Capitulo 6

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Capítulo 6
Narra Zelene:
Era por la mañana y estaba haciendo ejercicio,  di un par de vueltas por la casa y luego decidí ir a la playa con Masami para tomar un poco de sol.
Hacía todo lo posible por no pensar en las palabras de doble sentido de Karim o en Asher, quien me ignoraba y luego me escribía como si nada hubiera pasado, llenándome de excusas para no atender mis llamadas.
Regresamos a casa alrededor de las nueve de la mañana. Y me encontré con Karim en la habitación, empacando cosas en una maleta.
-¿Qué estás haciendo?.
Pregunté nerviosa.
Karim me miró y pude ver tristeza en sus ojos.
-Mi padre está enfermo, así que tengo que viajar a Paquistán.

-¿Qué le pasó?..
Pregunté preocupada.
-No lo se, mi hermana solo me dijo que está hospitalizado.
-¿Debo acompañarte?.
Pregunté comprensiva.
-No, y espero que no hagas ninguna estupidez mientras yo no esté.

***
Karim se fue ayer por la tarde, así que aproveche para relajarme.
Me encontraba desayunando y hablando por mensaje con Asher.
Mensaje de Ash: ¿Cuánto tiempo se quedará en Paquistán?.
Mi mensaje: No lo sé, ¿por qué?.
Mensaje de Ash: Escápate conmigo.
Mi mensaje: No, no podría hacer algo así...

Mensaje de Ash: Piénsalo, solo tú y yo viajando por el mundo como siempre quisimos.

Dejé el mensaje en visto y comencé a recolectar flores en una canasta para llevarlas a la habitación.
-Señora Zelene, su esposo ha llamado para decir que regresará en una semana.
Dijo la ama de laves apenas regresé.
-Muchas gracias, Elena.

¿Así que tendré una semana tranquila y libre de quejas? Pensándolo bien, la idea de Ash no sonaba mal.
Siempre habíamos soñado con viajar por todo el mundo, pero me preocupaba la reacción que tendría Karim.
Aunque, esta podría ser mi única oportunidad de ser libre.
Mi mensaje: Tenemos una semana.
Mensaje de Ash: Buena decisión, nena.

Definitivamente tenía muy mala suerte.
Al día siguiente, Karim había regresado. Tuve que escribirle a Asher para decirle que no podría irme porque Karim estaba de regreso.
El resultado no pudo ser peor. ya que Asher se enojó conmigo y dejó de hablarme.

-¡Te traje un regalo! Querida.
Miré a Karim enojada.
-¿Qué es? ¿Una varita mágica para desaparecer?.
Él me miró con una sonrisa estúpida, tomó mi mano y comenzó a jalarme del brazo.

-¿Cómo está tu padre? Y ¿Cómo regresaste tan rápido?.
-Regresé antes porque tengo un avión privado y puedo viajar directo. Además, cuando llegué al hospital, mi madre y yo decidimos traer a mi padre aquí para que lo atiendan mejor.
Karim no soltaba mi mano en ningún momento y eso me ponía nerviosa.

***
El regalo consistía en unos chocolates, un abrigo y para colmo una cita romántica, así que aquí estaba yo en un restaurante en la playa con Karim.
Había pedido una ensalada y una lasaña de pollo para comer. Aunque lo único que quería era desaparecer.
-¿Y cuántos años tienes?.
preguntó Karim con curiosidad.
¿Es en serio? pensé.

-Soy tu esposa, Karim, deberías saber eso.
Respondí exasperada.
-Yo tengo 24.
Contestó.
-Y eso a mí qué me importa, Karim.

Narra Karim:
Estaba haciendo todo lo posible para entablar una conversación civilizada con Zelene, como mi madre me aconsejó pero nada funcionaba.
Esa niña me odiaba. hablamos durante una hora y nunca cambió su expresión ni su tono, hasta la invité a bailar.
Como último recurso la llevé a dar un paseo por la orilla de la playa.

-Odio el mar de noche. Quiero irme de aquí.
Era lo único que repetía esa niña todo el tiempo mientras estuvimos ahí.
Así que se me ocurrió cargarla y meterla al agua, pero eso terminó peor.

-¡Mi cabello! Eres un tonto, Karim. ¡Ya déjame en paz!.
Y así terminó mi cita con Zelene.
Ella gritándome como una loca y yo persiguiéndola intentando no sacudirla enfrente de todo el mundo.

Cuando llegamos a la casa, todo explotó. Continuamos gritándonos y ella me empujó, haciendo que me golpeara con un florero, éste se rompió y yo caí de trasero dándome un golpe en el brazo con una mesa.
Zelene estaba tan asustada cuando me vio en el suelo que salió corriendo y se encerró en la habitación.

Narra Zelene:
Sólo podía escuchar el sonido de la puerta al recibir los golpes de Karim. Sus gritos me tenían apavorada.
Pensé que la puerta se caería. Mi cuerpo temblaba de miedo, savia que estaba en serios problemas.

La puerta permaneció serrada con seguro durante toda la noche.
Por suerte Karim no pudo entrar.

Así que estaba decidida, no iba a quedarme aquí para recibir una paliza o algo peor.
Anoche, a eso de las tres de la mañana, le escribí a Asher diciéndole que iba a escaparme y en dónde nos encontraríamos.
Después de comprobar que él hubiese visto el mensaje, lo borré.
Estaba lista.

Lancé mi mochila por la ventana y abrí la puerta con cuidado para asegurarme de que no había nadie.
Caminé silenciosa por los largos pasillos hasta llegar a la puerta.
Salí de la casa sin ser vista por la puerta de atrás, como me había enseñado Masami, sin saber que su revelación me sería útil después.

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