Tres

644 98 58
                                    


🌷

Una semana después de haber llegado Diego ya sa había acostumbrado a la rutina de ese dormitorio de estudiantes. Eran bastante ruidosos pero de buen corazón, aún no trataba tanto con ellos pero nunca le hicieron menos y  no lo trataban mal en ningún momento.
Tuvo suerte de que Edson y Chucky lo apoyaran con comida, aunque el tenía aún un poco de dinero y quería devolverselos, ellos solo le decían que mejor lo guardara para pañales. Que era lo que mas necesitaba su niña en ese momento ya que como la alimentaba con leche materna al menos por ahora no se preocupaba por comprar formúla.

La semana había sido difícil pues era cierto lo que Hirving decía, su bebé tenía un ciclo de sueño bastante irregular y cada tres horas debía de darle comer, tenía suerte de que no fuera una bebé llorona pero estar durmiendo poco ya lo tenía bastante cansado.
Eran las tres de la tarde cuando alguien llamó a su puerta.

—Diego, que tal— saludó alegre Edson— Chucky te manda esto— le mostró un traste con lentejas, el omega lo invitó a pasar.

—Se ven ricas— Diego dio un gran bostezo, el alfa vió las grandes ojeras que tenía.

—No has dormido casi nada ¿eh?—

—No mucho, pero pues tengo que acostumbrarme— dijo Diego tomando el traste de lentejas y poniendolo en su mesita de noche que era un cartón que le prestaron, su bebé estaba en la cama moviendo sus manitas.

—¿Porque no te vas a dormir un rato?, yo la cuido un momento—

—No se Edson, ya me ayudas mucho para que también te pida cuidarla— dijo algo avergonzado —además, ¿no tienes tarea?—

—Naaah todo bien. Vamos, acuestate un rato— lo llevó a la cama junto a su niña y lo recostó.

—Bien, solo cinco minutos— el omega cerró sus ojos un momento pero casi al instante cayó en un sueño profundo. Edson sonrió, lo arropó y tomó a la bebé.

—Ven— dijo susurrando—dejemos descansar a tu papá— salió del cuarto despació y se dirigió a la recepción, ahí se encontraban varios de sus amigos.

—Miren, es Edson y su cachorra— habló Henry, este solo rodó los ojos.

—Y dale con eso— dijo enfadado, la bebé solo miraba a todos lados. Córdova se acercó a verla.

—No es su hija, la niña si es bonita no como Edson que esta refeo— se rió.

—Hijo de la ch...—

—A ver, yo quiero verla— se acercó Kevin en muletas.

—Tu qué wey, por andar de argüendero se te va a volver a romper la pata— le dijo Henry.

—A ti que te importa— le contestó con mala cara— la niña solo veía el espectaculo—Oye, tiene los ojos verdes— miró asombrado Kevin.

—Si es cierto, ¿a poco Diego tiene los ojos verdes?— volvió a hablar Córdova.

—Los tiene claros—dijo Edson— tal vez en su familia es común ese tipo de ojos— todos asintieron.

—¿Y cómo se llama?— Henry preguntó.

—No tiene nombre aún— habló Edson.

—¿Que tal Pelusa?— dijo Córdova.

—No mames ni que fuera gato— Kevin le dió un sape— Que tal Firulais—

—¡Eso es peor! Es nombre de perro— Henry habló esta vez y así una pelea de nombres comenzó.

Después de semejante discusión el alfa continúo paseandose por el jardín de los dormitorios, la bebé veía todo maravillada pues de hecho no había salido del cuarto desde que llegaron. Después de un rato decidió volver con Diego. Cuando llegó aún se encontraba dormido.
"Si que necesitaba descansar" pensó Edson. Llevó a la niña a ver a través de la ventana, ya casi caía la tarde. El omega abrió los ojos de repente, se sorprendió de la hora y entonces vió a su niña con Edson mirando el paisaje.

