No era volver a Argentina ni tampoco viajar a Italia, el miedo de ambos siempre fue volver a verse, volver a encontrarse y recordar todo lo que vivieron juntos e imaginarse todo aquello que les faltó vivir.
Las promesas que se habían hecho, los te a...
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20.12.22
La noche había caído en Mar del Plata y como era de esperarse, estando en vacaciones, el quincho de la familia Villalba estaba lleno de amigos de Ismael y Uma, los hermanos cada vez que tenian ganas de pasar una buena noche no dudaban en invitar a todos sus amigos y estos en invitar a otros amigos y así era como el quincho terminaba lleno de gente, gente que probablemente los hermanos ni conocían pero no tenían problema en dejarlos entrar.
---Tendrian que vigilar más a toda esta gente.-- hablo Luca, uno de los amigos de Isma.
---Lu tiene razón, a veces mucha gente es pa' cagada.-- le dió la razón Alma, una de las chicas del grupo y la mejor amiga de Uma.
Por más que el lugar esté repleto de gente la rondita principal, dónde estaban los anfitriones, se encontraba siempre en el mismo lugar, a un lado de los asadores abajo de un techito.
---Tampoco es para tanto.-- hablo Uma alargando la "o" mientras le daba otra seca al porro entre sus dedos.
---Habran unas ¿qué? doscientas personas?-- se preguntaba Ismael.
---Es una banda amigo.-- acotó Valentin, el primo de los Villalba.
---Uma, rescatate.-- reprochó Ismael al ver que su hermana iba a preparar otro vaso de fernet.
---Sos un aburrido Ismael.-- dijo dejando el vaso a un lado, por más de que Isma tenga solo dos años de diferencia siempre le hacía caso, la palabra de su hermano era santa como decía ella.
---Te quejas pero siempre le haces caso.-- se burlo Luca haciendo que Uma le diera un empujón.
La noche estaba calurosa, la música retumbaba en cada rincón del lugar, los tragos iban y venían, las personas en aquel quincho la estaban pasando de lo mejor y no era para menos, hacía tan solo dos días argentina había salido campeona del mundo y se seguía festejando en todas partes del país.
El grupo de los hermanos Villalba estaba en su momento más en pedo de la noche y las personas alcoholizadas tienen pensamientos estúpidos y en ese momento surgió uno de esos pensamientos en el grupo.
---Chicos!!-- Ornella llamo la atención de los presentes haciendo que todos la mirarán. ---Jugamos ¿qué se siente?
---Vamos a salir a las piñas de acá.-- dijo Francisco para ser el primero en sentarse insitando a los demás para que formen una ronda en el piso.
---No se vayan al pasto.-- Alma trato de que sus amigos jueguen lo más moderadamente posible, después de todo en ese lugar todos sabían muchas cosas de todos.
