Tras Quedar Embarazado del Hijo del Presidente

Capítulo 4

Ese día, Zhuang Dou y Zhuang Qi Yan llegaron juntos a la Villa de la Colina Fragante, Zhuang Dou llevaba en la mano comida para llevar, que Zhuang Qi Yan había pedido especialmente, Zhuang Dou se encargaría de evitar que la gente de la Villa de la Colina Fragante muriera de hambre en estos pocos días. Zhuang Qi Yan vio a Zhuang Dou apuntar y simplemente empacó la comida para llevar, y no dijo nada.

Lin Er no había comido en todo el día desde la noche anterior, y cuando vio a Zhuang Dou llevando un cuenco de wontons aún calientes, dudó durante tres segundos, luego dio las gracias y empezó a engullirlos.

Al verlo acurrucado en un rincón, tan educado incluso después de haber sido encarcelado, Zhuang Dou tenía ganas de reír, pero al ver a Zhuang Qi Yan sentado frente a él, mirando a Lin Er sin decir una palabra, Zhuang Dou no pudo averiguar cuál era su estado de ánimo, así que no se atrevió a hablar.

De repente, Lin Er dejó de masticar, sostuvo en la mano el pedido de comida para llevar en la bolsa de plástico, lo miró, y luego miró a Zhuang Qi Yan y a Zhuang Dou, dándose cuenta de que esos dos lo habían estado mirando mientras comía.

Lin Er se mostró un poco aprensivo y murmuró con poca amabilidad: "Esto, estos wonton son muy caros... ¿eh?"

La lista de comida para llevar indicaba que un wonton costaba 79, y Lin Er acababa de contarlos mientras comía, y había exactamente diez. Lin Er estaba un poco incómodo, era la primera vez que comía un wonton tan caro, ocho yuanes eran suficientes para comer un tazón grande para él.

Zhuang Dou se apresuró a cubrirse la boca tosiendo para ocultar su risa, terminó de reírse y miró a Zhuang Qi Yan, que seguía sin sonreír y solo miraba a Lin Er, como si lo estuviera observando.

Lin Er miró a los tres wonton restantes en el tazón, tenía sentimientos cruzados, de todos modos, no puede devolverlos, puede comer, y no es su propio dinero...

Después de eso, Zhuang Dou vivía entregándole comida para llevar todos los días. Cada vez que Lin Er terminaba, secretamente sacaba la comida y la escondía en su bolsillo. Zhuang Qi Yan hacía tiempo que se había dado cuenta de su pequeño gesto y no dijo nada, pero lo cierto es que también estaba desconcertado.

Al tercer día de ser "encarcelado" por Zhuang Qi Yan, Lin Er finalmente no pudo soportar más la ansiedad y cautelosamente le dijo a Zhuang Qi Yan: "Tú, ¿por qué hiciste esto?"

Zhuang Qi Yan tomó un sorbo de té y lo ignoró. Lin Er, continuó: "Entonces, ¿puedes dejarme ver a un amigo? Llevo muchos días desaparecido, no sabe dónde estoy y debe estar muy angustiado."

Sólo entonces Zhuang Qi Yan levantó los ojos para mirarlo y preguntó: "¿Amigo?". Tras un momento de contemplación, Zhuang Qi Yan recordó que en el perfil de Lin Er, efectivamente, decía que tenía un compañero de habitación en Shanghai que era muy cercano a él.

Zhuang Qi Yan dijo: "hmm de acuerdo". El mayordomo que estaba a su lado asintió ligeramente e inmediatamente fue a ejecutarlo, lo que significaba que Lin Er podría ver a Chen Hao Tian en poco tiempo.

Lin Er se inclinó ligeramente hacia Zhuang Qi Yan para expresarle su gratitud, y cuando terminó de agradecerle y levantó la cabeza, preguntó en voz baja y tímidamente: "Esto, tú, ¿por qué, me metiste aquí?". Lin Er no podía entender cómo pensar en ello, él había sido torturado esa noche y había logrado salvar su vida, así que ¿cómo es que él era el que estaba encerrado en su lugar?

Zhuang Qi Yan pensó un momento antes de responder, dejó la taza de té y escupió:

"Un castigo."

Lin Er fue aún más esquivo.

Lin Er se sorprendió un poco cuando trajeron a Chen Hao Tian con la cabeza envuelta en un saco, y pensó que tal vez lo habían traído de la misma manera ese día.

"Hao Tian". Lin Er dijo suavemente mientras se acercaba para ayudar a quitar la bolsa de la cabeza de Chen Hao Tian.

Chen Hao Tian se acomodó, vio a Lin Er y miró a los guardaespaldas que estaban detrás de él, su ira subió instantáneamente y gritó con rabia hacia los guardaespaldas que lo habían secuestrado: "¡Mierda! ¿Qué mierda quieren?"

Zhuang Qi Yan estaba sentado en el sofá mirando el periódico, escuchó los gritos frenéticos de Chen Hao Tian y frunció el ceño mientras se ajustaba el audífono en el oído.

"No, Hao Tian, estoy a salvo." Lin Er no estaba realmente seguro de si estaba realmente a salvo, después de todo, mantener a alguien encerrado durante días por nada, suministrando comida y bebida todos los días, realmente no parecía que le harían algo, pero eso era todo lo que podía hacer para consolar a su amigo por ahora.

Chen Hao Tian exhaló una profunda bocanada de aire, miró a su alrededor la lujosa decoración y luego vio a Zhuang Qi Yan, y preguntó: "¿Has estado aquí los dos últimos días?"

Lin Er asintió y miró a Zhuang Qi Yan.

"¿Qué demonios está pasando? ¿Te trajo aquí?". Preguntó Chen Hao Tian, señalando con la barbilla en dirección a Zhuang Qi Yan.

Lin Er volvió a asentir.

Aunque Zhuang Qi Yan, que estaba sentado a un lado, no se inmutó, su corazón ya echaba humo en ese momento. No entendía por qué, pero ver esa preocupación y conversación tan sensiblera entre las dos personas que tenía delante le hizo sentirse muy incómodo.

Zhuang Qi Yan golpeó el periódico sobre la mesa, se levantó y se alejó, mientras decía: "Ahora, puedes irte."

Lin Er no reaccionó, pensando: '¿Qué le pasa a esta persona? ¿Arrestarme, luego alimentarme durante tres días y liberarme? ¿Los ricos son todos así?'

Chen Hao Tian fue un poco más contundente, y tradujo sus sentidas palabras directamente para Lin Er: "Está enfermo."

Ambos se vendaron los ojos y salieron de la Villa de la Colina Fragante en el coche de Zhuang Qi Yan. Lin Er pensó que por fin estaba fuera de ese lugar y que la gran piedra que pesaba en su corazón había sido por fin depuesta.

De vuelta en casa, Chen Hao Tian volvió a regañar a Zhuang Qi Yan al enterarse de que Lin Er había sido despedido.

"¡Puedo adivinar con mis malditos pies que fue esa cara muerta!"

A Lin Er no le importaba que Chen Hao Tian estuviera enfadado, ya que su resentimiento hacía tiempo que se había consumido, y volvió a su habitación solo, ordenando uno a uno los pedidos de comida para llevar que se habían acumulado en sus bolsillos.

Al día siguiente, Zhuang Dou recibió una carta de Lin Er en la recepción de la empresa. Aunque el sobre iba dirigido al señor Zhuang Dou, una vez que éste lo abrió, la primera línea y la primera frase decían: "Por favor, dáselo al señor Zhuang Qi Yan de mi parte, señor Zhuang Dou."

Zhuang Dou miró toda una carta llena de saludos y quedó más que impresionado con el hombre.

Zhuang Dou vio que toda la carta estaba llena de honoríficos y estaba un poco más impresionado con esta persona.

Cuando Zhuang Qi Yan vio la carta, no se negó, sino que la abrió con paciencia.

"Hola Sr. Zhuang, soy Lin Er. No hay malicia en esta carta, así que por favor léala toda."

Zhuang Qi Yan despidió a Zhuang Dou y se recostó solo en su silla para leer la carta con atención.

"No sé qué hice mal, tal vez te lastimé sin querer, esa noche, no fue mi intención, yo también estaba dolido y no quería que fuera así. Creo que ambos somos culpables en este asunto, así que, por favor, pídele al Sr. Zhuang que se olvide del asunto y haga como si nunca hubiera ocurrido.

Además, estoy aquí para devolver el dinero.

Wonton $79

Sushi $122

Dos bollos grandes $20.

Pato a la mandarina caliente $28.

La cantidad total es de 249 dólares. El dinero ha sido colocado en el sobre, por favor, tómelo."

Zhuang Qi Yan agitó el sobre, y dos abuelos maoístas y un billete verde se cayeron en la mesa. Zhuang Qi Yan miró los billetes sobre la mesa y respiró profundamente en silencio.