n/a: también todo pasa un tiempo antes del epílogo
Madison había cumplido sus dos años hace un mes y Alexander tenía ocho. Ambos niños eran la luz de los ojos tanto de Harry como de Louis. Amaban su familia y estaban demasiado agradecidos por todo lo que tenían.
Era domingo y ese día, Louis y Harry cumplían un año de haberse casado. Un año desde que se dijeron sus votos y juraron su amor leal al otro delante de todas las personas importantes en sus vidas, incluyendo sus hijos quienes fueron los encargados de llevar las argollas y unas flores durante la ceremonia.
Louis había planeado un viaje a un lugar no muy lejos de casa, serían solo él y Harry, pasando tiempo juntos y a solas. Amaba pasar tiempo con sus hijos, pero si debía ser sincero, extrañaba cuando podía tener el tiempo que quisiera solo para él y su esposo; esos momentos se habían estado agotando gracias a la pequeña bebé de ojos verdes que pasaba todo el día diciendo palabras que nadie entendía y gracias al niño de ocho años que creía que podía tener crisis de adolescente solo por los programas que veía en la televisión.
Ser padre es agotador, Louis y Harry nunca van a negar eso, pero sin importar lo agotador y extremo que llegue a ser algunas veces, aman a sus hijos y no cambiarían todo el tiempo que pasan con ellos por nada en el mundo. Bueno, si lo cambiarían por unas pocas horas a solas, pero es que en verdad lo necesitan.
Louis habló con su mamá (ya que es la que vive más cerca), para que cuidara de sus dos hijos. Gracias a la vida y justo como lo esperaba, ella no se negó, así que ahí estaban ahora, los cuatro miembros de la familia Tomlinson Styles en el auto de camino a la casa de la señora Tomlinson.
—Entonces, ¿la abuela me llevará a la escuela mañana y el martes? —preguntó Alexander mirando por la ventana del auto.
—Si, bebé. —respondió Louis, haciendo lo mismo que su hijo—Nosotros llegaremos el martes en la tarde.
—Me parece un poco injusto que yo si tenga que ir a la escuela y papá Harry pueda dejar de ser profesor por dos días.
Harry rió divertido y miró a sus dos hijos por el espejo retrovisor. Madison iba dormida en su silla para bebés y Alexander continuaba mirando por la ventana.
—Irá un profesor de reemplazo esos dos días —explicó Harry con una sonrisa.
—Igual dejarás de ser profesor dos días. ¿Sabes en qué te convierte eso, señor Harry? —preguntó mirando hacia dónde iba el rizado conduciendo, fijando sus bonitos ojos grises en su papá.
—No, no lo sé, señor Alexander —Louis y él se sonrieron—¿Puedes decirme?
—En un irresponsable —respondió inflando su pecho con orgullo, como si hubiera acabado de descubrir esa palabra, pero la verdad es que estaba imitando lo que Louis solía decirle cada que no quería hacer sus tareas.
Harry soltó una carcajada y luego se llevó una mano al pecho, fingiendo haber sido lastimado por las palabras de su hijo. Louis admiró la escena sonriendo, enamorándose más de su familia.
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—Te amo tanto, princesa —susurró Harry contra su cuello una vez entraron en la cabaña luego de haber estado recorriendo el lugar por un rato.
Hace un poco más de una hora había llegado al lugar que Louis había escogido para que pasaran juntos, celebrando su matrimonio y disfrutando el tiempo a solas.
—Y yo te amo a ti. —respondió riendo por las cosquillas que le hacía Harry con su pequeña barba de tres días sin cortar.
—Llevo tantos días sin probarte, sin sentirte —dijo subiendo lo besos hacía la mandíbula del castaño —Te necesito tanto.
Louis gimió cuando sintió una leve mordida en su mandíbula y tomó el rostro de Harry entre sus manos para atraerlo a un beso. Un beso ansioso y necesitado. Un beso que demostraba cuanto se necesitaban y deseaban en ese momento.
—Vamos a la habitación.
Harry lo levantó, haciendo que su esposo enredara sus piernas alrededor de sus caderas. El rizado puso sus manos debajo del trasero ajeno para cargarlo y evitar que cayera. Una vez llegaron a la habitación, tumbó a Louis justo en la mitad de la cama y él no perdió tiempo para posicionarse encima de su amado.
Luego de unos cuantos besos y caricias por encima de sus ropas, ambos se desnudaron y Harry llevó dos de sus dedos a la entrada de Louis, gimiendo en los labios ajenos cuando lo sintió húmedo y palpitar alrededor de sus dígitos.
—Mi princesa, siempre húmedo para mi. —dijo dando un suave mordisco en el labio inferior de su esposo.
—Más, por favor —pidió gimiendo y moviendo sus caderas, tratando de que los dedos de Harry llegaran más profundo.
Cuando estuvo listo, Harry tomó un condón de los que había llevado y rápidamente se lo puso para empezar a entrar lento, haciéndolos gemir a ambos ante la sensación.
—E-extrañaba tanto esto, sentirte dentro de mi. —dijo Louis, jadeando, mientras jugaba con el cabello de la nuca de Harry.
—Siempre me recibes tan bien.
Sin esperar más, entró por completo en Louis, haciendo que este curvara su espalda y gimiera alto. No pasó mucho tiempo para que empezara con estocadas más fuertes y profundas, abusando de la entrada del castaño a su antojo, haciéndolo rogar por más, gemir cada vez más alto y enterrar las uñas en su espalda con más fuerza. Dió en el punto de Louis varias veces antes de que su esposo se viniera manchando ambos cuerpos y quedara con la respiración alterada debido a su orgasmo. Harry no duró mucho más luego de ver lo majestuoso e irreal que se veía su esposo luego de haber hecho el amor.
—Te amo, te amo. —susurró Harry acariciando la espalda desnuda de Louis. Ambos estaban acostados, recuperándose de sus orgasmos—Te amo, mi esposo perfecto.
—Te amo- —respondió sonriendo y dejando un besito en el pecho de Harry.
Haber conocido a Harry fue, en definitiva, de las mejores cosas que le pudieron pasar en su vida. Nunca se cansaría de agradecer haber coincidido con el profesor, ahora papá, de sus hijos.
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n/a: bueno, holaaaa
hasta aquí estaba la historia antes de que wattpad la borrara con mi otra cuenta. Tengo pensado hacer otro u otros dos extras, así que díganme qué más les gustaría leer de esta bonita historiaaa
gracias por llegar hasta acá, comentar y votar, valoro mucho todo su apoyo.
un besoo <3
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the teacher and ¿mommy? [l.s]
RomanceLouis es padre soltero y su hijo, Alex, ama decirle "mami" o "mamá". Harry es el nuevo profesor de preescolar del pequeño Tomlinson y cuando se entera de la forma en que él llama a Louis, no puede evitar sentirse más atraído hacía el castaño. - - - ...