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—aparentar es la solución de los problemas
POTTER SE PREPARABA PARA SALIR A SU CASTIGÓ, al principio su primer plan era no ir y si era a la fiesta pero fueron arruinados por el Black mayor, el cual siempre parecía estar cerca de ella observando la y mágicamente aparecía en los pasillos en los que ella estaba, dándole miradas burlonas haciendo enojar aún más a la pequeña James. Su segundo plan fue esconderse en su armario compartido pero también falló al ser vista por el secuaz del idiota de su profesor de defensas. Su tercer y último plan fue aceptar que no podría salir de su castigó, así que tomó un bolso hecho ropa y libro por encima de esta para disimular.
Porque su último (y para ella) perfecto plan sería noquear a Regulus y saltar por la ventana siendo mágicamente salvada por su escoba.
Mientras que caminaba, exalaba y botaba el humo lentamente, la oscuridad la abrazaba aunque no del todo ya que llevaba una pequeña lamparita que Sirius le había regalado, llevaba el mapa del merodeador en su otra mano.
Amaba ese mapa Con todo su corazón, se acordaba de aquel pedazo de papel que llegó a sus manos, tenía tan solo tenía 10 años y era el cumpleaños de sus padres, ese día Sirius y Remus se sentaron con los mellizos hablaron una y otra vez de las muchas aventuras que habían tenido James y Lily, la emoción de la pequeña Potter fue tanta que anhelabas pasar por sus propias aventuras y contárselas a sus tíos. Después de esa charla Le regalaron el mapa del merodeador, siendo utilizado por ambos Mellizos pero más por James.
Se detuvo cuando al final del pasillo vio una luz y a dos personas, dos más grande y la otra de una estatura más pequeña.
–¿A dónde ibas? —pregunto el mayor que James reconoció al instante.
—yo solo iba a las cocinas por un bocadillo —era una voz aguda de niño se podía escuchar algo intimidado.
—no crees que es un poco tarde para ir a comer
—me suele pasar siempre a media noche —hablo el pequeño.
Regulus suspiro y sacó lo que parecía ser una barra de chocolate, y se la dió al pequeño haciendo que esté saltará feliz.
—gracias profesor
El hombre río nasalmente y sacudió el cabello del pequeño.—regresa a la cama, antes de que el gruñón de snape te vea
El chico rio y asintió para luego irse. James al ver cuan lejos estaba el pequeño decidió cambiar hasta el hombre no sin antes apagar el cigarro con su pie.
–veo que no es tan malo como pense—James lo miró y este a ella haciendo una sonrisa con sus labios.
—no pensé que fuera llegar —su voz varonil hizo bufar a la Potter.
—tampoco es que me haya dado tantas opciones —se cruzó de brazos y fijo su vista en la debil llama de la vela.—se la pasó arrastrado detrás mío como un perro
