Cuando te miro a los ojos pienso que, definitivamente, te amo, pero amarte duele tanto, te miro a los ojos y pienso que no funcionaremos, eso lo supe desde el comienzo, aún así me empeciñe en seguir, en darlo todo por nosotros, aún sabiendo que cuando miro tus ojos solo miro un futuro vacío, sin brillo, sin ti, por qué tú y yo nunca funcionariamos, lo supe desde el inicio, desde la primera mirada, desde la primera sonrisa, incluso desde el primer beso, ese beso con sabor a karma, con sabor a tormenta, pero fuiste tan adictivo, y tus ojos tan hignotisantes, que no pude parar, necesitaba ese amor con un mal final.
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Insomnio.
RandomPequeños textos de práctica que escribo durante mis noches de insomnio.