¡Riley! | Ghost x FemReader

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En la armada están acostumbrados a trabajar con unidades caninas cualificadas para llevar a cabo una serie de tareas como rastreo de personas, drogas, bombas, protección de personas u objetivos o incluso ataque a intrusos y enemigos. El Servicio Aéreo Especial o SAS siendo un regimiento de las fuerzas especiales del ejército británico, por su parte no serían menos. Una nueva camada de pastores belga de alrededor de 1 año llegaron ante los ojos de John Price y Soap MacTavish, líderes de las fuerzas operativas 141, quienes esperaban con ansias que estos pequeños animales pudieran trabajar con y para ellos en las próximas misiones.

Estos pequeños animales eran 5 malinois, perros extremadamente activos, difíciles de manejar, muy complicados de educar pero muy efectivos para su trabajo. Esta pequeña camada había sido rescatada de un hogar en el que eran maltratados tanto física como psicológicamente. Tanto las 2 hembras como los 3 machos eran miedosos a más no poder, ladraban y gruñían continuamente a modo de defensa y no dejaban que nadie se acercara a ellos. Llevaban un tiempo intentando tratar con ellos, pero se veían como casos perdidos. Price y Soap no quisieron darse por vencidos con ellos, por lo que trataban a toda costa encontrar una solución. Al tiempo fueron conscientes de que estos animales parecían estar más agresivos al haber hombres presentes, por lo que llegaron a la conclusión que sus antiguos dueños serían hombres, por lo general y los temían por ello.

Es por esto que la primera decisión tomada por estos dos soldados para comenzar con su entrenamiento sería conseguir encontrar a un candidato válido que fuera capaz de estar en presencia de los perros sin que estos salten a morderle. El trabajo sería sencillo, calmarlos y estabilizarlos, para después educarlos. Aquí entra ___, un soldado cadete de rango bajo.

___:

"Esta chica apenas tenía los 18 años recién cumplidos cuando entró a la armada y lleva 2 años de servicio, con nacionalidad británica-española y un breve historial dentro del SAS. Su padre había sido parte de la armada desde joven, llegando hasta ser sargento de un escuadrón, es por eso que ella también siguió sus pasos. Por desgracia, este tuvo que jubilarse muy temprano por problemas físicos. Él tenía un característico interés por los canes, y en su tiempo libre a partir de entonces aprendió a adiestrarlos para todo el ambiente militar y policial, a los 35 años más o menos. Es por esto que___, desde pequeña en su tiempo libre intentó aprender un poco de todo lo que su padre sabía, ya que ella adoraba a estos animales."

Price y Soap por lo tanto no perdieron la oportunidad y decidieron contactar a esta cadete a primera hora de un día caluroso de verano. A las pocas horas juntaron a todo el escuadrón con esta nueva y joven chica para entre todos evaluar qué tan válida era para trabajar con los perros, pero sobretodo, cómo podrían conseguir sinergias dentro del campo de batalla con ella.

Todos los soldados se encontraban en la misma sala: Price, Soap, Ghost, König, Gaz, y Alejandro. Después de esto, ___ entró donde los hombres, pero separados en la misma sala por un cristal reforzado entre ellos

"Buenos días." Saludó a todos los soldados con una sonrisa y una pequeña reverencia. "Un gusto conocerlos."

"Buenas, ___. Soy el capitán de las Fuerzas Operativas 141, Price. Encantado." Respondió Price ante su amistoso saludo "Nos gustaría ver qué tal te manejas con los perros de primeras, ¿te parece bien?"

"Sí, perfecto." La chica asintió y sonrió una vez más. "Me dijeron que con esto también buscan aumentar vuestra plantilla de soldados, ¿es así?"

"Así es..." Respondió un hombre con acento escocés. "Soy Soap, segundo líder de este escuadrón. Buscamos a una persona cualificada tanto para tratar con los perros como para tenerle de refuerzo en nuestro escuadrón."

"Entendido"

Ella no esperaba realmente que la escogieran para ese puesto pues era apenas una cadete veinteañera que sabe cuidar de "perritos" y adora pasar tiempo con ellos. No sabía demasiado de combate cuerpo a cuerpo, y pocas veces había usado un arma, llevaba relativamente poco tiempo allí y aún estaba acabando los entrenamientos de iniciación.