La esperanza de los Shiba [Taiju Shiba x Lectora] Vol. 2

CAPÍTULO 5

Me encontraba recogiendo mis cosas, quedaban poco menos de 5 minutos para que terminara el día de hoy en el trabajo. Mientras metía algunas cosas en el bolso, escuché la puerta del despacho del Sr J Nishimura.

Sr J Nishimura ¬ ¿Ya te vas? - dijo desde el otro lado de mi mesa.

T/N ¬ Si, ya he acabado por hoy - me colgué el bolso y salí de detrás del escritorio

Sr J Nishimura ¬ ¿Has acabado por hoy? - asentí confundida ya que es lo que le acababa de decir y su tono decía que no se lo había creído.

T/N ¬ He preparado sus reuniones de mañana, las tiene en su correo, también le he programado un encuentro con una posible cliente, fue victima de violación por un pez gordo de un banco, también tendrá en su correo todo lo necesario de la victima y de su supuesto agresor - el hombre se me quedó mirando sorprendido.

Sr J Nishimura ¬ No has acabado - lo miré confusa.

T/N ¬ Pero he hecho tod... - fui interrumpida por el golpe de unos papeles sobre la mesa - ¿Qué es eso?

Sr J Nishimura ¬ Tu trabajo - parecía enfadado.

T/N ¬ Pero en mi contrato no se habló nada sobre horas extra - ni se inmutó.

Sr J Nishimura ¬ Trabajas para mi, así que si no te gusta te marchas - lo escupió como si fuese veneno.

T/N ¬ Lo tendrá listo para mañana - susurré

Sr J Nishimura ¬ Más te vale si quieres mantener tu puesto - se marchó dejándome sola en el lugar y posiblemente en todo el edificio.

T/N ¬ "No puedo perder el trabajo" - dije para mi misma y volví a sentarme en el escritorio - Si Taiju se entera de esto se enfadará, tengo suerte de que hoy cene con los chicos del restaurante.

Comencé a trabajar y cada papel que leía me hacía darme cuenta que no había necesidad de tener que tenerlo listo ya, todas tenían fechas de cumplimiento que nos dejaban dos o tres días de margen.

Miré el reloj, eran las 18:37 p.m y acababa de empezar, tenía suerte si acababa antes de las 21:00 p.m, sino tendría que pedir un taxi hasta casa, no iba a ir en el metro a esa hora, podía ser peligroso.

Lo terminé todo y eran cerca de las 22:00 p.m, la espalda me dolía demasiado y los ojos me escocían de haber estado tanto tiempo frente a la pantalla. Bajé en el ascensor y cuando las puertas se abrieron en la planta baja, aquello parecía una película de terror, todo oscuro, sin movimiento y la única luz era la del despacho del vigilante.

T/N ¬ Buenas noches - dije al salir.

Vigilante ¬ Buenas noches, señorita - habló algo sorprendido y me abrió la puerta, ya que estaba cerrada por seguridad.

Seguí andando hasta el borde de la acera y levanté la mano con la esperanza de que pasara algún taxi. Tras unos 5 minutos y rechazar la oferta de un hombre con unas pintas poco fiables, se paró un taxi vacío.

Taxista ¬ Buenas noches, ¿dónde desea ir? - puso el gps

T/N ¬ ¿Puede llevarme a dos sitios? - el hombre asintió y le dije las dos paradas y el orden.

La primera fue una farmacia 24h donde compré crema para el dolor de espalda y algunos colirios para el escozor de ojos, después me subí al taxi y el hombre me llevó hasta casa.

Al llegar abrí la puerta despacio, pero todo estaba apagado, así que Taiju aún no había llegado. Resoplé y dejé los zapatos en la entrada y después el bolso en el despacho. Fui hasta la habitación para coger el pijama y darme un buen baño, tras la cual me embadurnaría en crema y me echaría el colirio.

Cuando estaba en la bañera, escuché la puerta del baño abrirse, miré hacia el lugar y vi a Taiju, el cual estaba algo sorprendido. 

Taiju ¬ N-no sabía que estabas bañándote - se me escapó una risilla al ver como sus intentos de no mirarme eran un fracaso.

T/N ¬ Taiju, puedes mirarme - lentamente subió la mirada del suelo.

Taiju ¬ No es cristiano que te vea así antes de casarnos - rodé los ojos.

T/N ¬ No se ve nada con la espuma, solo mi cabeza - en ocasiones que Taiju sea tan devoto podía darme algo de ¿rabia? No sabría como decirlo.

Taiju ¬ Vale, pero no hagas nada Te conozco - medio amenazó entrando al baño.

T/N ¬ ¿Cómo qué? ¿Esto...? - hice el intento de levantarme, pero seguía tapada con el agua de clavículas para abajo.

Taiju se dio la vuelta tan rápido que las cosas de los bolsillos se le podían haber caído por la fuerza al girar, pero yo solo pude reír.

T/N ¬ Es una broma - me miró de forma amenazante - ¿Te has enfadado?

Taiju ¬ ... - me miraba fijamente, cada vez que se enfadaba hacía lo mismo y no me hablaba hasta que escuchaba una disculpa digna de confesionario de iglesia.

T/N ¬ Taiju - se dio la vuelta y se fue - ¡¡TAIJU!! - puse la mano en mi boca para evitar que se me escuchara mientras me reía, si era capaz de oírlo seguro que se enfadaba aún más.

Terminé el baño y salí vestida con el pijama, Taiju estaba sentado en el sofá con el portátil. Fui hasta él, le quité el objeto de las manos recibiendo una mirada extrañada de él. Me senté en la mesita de té quedando de frente.

T/N ¬ Perdón, a veces se me olvida lo devoto que eres y lo mal que te sientan algunas cosas o bromas que te hago. Demasiado que aceptaste dormir en la misma cama que yo sin estar casado - la miré haciendo un pequeño puchero, sabía perfectamente como tenía que actuar para ser perdonada.

 Taiju ¬ Vale, te perdono - sonreí - Pero deja de hacer cuento, se que lo vas a volver a repetir - dijo burlón.

T/N ¬ Que poca confianza - crucé los brazos y aparté la mirada haciéndome la indignada.

Poco después comenzamos a reír, le pregunté a Taiju sobre la cena con los trabajadores del restaurante y me habló muy feliz, eso me hacía quedarme tranquila, ya que no quería ver a Taiju cada vez más consumido por el trabajo y también me di cuenta que yo no había cenado, pero decidí no darle mucha importancia e irme a la cama cuanto antes, ya que mañana sería un día largo.