Festival Escolar

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¡Me niego! ¡No voy a salir con esto!- Akaza gritaba avergonzado por su apariencia.

Mm ¿Entonces prefieres que cuente tu pequeño secreto?- Kokushibo lo estaba amenazando.- Me preguntó que dirán sobre Rengoku-sensei.

Después de pronunciar su nombre el pelirosa salió de ese salón donde habían quedado de verse. A propósito eligió el lugar más alejado de su salón de clase para que lo vieran pasar todos en la escuela.

Ni se te ocurra.- Bueno, tuvo que darle puntos por el valor de salir así vestido.

Su traje consistía en una orejas, body y colita rosa de conejito tipo playboy. Al ir caminando sentía todas las miradas sobre el, el desgraciado hasta le consiguió unos tacones bajos para que hiciera juego.
Desde omegas hasta alfas no le quitaban la mirada de encima.

Pff Akaza te ves ridículo.-Douma se echó a reír apenas lo vio.- Aunque no te queda tan mal, me gusta la combinación.

¡Oww! ¡Akaza te ves super lindo!- Gritó Ume qué agarraba las orejas de este.

Hermano... Tal vez no seas un Alfa después de todo.- Su hermano se burlaba de el, tenía que aguantar, solo sería un día... Uno muy largo.

Kyojuro tuvo que aguantarse la risa para no avergonzarlo más, con recordar que fue obligado a vestir así solo para tapar su pequeño secreto.
Los clientes empezaron a entrar, el mesero #1 obviamente era ese bonito pelirosa vestido de conejito, los rumores se extendieron por toda la escuela así que lo consideraron un éxito, tenían fila para que pudieran pasar y sus compañeros no desaprovecharon la oportunidad de vender fotos con el mesero sexy.

Los voy a matar, lo juro que los mato.- Se quejaba entrare dientes mientras  sonría falsamente a la cámara.
Aunque el era el más famoso el resto de sus compañeros igual tenían a sus fans así que compartía parte de esa carga con ellos.

Vine por los rumores, pero la comida es muy buena.-Se escuchaban esos comentarios entre los clientes, a Akaza se le infló el pecho de orgullo después de todo el fue quien preparó casi todo.

En verdad, soy afortunado de que me vas a cocinar todos los días.- Kyojuro estaba atrás de él, no sé había dado cuanta hasta que escuchó esos susurros en su oído. Dios tenía tantas ganas de llevarlo a algún salón desocupado y besarlo como tenía ganas.

Kyojuro yo... - No terminó de hablar por el ruido qué se escuchó en el lugar.

No sé quien eres, pero como sea ya te odio.-Se oía la voz de una mujer pero no alcanzaba a verla por las personas que se acumularon al rededor.
Lo único que lograba ver era a Douma con su ropa mojada y algo de comida embarrada en su ropa.

¡Pero lo que digo es en serio!- Se quejaba el más alto.- ¡En verdad somos destinados!
Tomó las pequeñas manos de esa chica que por fin podía verle la cara era una mujer pequeña, cabello largo y ojos morados, se le notaba algo molesta pero aún manteniendo una sonrisa que le daba escalofríos.

Te lo repito, soy beta no podemos ser algo así.- Tenía un punto, pero las personas destinadas no eran solamente entre omegas y alfas.

Oigan, si van a pelar háganlo allá afuera.-Kokushibo llegó en el momento perfecto, a los dos les dio un poco de miedo su presencia, después de todo era alto y de apariencia ruda.

Akaza se giró a ver a su pareja pero ya no lo encontró en su lugar, pero a cambio dejó un delicioso aroma qué por alguna razón lo hizo entrar en un transe, no supo cómo pero cía do se dio cuenta ya había salido del salón para ir siguiendo ese olor.
Lo encontró en la enfermería tirado sobre sus piernas sin poder moverse nada, con solo verlo lo entendió, Kyojuro había entrado en celo.
Sin poder evitarlo sus ojos cambiaron de forma y sus colmillos se agrandaron, casi no podía controlarse quería tomarlo en ese instante.

¡Rengoku!- Entró Uzui a esa habitación y vio esa escena, maldita sea ahora se iba a complicar un poco. El nombrado lo vio con unos ojos qué estaba en pánico, se le vía como intentaba con todas sus fuerzas seguir cuerdo.- Perdón, pero me lo tengo que llevar.

¿Qué quería decir con llevárselo? No entendía qué pasaba, su novio, su pareja destinada siendo cargado por otro Alfa lo ponía muy mal ¿Por qué le contó sobre su fecha? ¿Acaso no quería nada? ¿Se calmaria por lo mientras con otro? Quería detenerlo.

¿A donde te lo llevas?- Ya estaba furioso, dejó salir si voz y las feromonas más amenazantes que podía tener, esto hizo temblar un poco a Uzui pero no se iba a dejar intimidar por un mocoso por más dominante qué fuera ese niño.

Escucha, quita esa voz le estás afectando a el.- Y era verdad, con eso solo lo hacía sentir miedo.- Le voy a dar su medicamento y llevarlo a casa, no puedes estar cerca de el ahora.

Eso le dolió ¿Por qué no querría estar con el en su celo? Solo se le ocurría por ser aún un estudiante.
Sin decir nada solo salió corriendo de ese lugar, tenía que calmarse. Luciendo esa estúpida ropa se sentía aún peor, mañana le preguntaría lo sucedido pero por ahora solo quería llorar, tal vez no era lo suficiente para saciar a su omega.
Qué jodido.





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