CAPITULO 4

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POV CAMILA
Me levantaron las ganas de vomitar, estaba amando estar embarazada pero esta parte no era mucho de mi agrado. Después de vomitar toda la cena, cepille mis dientes y decidí darme una ducha para después salír en busca de un atuendo adecuado para el desayuno con Lauren. Aunque no habia dicho a que hora desayunariamos, Lauren era una de las personas más madrugadoras de esta casa, incluso he llegado a pensar que no duerme ya qué las veces que he preguntado a las personas que trabajan aquí me han dicho que ya se encontraba trabajando en su estudio.
Decidí vestime con un vestido sin manga ajustado a mi torso y de largo hasta mis rodillas suelto de la cintura para abajo llevaba a juego un cinturón pero últimamente me sentido que mi ropa me ha dejado de quedar colgada como antes y más justa así que decidí descartarlo, era un vestido hermoso blanco con puntos negros al cual decidí ponerme unos zapatillas de tacon bajo color rojas, maquille mi cara lo más natural posible pero con los labios rojos. Cuando baje me encontré con Normani poniendo la mesa en la parte del jardín.
-Buen día Normani- dije
-Buen día señora Camila, ¿como se encuentra el día de hoy?- dejo un momento de acomodar la mesa para centrar su mirada en mi.
-Por dios Normani, solo dime Camila, te he dicho que hasta somos de la misma edad puedes tutearme- camine hasta ella para darle un ligero golpecito en el hombro.
Normani era una mujer de mi misma edad tenía 25 años, de tez morena y aun que había personas buenas en Sitka qué aceptabamos a las personas de color también habían personas que pensaban que tener un tipo de piel diferente no te hacia merecedor de pertenecer a la sociedad y ser un esclavo. La familia de Normani según se por ella misma se han dedicado a servir a los señores Jáuregui desde antes, y cuando Normani supo de la disponibilidad de trabajo en esta casa no dudo en pedirle a los señores Jáuregui para que pudieran darle el puesto de cocinera, es la mejor cocinera créanme.
-Tuterala sería faltarle el respeto señora y temo que a la señora Jáuregui no le guste que la llame por su nombre- dijo Normani haciendo que revirar los ojos -pero muchas gracias señora Camila- dijo regalándome una sonrisa y haciendo mi silla hacia atrás para que pudiera sentarme.
-¿Lauren ya se encuentra despierta?- Pregunte aun que ya sabía la respuesta.
-Si señora, me ha pedido que en cuanto usted despertará le avisara para que la acompañará a desayunar- le di una ligera sonrisa a Normani.
-Podrías decirle que ya me encuentro esperándola para desayunar por favor- pedí a Normani.
-Enseguida señora, ¿gusta algo de tomar mientras espera?- pregunto señalando la taza jarra de café qué se encontraba en el centro de la mesa circular y el jugo de naranja.
-No te preocupes ve hablar a Lauren yo me sirvo un poco de juego- tome la jarra de jugo y un vaso para servir solo un poco, Normani se adentro a la casa para hablar a Lauren mientras la esperaba.
Tome unas cuantas uvas qué se encontraban en un plato de loza junto con otras frutas, pero el ver las uvas verdes ahí habían deseado comerlas tanto. Mi madre decía que mientras una mujer está embarazada y se le antojaba comer algo era necesario hacerlo o sino empezaría con dolor hasta que comiera lo que deseara, ese era uno de los pocos consejos que he recibido por parte de ella. Me ha afectado un poco el distanciamiento de mis padre ya qué siempre fuimos muy unidos, estaba tan sumida en mis pensamientos que no se tu cuando Lauren se sentó a un lado de mi, pude notar su mano moviéndose de lado a lado como despidiéndose enfrente de mi cara.
-¿Te encuentras bien?- pregunto dando me una mirada de preocupación.
Le di una ligera sonrisa y asentí con mi cabeza - Buen día como amaneciste-  dije aun sonriendo.
-Bien gracias ¿Tú? - tomo la servilleta y la puso en su regazo. No me había fijado bien hasta ese momento que llevaba un pantalón negro pegado a sus piernas, una blusa tipo polo blanca con una linea negra definiendo solo las mangas y el cuello, llevaba su cabello en una coleta alta con unos lentes negros los cuales ya se había quitado, supuse que quizás había montado más temprano.
-Bien, náuseas matutinas pero bien, he estado acostumbrandome a ellas, ¿Haz montado?- dije señalando su ropa.
-Si quieres podemos mandar hablar al Dr. Simón para que te revise- negué rápido - de acuerdo se hará lo que tu quieras, solo quiero que estén bien y si he montado muy temprano necesitaba desestresarme de alguna manera en lo que puedo acomodar mi estudio para pintar.
-Pensé que ya tenías todo arreglado en esta casa- dije.
-Si veras, no tuve tiempo de traer las cosas por que estuve revisando con mi padre que las habitaciones estuvieran adecuadas tanto para ti como la de tu bebe- ahí estaba, ella remarcaba qué no era su hijo, se preocupa quizás por el compromiso que le hizo mi padre pero había quedado claro que no se involucraría con el bebé y conmigo.
-Claro- fue no único que pude decir, tuve un sentimiento fuerte y unas ganas de llorar no entiendo el por que.
Mientras desayunabamos ya me encontraba con poco apetito pero tenía que comer quisiera o no por el bebé, Lauren me hizo preguntas casuales de mi vida, como cual era mi nombre completo, el cual era Karla Camila Cabello Estrabao pude darle todo esos datos pero sabía que quería preguntar por el bebé era algo que tarde o temprano haría.
-Hablame del papá del bebé, ¿Qué paso con el Camila?- aun que su voz sonó muy baja pude escuchar esa pregunta como un susurro.
-Hace dos años conocí a un joven que trabajaba para mi padre en la casa, su nombre era Shawn Mendez, al principio cuando lo conocí no me acercaba a él por que a mi padre no le gustaba que habláramos con las personas del servicio pero conforme pasaban los meses y en los momentos en los que salía a leer al jardín pudimos entablar conversaciones de varios temas, me conto qué era de Canadá, de su familia, del por qué estaba en nuestro pueblo y de que sabia tocar la guitarra y componer canciones. Fui creando un sentimiento de cariño o amor, no sabría bien como definirtelo- y era cierto, jamás había amado a alguien y no sabía cómo llamar a lo que había vivido en esos años con Shawn -Empezamos a tener una relación al año de conocernos pero era a escondidas por mis padres, el siempre me respeto y comprendió qué no éramos de la misma clase social- Lauren tenía su mirada en mi completamente sería, atenta a lo que le estaba contando -Hace como seis meses Shawn me pedía estar con el para demostrarle que de verdad lo amaba, y me negué muchas veces- sentí mis ojos cristalizarse y la mano de Lauren sujetando la mía -Porque sabía que no era correcto estar con el antes del matrimonio, yo quería hacer las cosas bien. Su incistencia solo aguanto tres meses atrás cuando me cito para vernos en una parte alejada de la casa de la casa de mis padres y accedí, como ya no insistía supuse que podríamos seguir estando bien, pero no fue asi- sin previo aviso las lágrimas cayeron de mis ojos y solo pude sentir los brazos de lauren al rededor de mi y sentir como me levanto para llevarme a su regazo mientras seguía abrazándome y besando mi cabeza. No se cuanto tiempo estuve llorando y pude tranquilizarme continue contándole a Lauren - Hace tres meses Shawn Mendez me violo Lauren y huyó para que mi padre no lo matara. Fui la decepción de mi familia y de mi misma por creer en alguien quien tenía pensamientos malos. Cuando supe que estaba embarazada mis padres se distanciaron de mi pero aún me cuidaban, buscaban muchas alternativas para mi e incluso me habían dicho que habían escuchado de alguien que podría hacer qué yo no tuviera a este bebé- lleve mi mano al vientre- me dijeron que no debía tenerlo, pero es que él no tiene la culpa de esto Lauren, solo yo- sentí un fuerte abrazo más y escuchar su respiración a prisa.
-Te juro Camila qué no les faltara nada a ti y a tu bebé, yo los cuidare con mi vida y tendrás en mi una amiga mas- Le creí, sus ojos me daban tanta confianza que le creí al momento de decir esas palabras -Pero ten en cuenta algo, si ese hombre llega aparecer de nuevo por este pueblo, no va haber piedra qué lo logre esconder de la muerte segura que tiene, lo que te hizo es imperdonable y serás mi esposa, con su muerte te daré honor- beso por última vez mi cabeza y empezó a darme desayuno a la boca -Tienes que comer por el bebé y por ti.

No me equivoque cuando nombre a Lauren nuestro ángel.

Los días pasaban pero eran diferentes a los anteriores, hablábamos más he incluso tomábamos paseos por el jardín; sentía a Lauren más suleta a la hora de hablar y sonreir más, tenía una risa como la de un bebé y era hermosa. Sentí en mi interior empezar a quererla, había días en el que me contaba como plasmaba algún paisaje con solo verlo una sola vez, dijo que cuando quisiera podría enseñarme a pintar e incluso hacia bromas al decir que yo podría ser su musa. Todo iba bien y habíamos olvidado por completo la boda, hasta hoy, dos noche antes de la boda, sus padres organizaron una cena junto con mi familia y amigos de ellos para presentarnos oficialmente como una pareja comprometida. Ella lucia hermosa y es que me había vuelto admiradora de Lauren, estaba vistiendo un traje hecho a su medida negro con unas zapatillas negras y una blusa color blanca; me había pedido dos cosas 1. Maquillarla un poco, hasta bromee un poco al decirle que no quería que dejara qué alguien hablara o coqueteara con ella, pero en lugar de que le diera risa, se puso seria y enojada "Quien hablaría con un fenómeno como yo Camila"  fue la respuesta que me dio a lo que pedí disculpas, el ambiente se había tornado incómodo y no hablo hasta que me pidió la segunda cosa 2. No separarme de ella, como ya no quería ponerla en una situación incomoda solo asentí con la mirada. Solo esperaba que todo saliera bien y terminará rápido para poder estar en nuestra casa.

LA FAMILIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora