Capítulo 9

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Después de que los médicos se marcharan, Chen Hao Tian volvió al lado de Lin Er y se quedó con él mientras se estabilizaba lentamente, sin decir nada ni hacer preguntas, y con un claro entendimiento.

Lin Er esperó a que salieran todos los informes de las pruebas al día siguiente para poder marcharse. Miró la pila de hojas y preguntó con cautela al médico: "Doctor, ¿estoy enfermo?"

El médico no dijo nada, sólo frunció los labios y sonrió, negando con la cabeza.

Cuando Zhuang Dou recibió la llamada, estaba paseando a su gato en el jardín de la casa principal. El gato estaba un poco gordo, y su amo parecía estar bien, pero no podía soportar verlo más y estaba decidido a tomar al gato en la casa y trasladarlo.

"Boo-boo, vamos, hay pequeños peces por aquí". Zhuang Dou cogió al gato en brazos y luego tomó el teléfono que llevaba en el bolsillo.

"¿Hola?" Era del hospital donde lo llamaban.

Cuando Zhuang Dou escuchó el informe, le entró el pánico, apretó al gato en sus brazos y lo soltó en un instante, y el gato huyó ronroneando, presumiblemente para encontrar a alguien con quien quejarse.

"¿Estás seguro?". Preguntó de nuevo Zhuang Dou.

Después de recibir una respuesta definitiva, Zhuang Dou pensó por un momento y ordenó: "No dejes que se vaya todavía, te daré instrucciones más tarde."

Inmediatamente, Zhuang Dou corrió a buscar a Zhuang Qi Yan, mientras gritaba: "¡Joven maestro! Joven maestro..."

"¡Quieto!". El maestro Zhuang lo detuvo al ver el aspecto de Zhuang.

Zhuang Dou acababa de llegar a la mitad de la escalera cuando oyó la voz del maestro Zhuang detrás de él y se estremeció, pero no podía fingir que no lo había oído, así que no tuvo más remedio que volverse.

"Ma-maestro". Zhuang Dou inclinó la cabeza, con el corazón ansioso y temeroso.

"¿Por qué lo buscas tan nervioso?"

Zhuang Dou tragó saliva, avergonzado, era algo que debía hacer saber al joven maestro antes de hablarlo con alguien más.

"No es gran cosa. Sólo debo discutir cosas del trabajo".

El maestro Zhuang no se creyó las mentiras de Zhuang Dou. Conocía a su hijo, y si no permitía que Zhuang Dou dijera nada, él no se atrevería a decir nada, así que ¿qué tendría que ocultarle? El maestro Zhuang hizo una mueca y comenzó a preocuparse.

"¿Qué está pasando?". Zhuang Qi Yan bajó del piso de arriba, estaba en una conferencia telefónica y seguramente acababa de terminar, de lo contrario no habría oído la conmoción de abajo.

Al ver a Zhuang Qi Yan, Zhuang Dou le dirigió una mirada aliviada como si hubiera visto un salvavidas.

"¿Tienes algo para mí?"

"Joven maestro, yo..."

Zhuang Qi Yan y Zhuang He estaban sentados uno al lado del otro, y Zhuang Dou estaba de pie frente a ellos, mirando a izquierda y derecha, conteniendo su corazón y alma con dificultad.

"Está bien. Aquí no hay extraños". Las palabras de Zhuang Qi Yan hicieron que el Maestro Zhuang se sintiera mucho más cómodo, y su ceño se relajó gradualmente mientras instaba a Zhuang Dou, que todavía estaba dudando.

"Si tienes algo que decir, dilo rápido."

Un torbellino de emociones pasó por el corazón de Zhuang Dou, en silencio tuvo un pequeño pensamiento: "No, no puedo...", pero su boca fue más rápido: "El joven maestro tendrá un hijo." La velocidad de sus palabras salieron tan rápido que el padre y el hijo de Zhuang no lograron captar el significado de las mismas.

El maestro Zhuang tomó el bastón a su lado y golpeó suavemente la pantorrilla de Zhuang Dou, diciendo: "¿Qué te pasa? Dilo con propiedad".

Con los ojos cerrados y la cabeza inclinada, pensando para sí mismo que podría morir, Zhuang Dou gritó: "¡¡¡El joven maestro tendrá un hijo!!!" Tras decir esto, sus ojos se volvieron hacia el maestro Zhuang y dijo con firmeza: "¡Maestro, tendrá un nieto!"

Zhuang Qi Yan levantó las cejas suavemente, y miró hacia Zhuang Dou con una mirada sospechosa. El maestro Zhuang también estaba confundido, señaló a Zhuang Dou y dijo: "Tú, ¿de quién has oído eso?"

Zhuang Dou sabía que ninguno de los dos le creía, pero tampoco estaba muy convencido de haber escuchado correctamente.

"En el hospital me dijeron que Lin Er está embarazado... y yo no entendía lo que estaba pasando". Zhuang Dou frunció el ceño un poco molesto.

"¿Quién es ese?" El maestro Zhuang le preguntó a su hijo.

Ahora fue Zhuang Qi Yan quien frunció el ceño, y respondió con hosquedad: "Es una larga historia".

"Joven maestro, pedí que detuvieran a Lin Er en el hospital, pero...". Zhuang Dou recordó que Chen Hao Tian también está en el hospital, y la gente del hospital no debe ser capaz de retrasarlo por mucho tiempo.

Zhuang Qi Yan se levantó y le dijo al Maestro Zhuang: "Padre, yo iré primero". Después de decir eso, condujo a Zhuang Dou directamente al hospital, dejando al maestro Zhuang solo en la mansión.

"He, rápido, prepara el coche y sigámoslo". El maestro Zhuang no pudo quedarse quieto y entonces llamó al Asistente He, y los dos le siguieron el rastro.

Zhuang Dou vio el coche del maestro en el espejo retrovisor y le dijo a Zhuang Qi Yan: "Joven maestro, el maestro nos está siguiendo".

"Hmm."

"Joven maestro, si el maestro también sabe de este asunto, ciertamente será problemático, él... me golpeará". Zhuang Dou dijo mientras conducía.

Zhuang Qi Yan no le contestó, apoyando su frente en sus pensamientos, y cuando Zhuang Dou pensó que estaba molesto por Lin Er, no se atrevió a decir nada más y se concentró en conducir.

En cuanto Zhuang Qi Yan y Zhuang Dou llegaron al hospital, el maestro Zhuang y su ayudante llegaron con algunos guardaespaldas. El personal médico y los pacientes del hospital nunca habían visto un espectáculo semejante, y se apartaron para darles paso tácitamente.

Zhuang Qi Yan se dio cuenta del alboroto que había detrás de él y se disgustó un poco al ver a su padre con tanta gente: "Puedes entrar conmigo solo o llevarte a la gente de atrás y volver a casa".

El Maestro Zhuang miró a su hijo y pensó: "Lo hago por tu seguridad", pero rápidamente se comprometió y dejó que el Asistente He se fuera con los demás.

Cuando padre e hijo llegaron a la habitación de Lin Er y oyeron la voz de Chen Hao Tian en el interior, Zhuang Qi Yan tiró de su padre para que se quedara fuera de la puerta y le dijo: "Entraré primero para hablar de algo, tú espera aquí".

El maestro Zhuang asomó la cabeza, tiró de la manga de su hijo y le preguntó: "¿Es mi nuera la que está ahí?"

Zhuang Qi Yan respiró profundamente y no respondió. Zhuang Dou vio esto y se apresuró a detener al maestro Zhuang, diciendo: "Maestro, no podemos entender los asuntos del joven maestro, creo que él se encargará de ello, no le causemos ningún problema, ah."

Zhuang He observó a su hijo entrar solo en la sala, su rostro mostraba una clara sensación de ansiedad. Zhuang Dou se encogió de hombros junto a él, raras veces veía a este empresario reinante tan agobiado, en efecto, los asuntos familiares son los más difíciles de tratar.

Tras Quedar Embarazado del Hijo del PresidenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora