiscuous" de Nelly Furtado, cuando llegamos a la pista estaba muy nerviosa ya que todos se nos quedaron viendo, no sabía que hacer si bailar o salir corriendo, cuando de repente Julio empezó a moverse y acercarse a mi lentamente, volteé a donde estaban los chicos y mis hermanas quienes nos miraban curiosos, en eso mi mirada se clavó en unos ojos que echaban fuego y una expresión de enojo, fue cuando una gran idea pasó por mi cabeza y sin pensarlo empecé a mover mis caderas al compás de la música, Julio puso sus manos en ellas y empezó a pegar su cuerpo con el mío, nuestros ojos se cruzaron y una sonrisa cómplice apareció en nuestros rostros, subió una mano y colocándola en mi nuca acerco nuestros rostros hasta quedar a centímetros de tocar nuestros labios, eso me pareció peligroso por que cada vez más el se iba acercando al estar completamente segura de que me iba a besar gire mi cuerpo quedando a espaldas frente a el y empecé a mover mis caderas en círculos me tomo de la cintura y la apretó, podía sentir su respiración en mi nuca la cual me provocaba escalofríos, me apretó a su cuerpo y acercandose a mi oído y me dijo:
 
–Bailas demasiado bien, pero si sigues así vas a provocarme un paro…cardiaco– me giro suavemente y yo volví a quedar frente a el
 
La verdad es que no había entendido lo que quiso decirme con el paro cardiaco ósea ¿A quien le da un paro cardiaco bailando? Hasta que comprendí a lo que realmente se refería haciendo que me sonrojara por completo, como me estaba divirtiendo me olvide un momento de todo Julio bailaba bastante bien creo que es de esas veces donde el chico controla tus movimientos por que bailaba yo como toda una profesional, acabo la música y Julio me tomo desprevenida para darme un último giro  tomarme de la cintura e inclinar mi cuerpo hacia atrás lo que me hiso reír y dar un pequeño grito, cuando alcé mi cabeza para levantarme, nuestras respiraciones estaban agitadas y nuestras caras estaban muy cerca el mordió suavemente sus labios y bajo su mirada a los míos se fue acercando poco a poco y cuando estaba a punto de besarme hice la cabeza para atrás y el enterró sus labios en mi cuello provocando miles de cosquillas, me ayudó a levantar y antes de irnos al lugar donde estaban todos me dio un beso en la mano sacándome una sonrisa.
 
Cuando llegamos a la sala donde estaban los chicos todos nos miraban asombrados y varios le daban codazos a Julio y le llamaban “suertudo" mi cara empezó a calentarse pues era la primera vez que me atrevía a bailar en público, mis hermanas se me quedaron viendo con cara de “Wtf" y yo solo agache la cabeza no sabia donde meterme estaba totalmente avergonzada, cuando levante la cara y me acerque a tomar mi vaso, alguien me tomo del brazo con fuerza y me hiso voltear rápidamente para decirme:
 
–ES LA ULTIMA VEZ QUE SALES A BAILAR CON ESE IMBÉCIL– me grito en el odio John
 
–Y tu quien eres para decirme lo que tengo y no tengo que hacer John– me solté de su agarre, tome mi bebida y le di la espalda
 
No iba a permitir que me arruinara la fiesta así que hice de cuenta que no estaba ahí, empecé a tomar un poco más y a divertirme con los chicos, hubo un momento en que todos salimos a bailar en bolita, Julio en ningún momento se me despegó y eso me gustaba por que era mi turno de pagarle con la misma moneda a John por haberme roto el corazón, admito que Julio era muy guapo y tenía un trasero de muerte  unas nalgas bien paraditas de esas que dan ganas de dar un golpecito para después sobar, de pronto en uno de esos tantos tequilas que había bebido me sentí mareada y con ganas de ir al baño, observe el lugar y camine hasta las escaleras que daban al segundo piso empecé a subir pues tenía que haber un baño en la parte de arriba y así llegue hasta 5 puertas que se encontraban cerradas, me pregunte cual era la del baño y sin pensarlo más de decidí por abrir la primera, esa era una habitación si que volví a cerrarla y me decidí por la que tercera, cuando abrí la puerta me lleve la sorpresa más grande de mi vida, un dolor se apoderó de mi pecho y las lágrimas no tardaron en aparecer, tape mi boca con una de mis manos pues un fuerte sollozo apareció haciendo voltear a las 2 personas que se encontraban teniendo sexo en aquella habitación, John y Tamara se alejaron rápidamente y se arreglaron la poca ropa que tenían el se me acercó y me dijo:
 
–Ana, esto no es lo que tu crees – dijo el muy descarado
 
Mis pies no de movían, era como si no quisieran responder a lo que mi cerebro les decía y les decía que se fueran de ahí, el trato de tocarme y de un manotazo lo aleje diciéndole
 
–No me vueltas a tocar en tu vida– dije furiosa y con lagrimas en mis mejillas
 
–Dile la verdad John, para que sigues ilusionándola– esta vez hablo Tamara
 
–¡CÁLLATE!– le grito
 
–Eras solo una apuesta Ana, el solo quería quitarte la virginidad pero eres tan mojigata que se aburrió de ti y yo tuve que pagar por esa apuesta  así que deberías de estar agradecida conmigo– se arregló la ropa y antes de salir de la habitación me dijo– No se te ocurra decirle nada a nadie “hermanita"– y se fue

Sobreviviendo al Amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora