Capítulo 25: Consecuencias.

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La noticia de lo ocurrido en la última prueba se expandió como pólvora por todo el país. No había mago o bruja que no supiera lo que había ocurrido al final de aquella sangrienta prueba.

Muchos condenaban las acciones de Henrik Mikaelson mientras que otros las aprobaban sin discusión alguna puesto que de no ser por aquello una bruja sangre pura hubiera terminado con un trágico final.

En Hogwarts todo era un caos, los alumnos estaban en el gran comedor por órdenes de la directora mientras que algunos escuadrones de Aurores registraban todo el castillo y alrededores en busca de Henrik Mikaelson para que respondiera por sus acciones.

Los murmullos eran sofocantes dentro del gran comedor. Todo el mundo estaba comentando lo sucedido, algunos con miedo y otros con asombró y unos pocos con argumentos; Slytherin y Ravenclaw eran los principales en esta última.

Toda charla se vio interrumpida cuando las puertas del gran comedor fueron abiertas de golpe haciendo temblar todo el lugar. Cientos de pares de ojos se pusieron en los recién llegados; Henrik Mikaelson y Pansy Parkinson ingresaron al lugar mientras conversaban casualmente e iban tomados de la mano ignorando a todos a su alrededor.

Aquello se vio interrumpido cuando no menos de 15 varitas en alto apuntaron en su dirección, especialmente hacia Henrik Mikaelson.

La pareja freno su andar, Henrik miro a cada portador de varita con una ceja alzada y una mirada aburrida.

– ¿Cual es el significado de esto? – Cuestionó el azabache con indiferencia mirando al grupo de Aurores.

– Esto señor Mikaelson son las consecuencias de sus Actos. – Dijo Amelia Bones caminando hacia el frente después de dejar la mesa de profesores en la que estaba anteriormente hablando seriamente con Minerva.

– ¿De que se le acusa a mi novio su señoría? – Pregunto burlonamente Pansy mirando a la mujer.

– Asesinar no solo a 1 persona frente a cientos de testigos sino también asesinar a 67 personas y... – comenzó la mujer pero sus palabras fueron interrumpidas por un chillido molesto.

– No es justo. Mataste 30 más que yo – Dijo una voz a espaldas de Henrik, este no tenía que girarse para saber quién era y tampoco para ver el puchero que claramente estaba en su rostro.

– No es mi problema que hayas llegado tarde, Valery – Hablo el original con indiferencia.

– ¡Suficiente, cállate niño estupido! – Grito un hombre entre los aurores. – Estás arrestado y monstruo como tú se va a pu... – Siguio el hombre hasta que frente a todo el mundo cayó al suelo muerto y detrás de este estaba Valery con su corazón en su mano.

– Nadie insulta a mi señor frente a mi y vive para contarlo. – dijo la azabache con una sádica sonrisa en su rostro mientras labia la sangre fresca que escurría por su antebrazo a causa del corazón en su mano.

Aquello sirvió para que un centenar de hechizos volarán hacia la rubia quien comenzó a reír locamente al ver esto.

Los gritos no se hicieron esperar cuando los hechizos fueron esquivados por la rubia y volaban hacia la población estudiantil.

– ¡Basta! – trato de detener el caos Amelia Bones. Solo 6 aurores de 15 no habían atacado y solo 1 se detuvo ante el grito pero el resto siguió.

Algunos estudiantes pudieron salvarse del fuego cruzado pero otros no tuvieron la misma suerte. Algunos extranjeros también resultaron afectados.

Los profesores de las tres escuelas rápidamente saltaron para proteger a sus alumnos.

Todo el caos termino cuando los 5 atacantes cayeron al suelo gritando de dolor mientras sostenían sus cabezas en agonía.

ƁƖσσɗу ƑαтєDonde viven las historias. Descúbrelo ahora