La búsqueda de la inexistente fortuna (Unlucky Mansion) ⟫ JINKOOK

08 . II

🦇

Yoongi se acomodó la ropa tan pronto escuchó su celular vibrar con impaciencia. Taehyung aún tenía el cinturón abierto y su bragueta abajo aunque ya todo estaba guardado en el bóxer. Estaban mortificados y estupefactos: en primera, nunca habían tenido un grupo así en kakao talk, la combinación le hacía gracia a Taehyung, tipo, dos vampiros y dos humanos, ¿dónde carajo más habría un chat como el de ellos? Después, el susto les llegó al mirar a Jungkook casi delatándolos.

Yoongi empujó fuera de su cuerpo a Taehyung que no se había despegado del todo de él. Estaba sudando horriblemente y el calor humano de Taehyung no ayudaba mucho.

—Fue tu culpa —murmuró el vampiro—. Por ti, Jungkook sabe. ¡Te lo dije, carajo! —gritando golpeó el hombro cubierto de Taehyung.

—¡Pero si fue tu trasero el que lo rompió! —Se defendió el menor. Ofendido. Él también estaba todo pegajoso, Yoongi es pequeño pero no lo suficiente, todavía pesa.

—¿Sí? ¿A quién crees que se deba que mi culo lo haya tirado? ¡Dime! —Taehyung se quedó callado. Yoongi tenía toda la razón.

Taehyung había llevado del pasillo a la sala inmaculada —una llena de objetos preciosos que pertenecían a la dinastía de vampiros más antiguos de Asia— a Yoongi cargándolo con sus brazos enrollados en las lechosas piernas del vampiro y éstas, a su vez, enroscadas en la cintura del humano. En lo que se extraían la saliva y el líquido vital rojo con sus besos de camino a alguna mesa o pared para apoyarse mejor, Taehyung no encendió la luz a tiempo y provocó que la espalda y trasero de Yoongi chocaran con la reliquia preciada de la familia Kim. En ese instante, a ninguno le importó y rápidamente fornicaron en la oscuridad sobre la mesita donde antes posaba el jarrón. El deseo siempre terminaba nublándoles la vista de lujuria.

Ahora sí que les importaba.

Estaban muertos. Jungkook los había escuchado y delatado.

«"Qué tal si nos vio..."; pensó Yoongi horrorizado».

—Lo siento, hyung —dijo Taehyung rascándose la nuca. Yoongi se calmó un poco. Pero inclusive así, dijo:

—Si las disculpas fueran suficientes, no existiría la policía, Taehyung. —Taehyung dejó que sus dotes de actuación brotaran. Sus ojos estaban a punto de explotar en lágrimas. Yoongi suspiró rodando los ojos... No de nuevo—. Esto me pasa por hacerte caso. Tú y tus fetiches de hacerlo en cualquier lugar menos en la cama...

—... ¿Y no te gusta? —Suprimiendo las ganas de llorar, Taehyung se fue encogiendo de hombros lentamente y el vampiro incrementó su mirada filosa sobre él. Terminaría estrangulándolo y después matándose él mismo. De esa forma no enfrentarían a un Seokjin furioso—. Digo... Pareces disfrutarlo much...

—¡Cállate!

El sonido del mensaje de ambos celulares impidieron que Yoongi devorara a Taehyung en el sentido más literal posible pues lo privaría de la vida. El mensaje era del grupo, de Seokjin. La muerte no parecía una opción, de verdad tenían que contestar.

—Maldito bocón —dijo Taehyung entre dientes después de leer el mensaje de Jungkook.

Lucky Mansion

Jinjinjara
¿Y...?

Taehyung (H)
Seokjin hyung, no es lo que crees.

Tú
Jin hyung, no sé de qué hablas. Yo no he visto tu jarrón porque nunca entro a la salita esa.

Jinjinjara
Yoongi y Taehyung, ¿no me tienen miedo? Quizás he sido muy permisivo con ambos. ¿Saben cuánto vale el jarrón? Desde el inicio les dejé en claro lo valiosa que es esa reliquia, ¿no lo entendieron?