22 de Julio, 2023 "Llanto"

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Todo parece estar lo suficientemente bien en mi vida para no perturbarme, y sin embargo sigo sintiéndome mal. Ya no como antes; ahora no me lo puedo permitir.

Me he visto en situaciones difíciles y las he sobrellevado todas yo sola, sin ayuda. Me he comprobado a mí misma que soy capaz, inteligente y muy perspicaz, que puedo hacer excelentemente bien mi trabajo, que soy muy rápida y eficiente cuando me lo solicitan, simpática y agradable si me lo propongo, sociable, y sobre todo muy persistente. Pero todas estas cualidades se siguen opacando frente al miedo, porque en el fondo siempre estoy triste, devastada, cansada.

Hoy tuve de nuevo esas ideas, tenía tantas ganas de llorar y de rendirme, pero si lo hacía me iban a llamar cobarde o irresponsable, entonces la tristeza pasó a ser rabia, y pensé en quemarme los brazos con un cigarrillo encendido, como solía hacerlo. La idea de la braza tocando mi piel, el ardor intento que se sentía y las marcas que duraban días, me hicieron considerarlo, me dieron alivio. El dolor físico para apaciguar el emocional.

No lo hice, pero el deseo de hacerlo aún está ahí, y tal vez si cada noche me lastimara, hasta hacerme llorar, hasta hacerme gritar; tal vez así durante el día nadie vería una cara larga en mi rostro o una chica cansada y jodida. Como sea, esa cosa volvió a ganar consciencia, y aunque intente mantenerla encerrada nunca puedo hacerlo por mucho tiempo.

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