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JUYEON


Su mano estrechó la del contrario, ahora sonría con amplitud haciendo que sus ojos se achicaran.

-Entonces ya está, dame a la chica - Dijo refiriéndose a Alma. Avanzó algunos pasos con la intención de acercarse a ella, pero fue detenido por Younghoon.

-Iré contigo, no creas que hice este sacrificio por nada- Habló Younghoon con un rastro de dolor en su voz. Su semblante era sombríos, aún tenía sangre en la mitad de su rostro.

Juyeon se detuvo a mirarlo por un momento, y entre más lo hacía, menos podía comprenderlo. Él sabe lo especial que es Alma, pero ¿por qué? ¿Por qué a Younghoon le gusta? ¿Por qué, siendo el Dios de la Belleza, sacrifica una parte de su rostro? ¿Él también haría lo mismo por Alma? Esta última pregunta lo dejó pensando por un momento más; no estaba seguro si podía sacrificar algo de él para traer de vuelta a su chica, siempre fue ella la que sacrificaba algo por el bien de Juyeon. Se preguntó si de verdad la quería o solo no quería que Younghoon estuviese con ella.

- Como quieras - Dijo Juyeon con intención de parecer despreocupado. Fue donde estaba el cuerpo de Alma, la movió un poco hasta que la tuvo en sus brazos. No era la misma... aquel cuerpo era completamente humana, tenía la apariencia de su chica, pero no como la recordaba por última vez.

- Los dioses de acá arriba son unos idiotas ¿No te advirtieron nada? La magia negra es confusa y engañosa, si no la estudias te va mal, tenías que dar una vida por otra. Pero agradezco lo que hiciste, de ella no quedaba nada, fue un gran avance que tengamos su cuerpo.

(...)

Younghoon se mantuvo en silencio y en lo que quedaba del día decidió seguir a Juyeon, por supuesto que aquella idea no le agradaba. Por otro lado Juyeon disfrutaba de aquello, ocultando el hecho de que estaba preocupado por Alma. Tenía miedo de que no fuera la misma y que sus recuerdos como semidiosa ya no estén. No confiaba mucho en Sombra, no confiaba para nada en ese ser.

Tomaron el camino más fácil a su escondite, llegando en menos de cinco minutos, todo gracias a Sombra y sus grandes habilidades espacio-tiempo.

- Tengo que advertirte una cosa - Habló Juyeon al encontrarse en la sala en dónde él había despertado. Miró de reojos al contrario quién también lo miraba- No siempre soy yo, aveces alguien más es quien controla mi cuerp...

- Vaya, ya volviste - Interrumpió Lizzy entrando a la habitación.

Younghoon la miró, y por un momento su mente quedó en blanco ¿estaba viendo una semidiosa? ¿Una como Alma? No entendía lo que pasaba pero sabía que esto era obra de Juyeon y de ese Sombra.

- Vaya, que oportuna- Respondió con ironía. Lizzy lo ignoró y se acercó al cuerpo de Alma, quién yacía en una mesa.

- ¿Es ella la del alboroto? Es una simple humana, se ve mucho mejor muerta con el cuerpo congelado - Con su dedo picó la mejilla de la chica.

Younghoon frunció el ceño como acto de desaprobación. Por otro lado Juyeon sólo sonrió de lado.

- Es cierto, me gustaba más cuando era semidiosa y su piel era más fría - Admitió el Dios del inframundo para luego poner la mano en su cabeza mostrando un poco de inquietud. Younghoon y Lizzy se mantuvieron expectantes.

"Chico, hagamos esto de una vez" Aquellas palabras sonaron en la cabeza Juyeon, quién mantenía su rostro fruncido debido al dolor de cabeza que le generaba Sombra. Poco a poco fue perdiendo el control de su cuerpo,y aquel ser sin rostro lo tomó.

LA SOMBRA DE LA OSCURIDAD   ͟͟͞͞➳ The BoyzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora