Capítulo 13

16 5 31
                                    

Y si, ya era mi cumple, ya era 30 de septiembre y ya cumplía 15 años. Todos me habían felicitado, todos menos Magnolia. Era extraño, ella siempre me felicitaba a las 00:00 y hoy ni siquiera me había dicho un simple felicidades. Eso me enfadaba bastante, la verdad, pero seguramente era porque me estaba preparando una fiesta sorpresa seguramente eran lo más coherente, ya que, ella siempre se acordaba la primera de mi cumpleaños incluso me felicitaba antes que mis padres y me felicitaba mil veces y siempre me hacía un regalo, pero eso es lo de menos. Pasaban las horas y nada, estaba allí mirando mensajes para ver si alguno era de Magnolia, pero nada, cada vez que mi móvil sonaba lo miraba rápidamente para ver si era ella, pero adivina, ninguno era de ella. Una hora después cogió el móvil para ver las redes y veo que me ha llegado un mensaje entre y era Magnoia.

Chat con Magnolia.

M:Hola Ava! Ven a mi casa que tengo algo que contarte.

Yo: Valee, enseguida voy.

Final del Chat con Magnolia.

Seguro que era hora de mi fiesta sorpresa, me haré la sorprendida para no desilusionarlos. Un par de minutos más tarde llame al timbre y me abrió Amelie, supongo que ella ir a la encargada de abrir la puerta.

-Vamos querida, sube con Magnolia -Me dijo ella.

-Sí claro.

¿La fiesta en su dormitorio? Qué raro.

Felicitar extraño, ya que lo hizo esa misma mañana antes del instituto. Subí y fui a la habitación de Magnolia. Cuando toque la puerta ella abrió enseguida.

-Te tengo un cotilleo, hemos avanzado en lo de mi crush -me dijo intensamente y sonreí.

¿Y la comida? ¿Y la tarta? ¿Y la gente? no podía creer que no se acordara.

-Oye, me parece muy bien, pero... ¿Sabes qué día es hoy verdad? -Dije interrumpiéndola.

-¿Viernes...?

-¿De verdad que se te ha olvidado?

-¿De qué me hablas Ava?

-¡Es mi cumpleaños, joder!

-¿Cómo? ¿Ya es 30 de septiembre? ¡Felicidades!

-Ya claro, ahora.

-Oye, lo siento mucho, tengo mucho que estudiar, estoy muy liada y he perdido la cuenta de los días. Perdóname, por favor.

-Bueno, no pasa nada, te perdono.

-Gracias.

-A ti.

Y no abrazamos.

***

Ya había pasado un mes desde mi cumpleaños. Magnolia y yo habíamos tenido algunas peleas, pero nada grave que no se solucionara. Últimamente estamos teniendo bastantes peleas por mi culpa y me da miedo perderla, mucho miedo, ya me daba miento antes pero con todas las peleas ahora más que nunca, la verdad.

Me da tanto miedo perderla porque hoy en día es muy difícil encontrar a una amistad de verdad, una que te valore, que te apoye en todo, que esté contigo tanto en lo bueno como en lo malo, que te dé consejos, que te ayude en todo, con quien te lo pases bien, con quien sigas adelante, con quien nunca te haya fallado... una persona con la que te sientas bien pudiendo ser tú misma y si necesidad de esconderlo todo, a quien le cuentas todo, que te hace sentir bien, que hace que te sientas bien contigo misma, con quien sientas que es la amistad indicada, que sientas que es tu alma gemela y tu media naranja pero en forma de amistad, que sepas que esa persona es el verdadero amor incondicional de amistades, con quien sepas que quieres verle feliz incluso si no es contigo pero que no te quieres separarte nunca de ella porque eso te destrozaría el alma y estarías muy mal y llorarías todas las noches por haber perdido a esa persona tan importante en tu vida, pero que tampoco quieres obligarle a que esté contigo ni que sea tu amiga. Lo único que quieres es verle feliz como, cuando y con quien sea.

Magnolia me hace sentir todo eso y por eso no quiero perderla, pero se, que estará mejor sin mi. Algún día la tendré que soltar para que sea feliz con otra persona, yo siempre causo peleas y no sé ni como, pero Magnolia me hace darme cuenta de que de todas las peleas que hemos tenido, siempre es mi culpa y tiene razón, mucha razón.

Pero bueno, de momento no pensemos en eso, las dos estamos muy felices por estar juntas y nos lo pasamos muy bien.

Ese día Magnolia y yo quedamos para ver películas. Vimos muchas como "Barbie" "La sirenita" o "Culpa mía". Después de que este sábado hubiéramos estado más de cinco horas viendo películas, nos pusimos a cenar. Magnolia estaba en mi casa y se quedaba a dormir. Después de cenar subimos para arriba.

-Ava ¿Quieres que hagamos una pelea de almohadas como cuando éramos pequeñas? -Hice una mueca de no estar muy convencida- Vamos, será divertido.

-Bueno vale, pero no hagas mucho ruido que si no mi madre nos regaña eeh.

-Perfecto, ¡empezamos ya! -Me dijo dándome con su almohada.

-Oye, eso es trampa, yo no estaba preparada -Dije mientras seguía dándome con la almohada- ¡Para ya!

Intenté darle a Magnolia un par de veces pero siempre fallaba.

-Demasiado lenta -Me dijo burlándose mientras se reía.

Después de la pelea de almohadas, teníamos hambre, así que, bajamos a la cocina para coger algo de chocolate. Justo cuando íbamos a subir, Magnolia tiró sin querer el libro de tapa dura de mi madre.

-Magnolia, que nos van a pillar.

-Que no... -No pudo terminar la frase, alguien la interrumpió.

-¿Hola, quien anda ahí? -Magnolia y yo nos asustamos y cuando vimos que era mi madre escondimos los chocolates-. ¿Hay alguien?

Justo nos apuntó con la linterna de su móvil.

-Chicas ¿Que hacéis aquí a estas horas? Deberíais de estar dormidas.

-Mamá, es que... -Dije mientras intentaba decir alguna excusa.

-Lo siento, todo ha sido culpa mía, tenía sed y hemos bajado a por agua, pero al pasar, sin querer he tirado su libro.

-Oh, vale, no os preocupéis.

-Lo siento mamá, buenas noches.

-Buenas noches ¡Y no os comáis el chocolate esta noche que ya es tarde! -¿Cómo lo sabía? Poderes de madre, supongo.

Magnolia y yo nos reímos y nos subimos a mi habitación. Al final le hicimos caso a mi madre y no comimos nada. Después de hablar un rato, nos pusimos a dormir.

-Buenas noches Magnolia.

-Buenas noches Ava.

No tardé mucho en dormir, ya que, estaba bastante cansada y tuve un sueño muy profundo y relajante durante toda la noche.

Nada es para siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora