Felix un adolecente "Heterosexual" Estudiante de danza se encuentra con Hwang Hyunjin un chico abiertamente Gay que también estudia danza.
Hyunjin queda totalmente enamorado de Felix desde el primer momento en que lo ve y decide conquistarlo pero...
Eres básicamente el motivo por el cual me levanto todos los días
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_Un mes despues_
—Uno, dos, uno, dos, vamos Jinnie, tú puedes, solo tienes que dar unos cuantos pasos más y llegas a la meta—
—No creo que pueda llegar pequitas, duele mucho— Quiero rendirme pero Felix me espera emocionado al otro lado.
—Amor, no puedes rendirte a unos cuantos pasos de la meta, vamos, respira, Inhala, exhala, ya falta poco—
Me siento como un bebé dando los primeros pasos, rendirme no es una opción, Ver a Felix animandome al otro lado, me llena de energía, ver como se emociona cada vez que yo doy un paso, es la suficiente motivación para seguir.
Respire profundo y conté en mi mente, uno, Felix me espera, dos, no puedo decepcionarlo, exhale y di otro paso más, Felix salto de alegría y sonrió tanto que sus ojos se hicieron dos pequeñas líneas horizontales y esa sonrisa hizo sentir cálidez en mi corazón.
Ya paso un mes desde la última vez que lo vi llorando, yo sé que aún esta herido por dentro y que los traumas no se irán tan fácil, pero quiero estar siempre para cuando me necesite.
Cuando al fin llegue al lugar que se suponía que debía llegar, mis piernas flaquearon y caí en los brazos de Felix quien casí cae al piso por sostenerme.
—¿Estas bien?— Preguntó asustado.
—Estoy bien— respondí sonriéndole.
—Lo has hecho bien amor— Susurró besando la comisura de mis labios.
Esa misma tarde cuando regresamos a casa, ambos tomamos una ducha con agua tibia y sales especiales de baño.
Lavé la espalda de Felix con una esponja mientras el jugaba con el espuma.
Acaricié su espalda con la esponja y luego solo con las palmas de mis manos.
—Pequitas— le susurre al oído besando su oreja y pude sentir como su cuerpo se estremeció.
—¿Que pasa?— respondió volteando a verme.
—Casemonos— sus ojos se abrieron super grandes tan grandes que pensé que se le saldrían, se giro completamente y se sento sobre mi regazo, estábamos desnudos así que pude sentir su intimidad rosando con la mía, algo que provocó un escalofrío en todo mi cuerpo.
—¿Lo dices en serio?— pregunto emocionado.
—Si, en serió cariño, Quiero que nuestra boda sea frente o en la torre Eiffel— respondí atrapando sus labios.
—Siempre he querido visitar París— Sonrió.
&Entonces eso es un ¿si?— pregunté
—Mmmmm— Fingió pensarlo para luego soltar un enorme ¡NO! Con letras gigantes y mayúsculas, algo que me dejó totalmente confundido, estaba emocionado y luego puso su cara seria y dice que no, dios, me quiero morir.
—¿Por que?— pregunté al borde de las lágrimas —¿Es por mis Piernas?— Yo estaba triste pero él soltó una carcajada, es un momento serio y él se está riendo.
—Eres un tonto Hwang, claro que no es por tus piernas.—
—¿Entonces?—
—Es por que no veo el anillo y sin anillo no hay compromiso—
—¿En serio es por eso pequitas?— Él asintió.
—Busca en mi bolso— Felix se levantó envolviendo la toalla en su cintura y regresó con una pequeña caja roja de la marca Cartier, una prestigiosa joyería en París.
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Felix, emocionado me la entrego.
—Y entonces ¿aceptas casarte conmigo? Pequitas, Ningún otro te pedirá matrimonio en un jacuzzi mientras te lava la espalda— él sonrió y mi mundo se iluminó.
—Si, si y si, acepto casarme contigo—
Extendió su mano y le coloque el anillo en cual encajo perfectamente en su dedo.
