Capítulo 4: Festival de los cerezos.

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La noticia de que el café familia había reabierto sus puertas de nuevo, atrajo de nuevo a personas que fueron a disfrutar de un buen café de aquel local, y todo iba de maravilla, tanto para las chicas como incluso Vicente.

- Aquí tienen, su gelatina de café y su cappucino. - Ouka traía un pedido a un cliente lo que había pedido.

- ¡Va otra orden! - Riho se volteó a ver a Vicente mientras ella tenía una libreta con los pedidos de los clientes.

- Recibido. - Asentí con la cabeza con una sonrisa para preparar la orden.

Y parecía que el negocio volvió a tener de nuevo clientes, dejando ver qué después de que se anunció que se reabrió las puertas. Las personas empezaron a venir al café.

- Dos mezclas de la casa. Disfrútelo, por favor. - Diría Ouka con una sonrisa poniendo en una mesa los pedidos de unas dos chicas que habían pedido un café y cada una diferente rebanada de pastel.

- Hoy no tenemos muchos clientes. - Shiragiku se percató que no tenían muchos clientes, para voltear a ver a Vicente con una sonrisa.

Eso lo sabia, creo que había una parte de la ciudad que sabe de la reapertura del café pero del otro lado no...

Porque todo eso fue una expectativa mía, que solo había pocos clientes.

Ami por su parte ella estaba lanzando golpes al aire como si ella estuviera practicando.

- ¡Ami! ¡No te pongas a entrenar mientras trabajas! - Decía viendo a Ami con algo de molestia de que no se ponga a entrenar mientras está trabajando.

- Es que.... - Ami volteó a ver de qué solo quedaba muy poca gente en el café, solo había una clienta.

Más tarde.

- Hoy no vienen clientes, ¿Eh? - Akane pregunto dudosa de que era extraño que ya no había más gente en el café, a diferencia del día cuando se reabrió el local.

- Bueno, ya que hace una semana que reabrimos. Era de esperarse.. - Decía mientras me rascaba la barbilla de que pasó una semana desde que el local reabrió y será que poca gente viene.

- Lo comprendo, pero... ¿Por qué entonces tienes esa cara de preocupación? - Akane respondió que entendía eso, pero el ¿Porque Vicente tenía una cara de preocupación como si los nervios de su cuerpo estuvieran altos?

- No me creo que mis acciones cayeran y acabáramos con problemas económicos. - Cerré los ojos para desviar un poco la mirada de que no estoy seguro que nos acciones cayeran, ya que si eso pasa entonces tanto yo como las chicas estaríamos en bancarrota. - Tengo que pensar en algo.. - Comencé a pensar mientras estaba rascándome la cabeza.

Akane por su padre apoyo sus codos sobre la mesa y apoyar su cara en sus manos mientras ella veía al pelinegro.

Akane por su padre apoyo sus codos sobre la mesa y apoyar su cara en sus manos mientras ella veía al pelinegro

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