Capítulo 20

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POV HADRIAN

Odio tener a los aurores cerca, no hacen más que fruncir el ceño e intimidar a los estudiantes, con la excusa de que los estudiantes interfieren en su trabajo. Lo cual me parece una completa mierda. A Tom no le importa mientras ninguna de las serpientes sea tocada, si un estudiante se queja de los aurores, él se encargará de eso, bueno, excepto yo. Me quejo de ellos todo el tiempo.

Mientras caminaba por el pasillo para llegar a mi próxima clase, un auror me detuvo. "¿Adónde vas?" casi gruñó, levanté una ceja hacia él.

"Hasta mi próxima clase, señor", traté de sonar respetuosa, realmente lo hice, pero mi molestia era clara en mi voz. El auror me miró con los ojos entrecerrados.

"Muéstrame un poco de respeto, niña insolente", gruñó, ahora los estudiantes se estaban reuniendo a nuestro alrededor para disfrutar del espectáculo. Todos los estudiantes saben que soy una de las personas más poderosas aquí.

Entrecerré los ojos al hombre. "Me niego a mostrarte respeto porque no me respetas y no has hecho nada para ganarte mi respeto", el hombre me miró con furia antes de agarrarme del brazo con fuerza y ​​arrastrarme por el pasillo.

"¡¿A dónde me llevas?!" gruñí. Él no respondió.

Cuando finalmente se detuvo, estaba en un salón de clases abandonado, me empujó adentro. Entré a trompicones y me encontré con la vista de otros cuatro aurores. "¿Lord Weasley? ¿Quién es?" Giré mi cabeza hacia el hombre que me arrastró hasta aquí y finalmente me di cuenta de la apariencia de Weasley, aunque este Weasley era muy ancho y musculoso.

"Este tipo es una persona sospechosa y debe ser interrogado de inmediato", declaró Weasley con valentía. Los otros hombres asintieron antes de mirarme.

"¿Tenemos su permiso para interrogarlo con veritaserum?" Miré alrededor por un momento antes de suspirar y estar de acuerdo. Me dieron las dosis y comenzaron el interrogatorio conmigo diciendo mi nombre. Supongo que lo bueno de ser el Amo de la Muerte es que el veritaserum no funciona conmigo.

POV DE TOM

Estaba caminando por el pasillo hacia la cena cuando escuché un chisme interesante: "¡Han estado interrogando a Peverell desde el segundo bloque y aún no han terminado! ¡Se rumorea que es inmune al veritaserum!" dijo el chismoso. Detuve mis pasos y me volví hacia las dos chicas.

"Disculpen, señoras, pero no pude evitar escuchar su conversación. ¿Saben dónde está la sala de interrogatorios?" ambas chicas se sonrojaron mientras se miraban.

Corrí por los pasillos hasta la supuesta sala de interrogatorios. Patiné hasta detenerme cuando llegué a la puerta, tomé la manija cuando me detuve abruptamente, pude escuchar a Hadrian hablando con los aurores con exasperación antes de que su oración fuera interrumpida por un grito de dolor. Sentí que me hervía la sangre cuando volé la puerta de sus goznes. Ahí en medio del piso encadenado y sangrando estaba mi Hadrian, se veía aliviado de verme, miré a la única otra persona en la habitación. Claramente era un Weasley. Mi sangre hirvió aún más cuando entré en la habitación.

"Lord Weasley, va contra las normas escolares y la ley del Ministerio torturar a un mago menor de edad para obtener información. También es ilegal torturar a un Lord de una casa antigua y noble que actualmente se encuentra bajo la protección del Ministerio". Vio al cobarde tragar saliva.

"Sí, bueno, joven, es inapropiado interrumpir un interrogatorio", le gruñí y envié un hechizo aturdidor hacia él. Golpeó el suelo con un fuerte golpe, volé las cadenas de Hadrian mientras corría hacia él, apenas atrapándolo mientras se desplomaba hacia adelante.

