yellow - winrina

nueve.

"Yooji!" Winter dijo felizmente en cuanto Karina entró en la cocina. Ella jaló a la chica de ojos marrones y levantó un plátano. "Te echamos de menos."

Karina miró a sus compañeras, que estaban viendo toda la interacción desde el sofá. Ella levantó una ceja hacia ellas, y todas se dieron la vuelta, sabiendo que habían sido atrapadas.

"¿Me necesitas para pelar eso?" preguntó Karina, mirando el plátano que Winter estaba sosteniendo.

"No," Negó Winter con la cabeza. Ella se quedó mirando el plátano por unos momentos antes de llevarlo a la boca y tratando de morderlo. Rápidamente sacó el plátano de su boca y lo miró con disgusto. "Lo rompí"

Karina se río y negó con la cabeza.

"No lo rompiste," tomó el plátano de las manos de Winter, lo pelo hasta la mitad, y se lo devolvió. "Sólo hay que pelarlo primero."

"Mi salvadora," Winter cantaba alegremente, mirando hacia el plátano y luego a Karina. "¿Quieres?" inclinó la cabeza hacia un lado y puso la fruta enfrente de la cara de Karina.

Karina encogió los hombros y se inclinó a darle un mordisco. Winter se rio emocionada.

"Gracias," Karina se rio por la emoción de Winter.

"Gracias", repitió Winter. Ella asintió con la cabeza y le dio un mordisco a la banana, balanceándose en señal de aprobación.

"No, se supone que debes decir 'de nada'," señaló Karina en explicación a Winter. "Si alguien te da las gracias, tú dices 'de nada'."

"De nada, gracias," Winter asintió feliz y se dio la vuelta, caminando hacia el mostrador y se sentó en uno de los bancos.

Karina se rió ante el intento de Winter, apoyada en el mostrador y mirando hacia la sala de estar. Sus compañeras desviaron la mirada rápidamente, pero Karina sabía que todavía la estaban observando.

"Tienes una risa bonita", Winter apuntó. Ella se inclinó sobre el mostrador y colocó sus dedos sobre los labios de Karina, como si pudiera oír su risa con un toque. "Me gusta cuando te ríes," Winter reafirmó con un movimiento de cabeza.

Las mejillas de Karina se pusieron rojas y sabía que las otras chicas estaban sorprendidas por la facilidad con que ella y Winter se estaban llevando bien.

"Supongo que debería hacerlo más a
seguido, entonces," y se encogió de hombros, sonriendo al ver que Giselle le decía sin sonido un 'oh, dios mío' a Ningning por el rabillo del ojo.

"Sí, de nada", Winter sonrió con la boca llena de plátano. Karina se rio, lo que causó que Winter sonriera más ampliamente.

"¿Que hay para cenar?" Giselle entró en la cocina, fingiendo como si no hubiera visto todo el suceso entre Karina y Winter. La chica pelinegra se encogió de hombros y empezó a poner la comida que había llevado sobre la mesa.

"Esta es la cena," Winter anunció, sosteniendo una caja de macarrones con queso para que Giselle la viera.

"Buena elección, Bunny", Giselle río, extendiendo el puño a Winter. La chica más pequeña la miró confusa. "Se supone que debes chocar tu puño, algo así," Giselle río, y levanto su puño a Karina, que le devolvió el gesto.

"Oh," Winter asintió, chocando sus dos puños juntos. Karina y Giselle se rieron, y Giselle negó con la cabeza.

"No, choca mi puño", Giselle explicó, sosteniendo su puño frente a Winter.

Winter asintió y extendió su puño para chocar el de Giselle. Una vez que lo hizo, Giselle empujo su puño hacia atrás e hizo un ruido con la explosión de su boca. Winter se rio con entusiasmo y luego hizo lo mismo.