El pintor

De nuevo te veo

"destino sorpresivo para dos jóvenes enamorados del arte"

_______

La noche era oscura y las calles solas el fuerte frío acompañado de la lluvia, el mar tan tranquilo y la soledad presente en aquel puente donde un hombre fumaba melancólica mente...

Cuánto tiempo a pasado desde que su vida se volvió una porquería? Desde cuándo se volvió la oveja negra de la familia? ¿Por qué ahora solo era un recuerdo de a
verlo tenido todo?.

Aquel puente era el lugar que recorría siempre al estar sofocado por sus recuerdos y problemas, esas ojeras que delineaban sus ojos era la evidencia de que visitaba a menudo el puente que acierta hora se mantenía en completa oscuridad y nadie podía distinguir si alguien se encontraba ahí.

La soledad su única compañera y el cigarrillo su escape de sus pensamientos, el fuerte viento helado pego en su cuerpo poco cubierto, estaba mojado por la lluvia, no le importaba enfermarse así que solo prendió un cigarro más no tenía sueño, no sentía el cansancio apesar de que trabajaba muchas horas al día. Un hombre que mantenía una depresión y solo la calmaba en drogas y alcohol, nada era relevante en su vida....nada....

________

Camino por las calles más solas y oscuras, recorrió nuevamente el lugar donde lo vio por primera vez, no tenía idea a dónde iba pero al menos sabía que buscaba un lugar oscuro y solitario distanciado de la gente.

Deambulo por cada callejón a órdenes de sus instintos, sus piernas se movían solas llevándolo al inmenso mar. Recorrió la orilla triste, se sintió mal por pensar que ya no volvería a ver esos ojos dorados nunca más...

Resignado decidió volver a su departamento, hasta que el olor a tabaco inundó sus fosas nasales, sintió su corazón un poco acelerado, olfateo el aroma tratando de averiguar de dónde venía y camino un poco sintiendo a quel olor más fuerte.

Se encontró con un puente algo viejo y al final de este no se veía por la oscuridad que adornaban el lugar, pero el olor a tabaco provenía de ahí. Avanzo adentro del puente y visualizo una pequeña luz que el chico supuso que era la colilla del cigarrillo.

_______

Escucho pasos que se acercaban a el, no sabía cómo reaccionar pues eso jamás le avía pasado en todas la veces que venía al puente a relajarse.

Lleno de molestia dio una buena calada a su cigarrillo antes de apagarlo, los pasos cada vez son más cerca, el hombre visualizo entre la oscuridad una silueta de alguien que no se podía distinguir quien era.

——¿Quien eres?—— Dijo el hombre molesto.

La persona siguió avanzado y cada paso quedaba sonaba más cerca, la luz de la luna se hizo presenté invadiendo la oscuridad por completo dejando ver el rostro del invasor.

——Un pintor en busca de una gran inspiración!—— sonrió. Fue la respuesta que recio el hombre.

Miro con atención al chico quien no esperaba verlo de nuevo y mucho menos a esa hora y en ese lugar, ni si quiera sabía cómo lo encontro o reconoció si a lo lejos de ese puente no se ve nada.

——Tu? ¿Que haces aquí?—— relajo su expresión de molestia a una neutral.

——Me dijiste que podía buscarte en la noche más fría y oscura cuando quisiera verte de nuevo—— metió las manos en su gran chamarra.

El hombre quedó sin palabras, jamás pensó que se lo tomara tan literal se sentía ¿Feliz?, No lo sabía ni el mismo. ——Ya veo...—— fue su única respuesta.

El chico miro de reojo al hombre que solo llevaba una camisa blanca medio abierta y además estaba mojado. ——por cierto.... No me dijiste tu nombre ese día...——

——Y por qué te lo tendría que decir?—— soltó un poco fastidiado.

——Para que la otra que nos volvamos a encontrar, ya no seamos unos simples desconocidos.—— su vos sonaba suave.
El hombre no dijo nada por qué el frio se apoderó de él y ahora se encontraba temblando como perro, el chico noto eso, se quitó su gran chamarra y la dejo caer en los hombros del mestizo.
Acción que tomo desapercibido a este y solo lo miro algo apenado para decir "Gracias".

——No era necesario que te quitarás tu abrigo, ahora eres tú quien tiembla de frio—— río burlonamente al ver al chico haciéndose el fuerte mientras que sus piernas no dejaban de temblar.

——No...no impor...ta—— dijo tartamudeando por el frío que sentía. ——¿Quieres ir a mi casa?—— Fue la única idea que se le ocurrió al chico para solucionar lo del frío y tomar algo caliente como un chocolate o café.

——¿Estás invitando a un desconocido a tu casa?—— pregunto arqueando una ceja. ——¿No te da miedo que te viole o te robe?——

——Se que no aras nada de eso.—— afirmó con su cabeza. ——

——Bien...——