OVERLORD, ALMAS EN LA OBSCURIDAD

MEMORIAS DE UNA AVENTURERA DEL REINO HECHICERO-06

//Todo el tiempo la Capital del Reino Hechicero era un mar de bullicio, constantes movimiento de productos, mercados llenos de clientes, complejos trabajos de remodelación lograban escucharse a través de la ciudad durante todo el día, por la mañana grupos de menores de varias especies se dirigían a las escuelas básicas o institutos y por la tarde regresaban a sus casas para completar sus deberes o jugar en alguno de los tantos jardines construidos recientemente. Los Dragones Escarcha patullando los cielos de vez en cuando rugían, atrayendo las miradas buscando presumir las exquisitas y poderosas armaduras. Durante las noches no era raro ver niños o parejas jóvenes salir a divertirse, acudiendo a las variadas cafeterías o restaurantes antes de visitar las plazas donde trovadores, juglares, marionetistas y demás ofrecían sus espectáculos o asistir a los teatros donde se escenificaban obras originales, basada en literatura entregada por el Rey Hechicero.

La ciudad era la más segura del mundo, ningún criminal desafiaría con algún acto sucio al amo y señor del Reino Hechicero, quien enviaba a Death Knight y otros seres a recorrer sus calles, al pasar se guardaba silencio, no por temor o angustia al contrario sentimientos de respeto y solemnidad revelaban los ciudadanos de tan singular lugar.

Cierto día una joven de 16 años aproximadamente de pelo rubio y corto de intensos ojos azules, tez blanca y complexión atlética, disfrutaba la mañana tomando un café y degustando galletas en una de las tantas cafeterías cercanas al centro de la ciudad; hoy acudía al café Nikita, a veces jugueteaba con una pulsera plateada en su muñeca derecha donde se encontraba escrito su nombre, Aria Wolf y el emblema del Reino Hechicero, era el símbolo de ser integrante de la academia de Aventureros del Reino Hechicero. Mientras saboreaba de otro sorbo de Chocolate observo por la ventana cercana a la mesa donde se encontraba, unos niños divirtiéndose con las figuras de un caballero y un Dragón y detrás de ellos una mujer, sonriendo por sus jugueteos, suponía era su madre, quien cargaba enormes bolsas de rafia llenas de comestibles, se detendrían un momento realizando una reverencia a los Death Knight patrullando la zona, después de pasar a su lado los niños agitaban sus manos y les gritaba "Adiós" Mientras reían efusivamente.

Solo en el Reino Hechicero causaba felicidad ver un ser de más de dos metros de altura que no parecía humano, sosteniendo en la mano izquierda un escudo de torre cubriendo tres cuartas partes de su cuerpo y en su mano derecha una espada flamígera, cubierta de una niebla aterradora en olas de color rojo y negro agitándose alrededor como un constante latido, aterraría a cualquiera, la espada normalmente seria levantada con dos manos, pero el caballero de la Muerte revelaba su fuerza al llevarla con una sola mano.

Su enorme cuerpo vestía una armadura hecha de metal negro con líneas de sangre de color carmesí grabadas en ella, poseyendo agudas espinas por todos lados, dando la impresión de ser una encarnación de violencia. Los cuernos, demoniacos que salían desde el casco, donde una cara visible debajo se revelaba repugnante y podrida con las cuencas oculares vacías y llenas de odio e intención asesina, brillando en un matiz rubí, su andrajoso manto azabache aleteando en el viento provocaba una atmosfera nostálgica

Todos le reconocían como un guardián creado por El Rey Hechicero y su presencia simbolizaba seguridad...//

¡"Mientras el Rey Hechicero viva, mejor dicho, exista ninguna niña o niño sufrirá de hambre, crueldad o violencia... si tan solo se hubiera presentado antes, mi padre viviría y mi madre no hubiera sufrido tanto"!

//Los pensamientos de la joven la llevaron al pasado a una aldea agrícola lejos de E-Rantel donde vivió sus primeros años de vida//

>>POV ARIA<<