Historia de 31 capítulos especiales.
Acompáñame todo este mes de Agosto a celebrar el Nejiten.
El fandom ha creado un topic para cada día del mes y es un reto que quiero cumplir y compartirlo contigo.
Si buscas momentos Nejiten que leer o imágene...
El sonido de alguien ingresando en el salón, la hizo voltearse hacia la puerta, encontrándose con su amigo Hyūga.
Ella frunció levemente el entrecejo y ladeó la cabeza por la duda. Se cuestionó por su presencia en ese lugar.
–¿Buscas a alguien?
Neji recorrió el salón con su mirada, confirmando que solo ella se encontraba en éste.
–Todas se han ido, así que si buscabas a alguna en específico...
–Te buscaba a ti. - la interrumpió, haciendo que se silenciara. Ella le sonrió al momento que se posicionaba frente a él. –Afecto.
–¿Afecto? - achicó sus ojos y dibujó una mueca. –Hay muchos tipos de afecto, Neji. Debes encontrar una palabra más específica o cualquiera podría malinterpretar el significado.
Él la observó en silencio. Pensativo.
–Me sorprende que me elijas.
Hacía un par de horas que habían comenzado ese juego con su grupo de amigos. Elegías a una persona y definías tu sentir hacia ésta con una palabra. Al parecer, ahora era el turno de Neji y la había elegido a ella.
–¿A quien más si no? - ella se encogió de hombros y suspiró, bajando la mirada. Él se acercó un poco más. –No me considero una persona de palabras.
–Y yo, al contrario, creo que eres muy bueno con las palabras. - lo contradijo, fijando sus orbes marrón sobre él. –¿Entonces dirías que eres una persona más de acción que de palabras? - la mirada malva dejó su fijación en esos ojos chocolate y descendió hasta la parte baja del rostro femenino, ahí donde un color carmesí le daba color a los labios de su amiga.
–Me gusta pensarlo. - sus manos se levantaron hasta colocarse en las mejillas de Tenten. Ella lo observó con anhelo, cuestionándose internamente si realmente estaba pasando o era un acto de su imaginación. –Tal vez, deba especificarte lo que mi afecto significa.
No fueron más que meros segundos cuando sucedió la unión de sus labios, donde entonces comprendió que había sido ella quien había malinterpretado e infravalorado lo que la palabra "afecto" significaba para su amigo.
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