Lo levanté y comencé a llevarlo a la enfermería. Gruñó contra mi pecho mientras yo continuaba caminando. "Cállate amor, duerme un poco", me miró y sonrió.

"Estaba empezando a preocuparme cuando no apareciste", sonreí también.

"¿Qué dije sobre dormir un poco?" soltó una carcajada antes de cerrar los ojos.

Hadrian estaba acostado en la cama de la enfermería desmayado, sus heridas ya sanaron, se veía etéreo mientras la luna brillaba sobre él. De repente se despertó y se sentó respirando con dificultad, corrí a su lado para calmarlo. Suspiró mientras se apoyaba en mí para consolarme.

"¿Un mal sueño?" Le pregunté, sacudió la cabeza.

"Fue un mal recuerdo", suspiré y besé la parte superior de su cabeza.

"¿Quieres hablar de eso?" sacudió la cabeza de nuevo antes de inclinarla hacia atrás para mirarme. Me incliné y comencé a besarlo lentamente, sus labios estaban ligeramente agrietados pero no me importó, solo profundicé el beso. Deslicé mi lengua dentro de su boca mientras chupaba sus labios, él gimió cuando mordí ligeramente su labio inferior. Nos alejamos un poco para recuperar el aliento, Hadrian se incorporó desde su posición de recostado sobre mí para montarse a horcajadas sobre mí. Le sonreí antes de mover mi varita y cerrar las cortinas.

Continuamos besándonos, nuestras lenguas bailaban y se enredaban, descargas eléctricas latían a través de mi cuerpo con cada toque que compartíamos. Mientras continuamos besándonos, dejo que mis manos deambulen por su cuerpo y lentamente alcancen a desabotonar su pijama de hospital. Sentí a Hadrian temblar debajo de mí cuando deslizó sus manos debajo de mi camisa para palpar mi estómago y mi pecho. Lancé la camisa de Hadrian sobre la silla cuando nos separamos del beso, continué besando su cuello y su pecho. Él gimió debajo de mí mientras mordisqueaba su clavícula, sentí que sus manos buscaban a tientas los botones de mi propia camisa, así que me alejé y lo hice por él, observando su expresión cuidadosamente con cada botón que desabrochaba. Su rostro prácticamente brillaba con lo mucho que se sonrojaba.

POV HADRIAN

Sentí que mi rostro se calentaba mientras observaba a Tom desabotonarse lentamente la camisa, una vez que terminó, la arrojó hacia donde alguna vez arrojó la mía, se inclinó hacia adelante y me empujó sobre la cama mientras se inclinaba sobre mí y volvía a conectar nuestros labios. Estaba en pura felicidad cuando pasé mis manos por su cabello y me aferré a él, nuestros pechos desnudos rozándose uno contra el otro hicieron que me doliera todo el cuerpo con descargas eléctricas haciéndome gemir en la boca de Tom.

De repente, hubo un fuerte golpe de las puertas de la enfermería abriéndose, Tom y yo nos quedamos mortalmente inmóviles mientras escuchábamos el clic de los zapatos que se dirigían en nuestra dirección, agarré con más fuerza el cabello de Tom cuando el clic se acercó, no me di cuenta de eso. Estaba conteniendo la respiración hasta que el ruido de los zapatos pasó junto a nosotros. Tom se incorporó lentamente y me entregó mi camisa, lo miré con curiosidad mientras me ponía la mía pero no se puso la espalda, sonrió mientras me acercaba una vez que terminé. Me dio un casto beso antes de hacernos acomodar en la cama a dormir. Suspiré con decepción mientras pasaba sus dedos por mi cabello.

"¿Esto significa que no vamos a terminar lo que empezaste?" Pregunté indignado, sentí que su pecho retumbaba mientras se reía.

"No quiero que nuestra primera vez sea en una enfermería", sentí que mi rostro se encendía con calidez cuando Tom trató de ocultar su risa.

"O-oh", fue mi respuesta tartamudeada.

𝓐𝖙𝖗𝖆𝖘 𝖊𝖓 𝖊𝖑 𝓣𝖎𝖊𝖒𝖕𝖔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora