Capítulo 36

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Lin Er no entendía lo que le pasaba a Zhuang Dou, y no era lo suficientemente atrevido como para preguntar, si pudiera saber sobre ello, Qin Zhen podría haberlo dicho hace tiempo, como no lo hizo, no preguntó.

Cuando se puso el traje de boda, Lin Er se paró frente al espejo y se miró por un momento. Su cabello estaba recortado, sus cejas estaban ligeramente recortadas para lucir más estilizadas, el traje era de estilo occidental, centrándose en ajustarse al cuerpo y resaltar su figura. Qin Zhen tenía razón, la zona abdominal no lo hacía sentir constreñido, la talla y el largo eran los adecuados.

Zhuang Qi Yan estaba en la puerta de la casa acomodando los botones de su manga y le dijo a Lin Er: "Ya casi es el momento, la boda empieza a las 10:30, es hora de irse".

Mientras el grupo salía de la Casa Zhuang, Zhuang Qi Yan dobló su brazo derecho en medio círculo y miró a Lin Er con una sonrisa: "Agárrate a mí".

"¿Por qué...?"

Zhuang Qi Yan se inclinó y le susurró suavemente al oído: "No sé cuántos paparazzi al acecho hay por ahí, cuántos medios de comunicación esperando en la oscuridad, así que, por favor, señor Lin Er, actúe como mi pareja".

Los ojos de Lin Er se movieron a su alrededor, observando por un momento antes de tomar cautelosamente el brazo de Zhuang Qi Yan.

"Gracias por tu cooperación y el trabajo duro".

La comitiva salió de la Casa Zhuang de uno en uno, con Zhuang Qi Yan y Lin Er sentados en el primer coche, sin hablar nada en todo el camino. Pronto, media hora antes de que comenzara la boda, la comitiva llegó al lugar de la boda dispuesto por Zhuang Qi Yan: una finca hotelera de estilo escandinavo que ocupa un gran terreno en una ciudad en la que cada centímetro de tierra es como el oro.

Efectivamente, un grupo de medios de comunicación se había reunido en la entrada del hotel. La comitiva se detuvo y un grupo de guardaespaldas bajó del coche que iba detrás, separando a los medios de comunicación en dos partes y dejando un camino en medio.

Zhuang Qi Yan estrechó la mano de Lin Er y dijo: "Yo bajaré primero".

La multitud de periodistas que estaba fuera, intentando capturar a la pareja y proteger su equipo, era un lío, en un momento se pisaban los pies, al siguiente chocaban con sus micrófonos.

Cuando Zhuang Qi Yan salió del coche, los periodistas se quedaron momentáneamente callados, y luego reaccionaron levantando sus cámaras, extendiendo sus micrófonos y haciendo lo posible por asomarse a la valla de guardaespaldas.

"Todos". Zhuang Qi Yan eligió un medio de comunicación al azar, se acercó a la cámara y dijo: "Esperen un momento".

"Me gustaría que todos escuchen atentamente lo que voy a decir. Me gustaría que todos apagaran los teléfonos con cámara y otros dispositivos, no sólo para respetar a mi media naranja, sino también para respetarme a mí, Zhuang Qi Yan. Si alguno no respeta eso, no podrán culpar a Zhuang por trabajar contra ustedes en el futuro".

Todos los periodistas se quedaron callados, y no se atrevieron a tomar la iniciativa. Después de todo, ellos también trabajaban para otros, y si ofendían a Zhuang hoy, ninguno querría asumir la responsabilidad.

Estaban preocupados, pero ninguno se empeñó en ser el primero en bajar la cámara. Zhuang Qi Yan exhaló, tomó una cámara cercana y giró la cabeza hacia un reportero algo sorprendido: "No quieres apagarla, ¿verdad?"

"No, no es así". El reportero también se mostraba aprensivo. Zhuang Qi Yan le sostuvo el brazo que tenía la cámara con fuerza hacia abajo.

Zhuang Qi Yan volvió a aumentar la fuerza de agarre y el reportero no tuvo más remedio que apuntar la cámara al suelo bajo esta coacción y apagarla.

Al ver lo que le sucedió, el resto de las personas también apagaron sus cámaras.

Zhuang Qi Yan miró la situación a su alrededor y se aseguró de que ninguna cámara lo apuntara, luego sonrió y asintió con la cabeza a los reporteros: "Gracias por su cooperación".

Después de hablar, se dio la vuelta para abrir la puerta del automóvil, extendió la mano y sacó a Lin Er de allí. Lin Er asumió su papel de amante de Zhuang Qi Yan tanto como le fue posible. Con una sonrisa feliz en su rostro, puso su mano en la palma de la de Zhuang Qi Yan y caminó desde el automóvil hasta el campo de visión del público. Pero tan pronto como salió, Zhuang Qi Yan se quitó el abrigo y cubrió la cara de Lin Er. Lin Er bajó la cabeza y se apoyó en los brazos de Zhuang Qi Yan y los dos entraron al hotel apoyándose el uno en el otro.

"¡¿Qué?! ¡¿La pareja de Zhuang es un hombre?!"

"¿Por qué apagamos la máquina cuando tenemos esta noticia explosiva?"

"¡Rápido! ¡Escriban una nota! ¡Rápido!"

Durante un tiempo, los reporteros estaban exaltados, y capturaron rápidamente las espaldas de Zhuang Qi Yan y Lin Er, pero salieron borrosas. En las otras fotos, había caras serias de los guardaespaldas.

Zhuang Qi Yan y Lin Er entraron en la sala VIP. Zhuang Qi Yan se puso el abrigo de nuevo y preguntó: "¿Te asustaste hace un momento?"

"No, pude soportarlo".

En este momento, Qin Zhen abrió la puerta y entró, gritando: "Caminé en un gran círculo y entré por el pasaje del personal. No pude estar presente en la batalla."

"¿Pasaje del personal? ¿Por qué no me lo dijiste antes?", Preguntó Zhuang Qi Yan.

Qin Zhen frunció el ceño con fuerza, queriendo asegurarse de que el cerebro de Zhuang Qi Yan no estuviera dañado, "¿Te vas casar y quieres entrar por una puerta de personal tan estrecha? ¿Quieres pasar por allí para asistir a tu propia boda?"

Qin Zhen tenía razón, Zhuang Qi Yan está en el centro de las discusiones, y la noticia de su boda hoy se ha convertido de nuevo en un tema de discusión entre las masas.

"Siéntate unos minutos más hasta que comience la boda". Zhuang Qi Yan se enderezó el cuello de la camisa mientras le hablaba a Lin Er, luego se dirigió a Qin Zhen: "Qin Zhen, ve tú primero a la mesa de invitados".

"Bien, te dejo entonces, hasta luego".

Allí, Zhuang Dou y Xu Zhi Zheng estaban sentados en un banco de piedra observando a unos cuantos niños pequeños que estaban con sus padres y se reían, algunos daban unos pasos y se caían, se levantaban y sonreían nerviosos, otros mostraban sus dientecitos y la baba goteaba como un hilo en los bolsillos de sus abrigos, y otros, como cabecitas de zanahoria, miraban fijamente a dos gorriones en un árbol, y aplaudían con exuberancia al ver el entusiasmo.

"Hermano Xu, ¿crees que el bebé en la barriga de Lin Er será tan bonito como ese?"

"Definitivamente".

Zhuang Dou lo miró y dijo: "En realidad, siento envidia del joven maestro".

Xu Zhi Zheng sonrió ligeramente y dijo: "Todos quieren tener la felicidad de los demás. No tienes que envidiarlo, yo creo que un día serás más feliz que él".

"Entonces... hermano mayor Xu..." Zhuang Dou cambió de posición y preguntó: "Hermano Xu, ¿has encontrado la felicidad?"

"Yo... la encontré". El corazón de Xu Zhi Zheng tenía un millón de palabras que quería decir, pero no podía expresarlo, tenía que prepararse para las consecuencias. Quería decirle a Lin Er que Zhuang Dou era su felicidad, desde el principio. Desde el momento en que vio su pobre y sucia cara, lo quiso desde el fondo de su corazón.

En aquel momento, Zhuang Dou sólo tenía quince años y Xu Zhi Zheng exactamente veinte.

Al parecer, Zhuang Dou había entendido algo mal, porque agachó la cabeza y dejó de hablar.

Tras Quedar Embarazado del Hijo del PresidenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora