El pintor

Mujer

"un recuerdo doloroso guardado en una enorme sonrisa"

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Paso un mes desde que vio a ese hombre de ojos dorados, a un pensaba en su extravagante belleza, miraba con ternura aquella pintura que colgaba arriba de su cama, quería pintarlo de nuevo buscar un ángulo diferente uno que lo mirara y atrapar ese mirar tan serio pero triste.

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Eran las 7:30 PM y la noche se apoderaba, la puerta se abrió de aquel local viejo dejando ver a una mujer de cabellos verdes, piel pálida y un color dorado en sus ojos, un dorado diferente menos intenso y penetrante como el violinista, pero de igual forma atrayente. Luffy quien estaba apoyado en su brazo se paró tan rápido como pudo, saco una hoja y un lápiz aquella mujer le parecía hermosa y necesario atrapar su hermosura en una hoja, ya que no llevaba consigo sus herramientas adecuadas para plasmarla en algo mejor.

La mujer se detuvo, su atención se fijo en una taza adornada con líneas doradas y plateadas, ella sonrió inconscientemente tomando la taza entre sus finas manos, se acercó un poco más para ver los detalles se miraba la antigüedad de esa taza, el extranjero capturó un ángulo perfecto y lo plasmó en su hoja, donde ella sonreía mientras sostenía la taza con ambas manos y un leve rubor en sus mejillas pálidas.

Le gustaba las cosas de antigüedad y esa era su tienda favorita de antigüedades,la taza le encantó, decidió comprarla, antes de ello siguió recorriendo la tienda para ver si algo más era de su agrado, pero al parecer la taza fue lo único que le gustó así que fue con el joven que se encontraba concentrado, no lo avía visto antes ahí así que supuso que era un trabajador nuevo en ese tienda, parecía estar escribiendo o dibujado, da igual. Lo curioso es que sus rasgos eran diferentes, se acercó más y confirmo que ese chico era un extranjero cosa que era raro en una ciudad como esa.

--Disculpe.-- Movió la mano para llamar la atención de el joven.

Luffy levanto su mirar y quedo a un más sorprendido. -- ¡Que hermosa eres
a un más de cerca!-- la mujer se sonrojo por el comentario de el extranjero que la tomo por sorpresa.

--Gra... Gracias.-- su vos sonaba nerviosa. Era la primera vez que le decían algo así, usualmente su "belleza" era extraña ante los ojos de todos.

--Toma.-- Luffy le entrego la hoja a la mujer, ella dudosa la tomo y al ver lo que está tenía abrió sus ojos a más no poder.

--Soy...Soy Yo!-- se sonrojo por el dibujo donde estaba ella sonriendo mientras sostenía la taza, y una pequeña lágrima se asomo. --Te quedó increíble muchas gracias-- le regaló una sonrisa a el joven pintor quien de igual manera le dio una.

--No agradezcas! Tu belleza es algo que debería ser plasmada en algo mejor y con una buena pintura!.-- afirmó.

--No es para tanto...-- bajo la cabeza hacia el piso. Y suspiro pesadamente. --No tengo belleza alguna... Mi piel pálida me da un aspecto de fantasma y mi cabello verde me hace ver a un peor.-- limpio las lágrimas que amenazaban con salir, su inseguridad la carcomida y más cuando el mundo entero se encargaba de recordarle cada una de sus imperfecciones.

-- Tu piel blanca es tan hermosa, me recuerda ala nieve y tu pelo verde al verano, y lo mejor de ti son tus ojos dorados-- no quitó ni un solo segundo su vista de la mujer que trataba de no derramar sus lágrimas, ese chico estaba siendo demasiado amable con ella apesar que no se conocen y es la primera vez que se ven. --Tu belleza es digna de ser halagada.-- la chica no pudo más y sus lágrimas cayeron sin parar, Luffy le brindo un pañuelo que la chica acepto apenada.

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--¿Cuál es tu nombre?-- pregunto la mujer ya más tranquila.

-- Mi nombre es Luffy un placer ¿Cuál es el tuyo?--

--Me llamo monet y el placer es mío Luffy-- ambos rieron. Hablaron por un rato incluso tomaron un poco de te antes de que la mujer se marchara.

--Eres extranjero verdad?-- dio un sorbo a su te que aún estaba muy caliente.

--Si, ¿Se me nota?-- pregunto dudoso.

--La verdad si. Empezando por tus rasgos poco comunes y tú asentó-- apoyo su codo sobre la mesa. -- ¿De dónde eres?--

--Soy de Londres-- dijo con simpleza.

--Que interesante, gracias a ti ahora tengo interés de ir a Londres-- sonrió tiernamente y bebió de su te.

--Es hermoso Londres! Pero está ciudad me parece a un más hermosa.-- dijo divertido. La mujer soltó una risilla, la personalidad de ese niño es un encanto y se sentía muy agosto con su compañía.

Y así siguieron platicando por un rato más, pasado de las 9:00 PM la mujer decidió irse, ya era tarde y Luffy se ofreció en llevarla pero está se negó y le agradeció por su amabilidad, guardo el dibujo para retirarse de la tienda, afuera la esperaba un taxi en el cual se montó y se fue.