LA FAMILIA

CAPITULO 9

POV CAMILA 

Todo estaba saliendo de maravilla, sentía una felicidad tan grande al estar a lado de Lauren, nunca creí en cuentos de hadas pero sentía que en este momento me encontraba en un de ellos. Mire a Lauren quien estaba a mi lado sentada regalando una hermosa sonrisa, era la única que podía llevarme a la lunar y volver, era ella quien podía quemar mi piel con solo verme, era ella mi ángel salvador y de eso no había duda. puso una mano en mi muslo izquierdo y se acerco su rostro cerca de mi oído para susurrar -¿Estas bien?- pregunto viéndome directamente a mis ojos. 

Asentí con la cabeza confirmando con mis palabras -Si ¿y tu?- sonrió haciendo que sus ojos se achicaran un poco. 

-De maravilla, siento todo lo que pasamos estos días cariño, prometo que pondré todo de mi parte para que esto funcione, ¿quieres eso? no quiero imponerte nada- dijo quitando su mano de mi muslo para ponerla en mi mejilla dando ligeras caricias.

-No hay nada que perdonar, ya todo esta olvidado y también pondré todo de mi parte para que esto funcione, lo prometo- su mirada me derretía, acerque mi rostro y deposite un ligero beso sobre sus labios.

Sus ansias no se hicieron esperar y antes de que yo me separara de ella me sujeto bien de la cara y me beso mas pasional, sentí su lengua pidiendo permiso para entrar y se lo concedí, nos estuvimos besando así hasta que sentí bajar sus manos a mis piernas, nos olvidamos de la fiesta e invitados, solo éramos Lauren y yo besándonos como nunca antes había besado a nadie como a ella. Ella acariciaba de arriba hacia abajo mis piernas lo que hizo que soltara un gemido y se separara de mi, pude ver sus ojos, ya no eran verdes, se lograba ver sus pupilas grandes y un pequeño circulo verde al rededor de ellas, toda su mirada se podía percibir que era de lujuria. trague saliva al no saber que hacer o decir, sentía completamente mi cara arder, sus manos aun seguían en mis piernas iba a decir algo cuando una morena alta, con cabello rubio, con un cuerpo de muerte se acerco a nosotras interrumpiendo el momento. 

-Carajo Laurenzo, vemos que estas ansiosa por tu noche de bodas- dijo ella con una sonrisa coqueta haciendo que mis mejillas supusieran aun mas coloradas, Lauren ni siquiera la miro, no dejaba de verme -ya veo, lolito esta ansioso por salir de aquella prisión en lo que lo tienes encerrado- dijo golpeando su hombro haciendo que Lauren saliera de aquel trance en el que se encontraba. Miro a los lados y pudo ver aquella rubia con una sonrisa malévola, giro sus ojos y le sonrió pero no se levanto a saludarla, se mantuvo sentada pero extendiendo sus manos para que la rubia bajara a saludarla. 

-Hola Dinah, que bueno que pudiste venir, ¿Alexa también vino?- pregunto Lauren, no sabia quien era aquella rubia ni que tenia que ver con Lauren y mucho menos esa tal Alexa. No me fije que aquella mujer me veía con suma precisión y sin dejar de sonreír. 

-Oh cariño mío te has casado por supuesto que iba a venir, pero que mal educada al no ponerte de pie- dijo en tono de burla -y mas mal educada al no presentarme a esta fiera que esta a punto de destrozar mi hermoso rostro si no me sueltas querida y si eh venido con Alexa y su novia Hippie- Lauren la soltó haciendo una mueca, calcule que quizás aquella rubia era de su edad pues no se veía vieja.  

Lauren se acerco a mi y me susurro al oído -Amor ¿te podrías poner de pie y situarte enfrente de mi por favor?- no entendía por que quería que hiciera aquello pero lo hice, recorrí mi silla y me di la vuelta de tras de nosotros ponerme a un lado de ella, hasta que se paro y pude situarme enfrente de ella, sentí como me rodeo con sus manos en mi cintura y ahí estaba algo pinchando mi trasero, abrí los ojos por que caí en cuenta de que era aquello. 

Dinah no dejaba de sonreír burlonamente y Lauren se inclino un poco hasta mi oído -Disculpa cariño, pero me emocione por el beso- me dio un ligero beso en mi mejilla - ella es una amiga de California amor, Dinah Jane son de las pocas amigas que tengo, es una excelente diseñadora- dijo Lauren haciendo que aquella mujer extendiera su mano.