cap.1: pequeño problema.

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Stiles corría lo más rápido que le daban sus piernas, putas piernas de perro salchicha.

- voy aceptar hacer más entrenamiento- dijo cansado.

Para su mala suerte piso mal, rodando por todo el bosque causando un bufido por parte del chico.

- el pequeño humano de la manada- hablo con burla la bruja.
- mira perra, si pude con un nogitsune puede con tu cara verugosa- miro con cuidado- probaste algún hechizo para limpiar esa cara, porque enserió eso no estaba bien, ¿fuiste a un medico?-
- maldito- hablo entre dientes atacando al menor que esquivaba los ataques.

La mujer sacó un cuchillo y trato de apuñalar a la chispa, pero esquivo el objeto.
Pata su suerte salio ileso, pero su pobre binder se rompió.

- bruja de gulubú* me rompiste mi ropa, sabes lo caro que esto- gruño molesto.

La manada está cerca sentía las cuerdas que los unía, así que decidió ganar tiempo hasta que estos lleguen.
Desgraciadamente termino chocando contra una árbol, provocando una gran pérdida de aire.

La mujer empezó a murmurar algo, cuando Scott llegó corriendo y la golpeó, mandando la lejos.

Una luz envolvió a Stiles, para luego caer sentado en el piso.

- ay- se quejó mientras se frotaba el trasero.
- ¿Stiles?- llamo un confundido Liam.
- ¿sucede algo?- hablo confundido, hasta que sintió que una gran cantidad de pelo cayó sobre sus hombros.

Toda la manada lo miraba fijo con si algo mala pasara, siendo Scott que no dijo nada y lo cargo como costal de papas.

- Llamen a Deaton- dijo Scott mientras caminaba rápido a la mansión Hale.
- ¡Bajame tarado!- gritaba Stiles peleando con el agarre de su amigo.

Como si fuera una papa caliente, terminó siendo cargado por Malia.

Siendo llevado a un cuarto donde entraron todas las chicas, quienes lo miraron de pies a cabeza.

- ¿chicas?- hablo nervioso.
- ropa- dijo Lydia para que Allison le de una pila de ropa- cámbiate- pidió.
- ¿esta bien?- hablo con duda.

Se fue al baño, al mirarse al espejo solo suspiro, se puso el sostén que era uno deportivo, agradeció a todos los santos que era de su talle.
Prometía regalarle el mundo a Lydia, le había dado un buzo más grande que su talle y unos pantalones sueltos, dios estaba muy cómoda.

- supongo que hoy es el día- dijo muy nerviosa.

Salió con calma, siendo Lydia que le pidió que se siente. La peino haciendo una coleta alta, le dio una sonrisa tranquila, para luego salir del cuarto y llegar al primer piso donde Deaton esperándolos.

Antes que pueda hablar Deaton empezó a revisarla, de pies a cabeza.

- Puede que sea un hechizo de cambio de género- dijo con calma.
- ¿cuanto estará así?- cuestiono Scott nervioso.
- no lo se, tendría que buscar entre los libros que tengo, pero hay una gran probabilidad de que sea por una año o más- informó con calma al alfa.

Stiles seguía analizando la situación, solo veía todo el silencio, no podían ser tantos su  manada.

- ¿que le diremos al Sheriff?- dijo Allison nerviosa.
- todo esta bien cariño- Lydia paso su mano por la cara de la joven- no te preocupes.
- prometo hermano que encontremos la cura- ánimo Scott.
- me iré a investigar- informó- Por cierto, no estaré en el pueblo por un tiempo, los contactare por mensaje-

Stiles literalmente era un poema, no salía de su sorpresa.
¡ESTA EN UNA MANADA DE IDIOTAS! Gritaba cada parte de su cabeza, al punto de mirar a Scott de forma fija.

- llévame a casa- pidió.
- Sti- hablo nervioso Scott.
- ¿ahora que le diremos al Sheriff?- hablo asustado Liam- ¿como le explicamos que su hijo ahora es mujer?- ¿Liam estaba al borde del llanto?, Stiles miraba todo si poderlo creer.
- ¿y si Stiles usa su magia para volver a la normalidad?- cuestiono con calma Mason.
- no- hablo por fin Derek- él no sabe usar bien su magia, es muy peligroso- sentenció.

Ya le dolía la cabeza quería gritarle a todos, y más cuando Melisa, Noah, Peter y Chris entraron.
Noah no sabía que decir o que hacer, Stiles tenía una mirada de confusión y frustración en la cara.

- ¿Stiles?- llamo su padre.
- papá- hablo.
- Sheriff, podemos explicarlo- dijo nervioso Isaac.

Melisa y todos escucharon atentos lo dicho por Jackson, la adulta no sabía si reírse o regañarlos por su torpeza, pero los ojos de la menor le dieron a entender que tenía que fingir.
Noah solo suspiro cansado, todo era un caos y su hija estaba peor.

- Stiles vamos a casa- le pidió con calma.
- si-
- no, espera- hablo Lydia preocupada de un posible regaño.
- Chicos dejen que Stiles vaya a descansar- pidió Melisa.

La manada se sentía culpable y solo veían a la chica irse junto con su padre.

Ambos Stilinski se quedaron en silencio en el auto, el camino fue igual, hasta que llegaron a la casa.

Noah miro a su hija, Stiles solo lo miro mal.

- no te rías- dijo molesta.
- lo siento princesa, pero- respiro hondo tratando de no reírse fuerte- no son hombres lobo y eso, no tendrían que haberse dado cuenta hace mucho-
- son idiotas- hablo bajando molesta.

Stiles entro a la casa, para ir directo a su cuarto, dando un portazo y tirándose boca a abajo en la cama, pegando el grito más agudo de su vida.

Noah solo suspiro, preparo una taza de té de durazno, mientras el agua calentaba abrió un paquete de galletas de chocolate, las coloco en un plato.
Una vez lista el agua preparo el té en la taza favorita de la menor, para luego subir el plato y la taza de patitas.

Empujo la puerta encontrando a su pequeña en una crisis existencial, dejo todo en la mesita de noche, y empezó a acariciar la cabeza de la menor.

- te traje té y galletas- hablo con calma.
- ¿de que es el té?- cuestiono mirando de reojo a su padre.
- de durazno- explico con una sonrisa.
- ¿y las galletas?-
- chocolate- Noah sonrisa al ver a su hija sentarse.

Stiles se acomodo para poder comer, coloco su cabeza sobre el hombro de su padre mientras comía con pereza las galletas, sosteniendo con ambas manos la taza.

- ¿quieres hablar?- cuestiono calmado el adulto.
- no- negó.
- esta bien- hablo con calma el Sheriff, sabía que su hija terminaría hablando de su frustración.
- es que- ahí esta- no puedo creer que la manada sea tan ciega, o sea ni huelen bien o que- se quejó- no notaron el olor a sangre que sale de mi todo los meses-
- Stiles- se quejó el Sheriff.
- pero es verdad.

Ambos quedaron en silencio, empezando a reír luego de un rato.

El sheriff se levanto de la cama e informó a la menor, que él cocinaria hoy y qué descanse un poco.
Siendo la menor que le hizo caso, necesitaba un descanso.

Espero que les guste esta nueva historia, los amo 🐰 💐 💙.

El brujito de bulunbu es una canción de mi infancia.

Un pequeño secretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora