Luffy es un joven que no a conocido lo que es la felicidad... Su padre y sus hermanos no lo quieren al contrario, lo detestan con su alma! Tan solo por ser un inutil, sin habilidades "que sirvan" y ¿todo por quien? Por aquella mujer que le a quitado...
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Como ustedes saben, haremos un viaje hacia Tokio ya que este sera su ultimo año como jovenes de colegio -
¡Que emoción! Por fin hiban a descansar de tanto ajetreo como lo es el estudio, después de tanto haber soñado con este momento ¡por fin! Se a hecho realidad.
-(A llegado mi momento de deslumbrar con mi belleza a varias mujeres hermosas!) - Un rubio se abrazaba a si mismo mientras su imaginación procedia a mostrar un sueño de el con varias mujeres abrazandolo
-(que pervertido) - El peliverde lo veia con asco mientras apoyaba su cara en su mano
-(Tanto que e soñado con este vieje, tan solo espero que no lo estropeen esos idiotas) - Nami rogaba algun dios o deidad si existían . . . . . -Y? Que tal, este es el definitivo? - Shanks estaba inquieto en el consultorio de Marco, la ansiedad lo carcomia
Marco se limito a suspirar - No, este tampoco nos servirá - Se masajeo el puente de la nariz mientras intentaba calmarse
-Mierda... - Shanks bajo la mirada, sus dientes rechinaban sus orbes negros empezaron a cristalizarse, su equilibrio fallo y callo al suelo
-N.. No te preocupes papá, este no es el unico donante - Luffy lo abrazo intentando consolarlo, mientras por dentro el tambien perdia la esperanza de poder vivir y ver lo hermoso que es el mundo
-Luffy... - El sonrio - Sigues siendo tan positivo, pero seguramente... - Señalo su corazón - Tu tambien estas cansado y abrumado de todo esto, lo siento...
-Tranquilo papá, shishi se que es por mi bien asi que puedo soportarlo -
-Para ser una escena triste, ustedes dos lo convierten en un momento tierno-yoi - Marco retiraba sus lentes, mientras reia ante tal escena
-Aunque seria mejor ver en otro lugar, donantes para tus ojos Luffy, yo recomendaría Tokio ya que de hecho allí saben haber muy buenos donadores-yoi -
-Enserio?! - Gritaron padre e hijo
-Si, vayamos en la tarde para averiguar los turnos ¿bien? -
-Hay Marcoo~! Muchas gracias no se como agradecertelo - El pelirrojo abrazaba a Marco mientras lloraba de la forma más ridícula que te imagines
-Si, si -
-Yosh! Vayamos a Tokio! - Luffy se levanto del piso con una sonrisa de media luna esperanzado de encontrar a alguien . . . . -Entonces ¿te iras a Tokio en dos días verdad? - Preguntaba Perona
-Seeh -
-Que suertudo eres! Cuanto desearia viajar a Tokio, la buena suerte solo son para los ¡malagradecidos como tu! - Mordia un pañuelo mientras pequeñas lagrimas salian de sus ojos
