Cinco

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14 de julio del 2023

Estaba tan emocionada, les juro que no sentía nada de lo que estaba pasando, lo único que sentía era que esto era una broma, era difícil de asimilar, pero ahora tenía que concentrarme y enfocarme en mejorar mi físico y y salud.

Había pasado un día de que Ibai y su médico me afirmaran que si podía combatir en el evento, en ese mismo instante me dediqué a buscar un entrenador o entrenadora que cumpliera mis expectativas. Tenía varios contactos de estos pero me decidí por una entrenadora que se veía que tenía mucha experiencia en aquello, y sabía que me podía ayudar.
Me contacté con ella, le expliqué la situación y me dió un si, me comentó que le encantaría ayudarme en mejorar mis músculos estos cuatro meses y que el día de hoy, iniciaría mi rutina de ejercicios, con los respectivos cuidados y así, estaba muy emocionada de este nuevo comienzo, estaba marchando todo bien, como siempre quise.

El equipo de Rubrick me mandó un correo indicando el peso, estatura y cuantos kilos debería de bajar o subir para poder combatir con la contrincante, entre otra información que tenía que saber de dicha persona.
Mi equipo le mandó el correo con mis datos. Este estaba compuesto por mi entrenadora, Claudia Camps y dos ayudantes de ella, Michael Gonzales y Martin Garcia. Ellos me comentaron que tenía que subir solo 4 kilos, ella pesaba 67Kg y yo 59Kg para llegar a pesar 63Kg, así pesaríamos lo mismo, también éramos similar en la estatura, ella media 1,67 y yo 1,65.

Me desperté a las nueve de la mañana, y si no lo comenté, tenía dieta nueva, claramente tenía que comer cosas más saludables pero a la vez no, ya que tenía que subir de peso, por ello, cada vez que terminara mi entrenamiento comería para recuperar y ganar más masa muscular.

Preparé mis cosas, agarré una botella con jugo verde, un asco y salí del departamento y caminando me dirigí a mi nueva "segunda casa". Esta estaba a unas 4 cuadras de donde yo vivía, no sé si estaba acostumbrada a ir por ahí en auto pero no llevaba ni 20 minutos caminando y estaba agotada, sin duda sería un gran reto, pensé que sería más fácil y ni ha empezado el real entrenamiento.

Llegué al lugar, era muy grande, este tenía bolsa de boxeo, muchas máquinas de entrenamiento, y lo más importante un ring de boxeo. Impresionada entro y me encamino hacía la recepción.

-Hola, disculpa, ¿se encuentra Claudia Camps?.-Le dije a una mujer de mayor edad, sonriendo y acomodando mi cabello.

-Me indica su nombre por favor.- A lo que yo le respondí mi nombre.
Ella me mira sonriendo.

-Claro, está allá.-Dice apuntando hacia una esquina.

Le doy las gracias a la señora, miro hacia donde estaba apuntándome y allí se encontraba ella, media 1,75 aproximadamente, para arriba era un tanto ancha, para abajo un tanto delgada, tenía una trenza al costado, sus ojos color cafés claro y una perfecta sonrisa. A un lado se encontraban su ayudantes, los dos eran bastante altos y con buena masa muscular.

Me acerco a ellos, y saludo con la mano a cada uno de ellos.

-Hola, soy Katherine Contreras, mucho gusto en conocerlos.-Digo feliz, me sentía preparada para cualquier cosa, ya estaba segura de mi misma.

-Hola, soy Claudia, y ellos mis fieles ayudantes, bueno para empezar necesitamos ver cuál puede ser tu modo de entrenamiento, recuerda que cualquier cosa mal echa, te puede jugar en tu contra, te advierto que esto no será fácil, serán cuatro meses de mucho trabajo constante, pero si pones de tu parte podremos dar con el objetivo que queremos, empezaremos con algo "fácil" así que primero a calentar, no hay tiempi que perder.- Dice dando un aplauso y ayudándome a hacer el calentamiento.

Temía en equivocarme en algo, me daba miedo estar haciendo algo mal y que la entrenadora solo se burlase de aquello. Cuando era pequeña, solía equivocarme en las tareas y trabajos que me mandaban de la escuela, y cuando pedía ayuda en mi casa, solo se burlaban y no me enseñaban a mejorar, la única que lo hacía era mi madre, gracias a ella pude entender muchas cosas, ella pudo hacer los dos roles, papá y mamá a la vez, realmente la admiraba, ella si era mi ejemplo a seguir, si no fuera por ella, quizás yo ya no estaría en este mundo, pero ahora y más que nunca, estoy segurísima de que mi madre me quiere ver ganar ese cinturón, y si por alguna razón no lo hago, lo volveré a intentar una y otra vez, como ella me lo ha enseñado, de los errores se aprende, y esta no será la excepción.





Yo de vuelta con nuevo cap, este es corto pero quería subirles uno.
Repito y POR FAVOR no juzguen y denme críticas constructivas.
Gracias<3


Disfruten.
M

Encuentro Inesperado • Misho AmoliDonde viven las historias. Descúbrelo ahora