De "Y si" y máquinas del tiempo [BKDK]

Capitulo 8

Llego el día del examen práctico.

Hace frío.

Ese es el primer pensamiento que vino a la mente de Katsuki mientras caminaba sin rumbo fijo por un pasillo oscuro y aparentemente interminable, con la piel de gallina bajo el aire gélido y el aliento saliendo en bocanadas cortas.

Tenía la vaga sensación de que había estado caminando durante mucho tiempo, pero honestamente no podía decir cuánto. El pasillo estaba plagado de innumerables puertas a ambos lados, pero no sintió la necesidad de bajar por ninguna de ellas, sino que continuó caminando por el mismo camino que se extendía sin un final claro a la vista.

Mientras caminaba, pensó que el paisaje podría haber compartido cierto parecido con el almacén del que rescató a Mischa, excepto que no recordaba que ese lugar tuviera pasillos tan largos como este, y seguramente ni siquiera la mitad de estas puertas.

Cuanto más caminaba, más sentía Katsuki que una sensación inquietante se asentaba y crecía en su pecho, la piel se erizaba con la sensación de que no estaba completamente solo en la habitación. Trató de instar a sus piernas a caminar más rápido, pero sus pies se sentían pesados ​​y lentos como si los estuviera arrastrando a través de un charco de alquitrán, su corazón era como un fragmento de hielo en su pecho cuando sintió algo cerca detrás de él como una niebla oscura que se asentaba siniestramente sobre sus hombros, 'No mires atrás', sus pensamientos le gritaban como estridentes sirenas de alarma resonando en su cerebro .

Katsuki continuó caminando, la oscuridad aferrándose a cada paso como una sombra, cuando vio algo más adelante. Estaba demasiado lejos para poder distinguir algo más que un contorno tenue, pero a medida que se acercaba, la forma borrosa comenzó a asentarse en algo parecido a la silueta de una persona.

Katsuki abrió la boca con la intención de llamarlos, solo para que su voz se quedara atrapada en su garganta ante la vista familiar que lo recibió.

Deku.

Katsuki sintió que el hielo corría por sus venas, dejándolo inmóvil. Por un momento se quedó tan quieto que se sintió como si incluso el tiempo hubiera dejado de moverse, y por lo que sabía, eso había sido exactamente lo que acababa de suceder.

La figura frente a él podría haberse parecido a Izuku desde la distancia, esa mata de rizos verdes y enmarañados y el mono verde bosque sin duda se sumaron a la ilusión, eso fue hasta que Katsuki vio su rostro.

O más bien, el espacio en blanco donde debería haber estado su rostro.

Estaba parado unos metros más adelante, su apariencia distorsionada, de alguna manera, como si estuviera allí y no al mismo tiempo. A pesar de que aparentemente no tenía ojos con los que mirar, Katsuki todavía tenía la clara sensación de que no lo estaba mirando a él, sino a algo más allá del hombro de Katsuki.