D I V I N I D A D (Dainsleif and Lumine)

Barbatos

-Dainsleif- la chica picaba el hombro del rubio, haciendo que este abra sus ojos- perdón por despertarte pero te iba a preguntar si no querías acostarte en la cama

-solo hay una Lumine

-dormi un rato, porque no descansas, mientras yo voy por las manzanas que nos encargaron

-no te puedo dejar sola Lumine

-tranquilo, se cuidarme sola- le dijo Lumine, mostrándole aquella espada suya.

La chica salió y camino en los alrededores de Mondstadt, había encontrado 15 manzanas, así que decidió caminar un poco más alejándose un poco del lugar, mientras lo hacía observaba el paisaje, sin duda era hermoso, transmitía una tranquilidad inmensa, algo que no sentía desde hace mucho; la chica camino hasta llegar a un gran árbol y frente a este había una estatua como la que habían visto en Mondstadt y la que habían encontrado en medio de un pequeño lago, ella se acercó a esta a admirarla más de cerca, sus ojos dorados inspeccionaban con detalle aquella estatua

-es majestuosa, ¿verdad?- dijo una voz no conocida, ella se puso alerta y empezó a buscar con la mirada al dueño de aquella voz, hasta que si vista fue a dar en lo alto del árbol, un chico con una boina, poseía dos trenzas y un traje de manga larga blanco, unos pantalones cortos cafes, con una capa verde que hacía juego con su boina, también llevaba una lira en la mano- veo que no eres de aquí o me equivoco

-eres igual al de la estatua, no es ninguna coincidencia o me equivoco?- Lumine hablo directamente

-vaya que me tomaste por sorpresa, pero no, no es una coincidencia- dijo el chico guiñándole el ojo y bajando del árbol mientras una ráfaga de viento lo acompañaba, las puntas de sus trenzas se iluminaron al momento de el bajar y después se puso a la altura de ella, era más alto por unos pocos centímetros- me llamó venti, supongo que ya lo sabías verdad?- Lumine negó con la cabeza

-¿que haces por estas tierras?

-estoy acompañando a alguien en un viaje, solo eso puedo decirte- este arqueo la ceja inspeccionando la cara de la chica

-te permito andar en mi nación, pero te tendré vigilada a ti y a tu amigo, no me gusta recurrir a la violencia, así que espero y no hagan algo que ponga en peligro a mi pueblo- decía serio- por cierto ten- le arrojó 3 manzanas, las cuales lumine atrapó con facilidad

-gracias..; por cierto, ¿donde puedo encontrarte?

-taberna el obsequio del Ángel- le dijo alejándose-

-soy Lumine

-Un placer Lumine, espero no causes problemas en mi nación