—¿Que tal? ¿Si descansaste?— le habló Edson, Diego se acercó y abrazo a su niña.

—Si, muchas gracias—

—Me lleve a pasear a Esmeralda— soltó el alfa.

—¿Quién?— parpadeó Diego.

—Ah si, perdón. Le estaba diciendo Esmeralda, ya ves por sus ojos verdes— le sonrió— obvio solo de juego, tu sabrás que nombre le pones a tu bebé— rió. Diego se quedó pensando un momento.

—De hecho, es un bonito nombre—el omega sonrió—¿te gusta?— la bebé balbuceó feliz.

—Muy bien le diremos Mera—Edson le revolvió el pelo a la niña— Mera Merita— Diego soltó una pequeña carcajada, había pasado tantas cosas en estos meses que ni siquiera de dió tiempo de pensar en un nombre pero ese era perfecto.

"Aunque preferiría que no hubiera sacado sus ojos verdes" pensó un poco triste.


🌷



Un mes después ya todos en el dormitorio conocían a Diego y a "Mera Merita", la verdad es que a los estudiantes le caía muy bien y a veces la cargaban. Unos decían que hacer eso les traía suerte en los exámenes, cosas de estudiantes.
Hoy Mera estaba en los brazos de Kevin, Hirving aprovechó para hablar con Diego un momento.

—¿Recuerdas que me pediste que te buscará un lugar para trabajar?— le dijo el omega mayor.

—Si— dijo ilusionado Diego— ¿encontraste algo? Haré lo que sea—

—Si, de hecho un gran amigo mío busca un mesero en su cafetería. Me dijo que fueras para que te entrevistara—

—Yo te acompañó— se acercó Edson— Hablas de la cafetería "El Sol" ¿verdad? Yo lo puedo guiar hasta allí, no queda lejos— Ambos tomaron a Mera y se dirigieron al lugar.

Llegaron y pudieron notar una cafetería pequeña pero muy bien decorada, había mucha gente. Al parecer era la hora donde estaba más llena. Se acercaron al mostrador y dijeron a qué iban, uno de los empleados los llevó a la oficina de su jefe.
Los recibió un hombre de cabello rizado, en cuanto dijeron que venían de parte de Chucky entendió todo.

—¿Tienes experiencia en servicio al cliente— le dijo Guilermo, hace un momento todos se habían presentado.

—Solo en un oxxo—dijo Diego sincero—pero aprendo rápido— le dijo seguro. Memo le sonrió y después de otras preguntas de rutina le dijo.

—Necesito a alguien en el horario de la tarde, ¿crees poder?—

—Si, no tengo problema—

—Muy bien, inicias mañana. Presentate aquí a las 4:00 pm y te daré instrucciones—

—Si, muchas gracias—se estrecharon las manos, Diego estaba feliz porque si había pasado la entrevista pero cuando estaban ya fuera de la cafetería recordó un detalle.

—No tengo quien cuide a Mera—habló cabizbajo el omega.

—Para eso estoy yo— le habló orgulloso Edson.

—¿Que?, no puedo pedirte eso. Además tu estudias, ya es mucho—

—Le pediré ayuda a los chicos, creeme ellos quieren mucho a Mera Merita. La cuidaremos bien—

—No, en serio me da pena. Creo que mejor le diré que no al señor Guillermo—pensó triste.

—Diego, es una gran oportunidad y además se puso muy flexible cuando le hablaste de tu bebé. Y aparte él también es omega, yo creo que te entendió mejor que nadie—lo miró a los ojos dándole ánimos—Por favor, déjame ayudarte—

—Esta bien, pero si en algún momento se vuelve una molestia, tienes que decirmelo ¿eh? No te voy a reprochar nada—

—Es un trato—le sonrió el alfa.

Diego no lo sabía pero a Edson le hacía muy feliz ayudarle mientras siguiera viendo esa preciosa sonrisa.

🌷








No se que comentar jaja

Nos leemos pronto 💖

Hermoso CariñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora