Sí, ya era verano. Magnolia y yo nos habíamos despertado a las 6 de la mañana para irnos de viaje juntas. Todos los años, su familia y la mía nos íbamos de viaje juntas. Ésta vez íbamos a Los Ángeles, un viaje seguramente increíble, tanto Magnolia como yo deseábamos ir desde pequeñas y por fin había llegado el día.
Me faltaban unas cosas que meter en la maleta, pero por lo demás ya estaba lista, así que, las metí y nos fuimos.
Ya estábamos en el aeropuerto.
-Que ilusión tía, aún no me creo que vayamos a ir a Los Ángeles, es un sueño -Me dijo Magnolia muy ilusionada.
-¡Sí! Que nervios.
Nos fuimos a desayunar por el aeropuerto.
-Mama, para ya ¿Enserio nos vas a hacer fotos mientras estamos desayunando?
-Es para recuerdo -Me decía mi madre.
Amelie y mi madre estaban haciendo demasiadas fotos, ellas también estaban nerviosas, pero a su manera.
Después de estar esperando unas horas al avión, por fin entramos y estábamos a punto de despegar.
-¿Lista para el mejor viaje de nuestras vidas? -Me preguntó Magnolia.
-Ya sabes que sí.
-Eres consciente de que en unas pocas horas vamos a estar en Los Ángeles ¡Llevamos queriendo ir desde niñas!
-Sí, por fin, estoy deseando llegar.
-Yo también Ava.
Después de 6 horas por fin habíamos llegado a nuestro destino.
-Magnolia, despierta ¡Ya estamos aquí! -Le había dicho yo haciendo que se despertara.
-¿Qué, ya hemos llegado? Espera... ¡Ya hemos llegado!
-Te ha costado pillarlo -Dije riendo.
Empezamos las dos a gritar como locas, cosa que hizo que todo el mundo nos mirara, pero no importa, al menos nos lo pasamos bien y nos divertimos juntas.
Una vez llegamos fuimos al hotel, habíamos pagado tres habitaciones, una para Magnolia y para mí, otra para mi hermana y la hermana y el hermano de Magnolia y otra para los padres.
Una vez organizamos las cosas, fuimos a ver Los Ángeles. Era una ciudad preciosa y muy grande, me encantó.
-Mama, tengo hambre ¿Vamos a comer ya? -Dijo Magnolia protestando.
-Sí, ya vamos para el restaurante, ten paciencia -Le contestó Amelie poniendo los ojos en blanco, ya que, era la cuarta vez que Magnolia lo decía.
-Eso Magnolia, ten paciencia -Le dije yo remarcando el té paciencia. Justo después me dio un manotazo y me reí.
Por fin llegamos al restaurante. Era muy grande. Ya habíamos pedido, yo pedí algo de pasta y Magnolia una hamburguesa.
-Por fin hemos comido, tenía mucha hambre -Dijo Magnolia.
-Lo has dejado claro en todo el camino -Dije yo divertida.
Ya era tarde, habíamos cenado y todo, habíamos andado mucho y ya volvíamos al hotel.
Cada uno se fue a su habitación. Magnolia y yo fuimos a la nuestra y después de prepararnos nos pusimos a ver "Outer banks" por quinta vez, nos encanta esa serie, es una de nuestras favoritas. Luego de ver un capítulos vimos el móvil, nos contamos algunos cotilleos de los que nos enteramos ese día y después nos fuimos a dormir.
Pasamos una buena semana en Los Ángeles, vimos toda la ciudad, fuimos a museos ¡incluso fuimos a conocer a Charli D'amelio! Aún no me creía eso, ¿Conocer a una de las chicas que más seguidores tiene en tiktok, hacernos fotos y bailar con ella? Eso fue increíble. Me encantó todo y nos lo pasamos muy bien pero ya, tocaba volver, así que, ya estábamos en el aeropuerto.
-Mama, no me quiero ir, nos lo estábamos pasando muy bien aquí ¿verdad Ava? -Dijo Magnolia medio protestando.
-Sí -Dije yo algo distraída.
De pronto Magnolia se giró y me miró.
-Uyy Ava, que distraída estás con el móvil ¿Con quien hablas? ¿Con tu novio? -Quiso saber Magnolia distraída.
-Sí Magnolia sí, es John, quiere saber si me lo he pasado bien y si ya estoy en el aeropuerto.
Magnolia y yo seguimos hablando un buen rato, al mismo tiempo que ella veía mi conversación con John y me decía que escribir, aún que el noventa por ciento de las veces no le hacía caso y me regañaba divertida.
Después de un par de horas ya estábamos en el avión de camino a casa. Una vez llegamos nos despedimos las dos familias y cada una se fue a su casa para deshacer las maletas.
Cuando ya tenía todo en su sitio llamé a John.
-Hola John ¿Qué tal? Ya he llegado a mi casa.
-Hola guapa, pues mi bien ¿Ya has llegado? ¡Perfecto voy a tu casa enseguida, en 10 minutos estoy allí! -Me dijo algo alterado.
No me dejó ni que le contestara, colgó inmediatamente.
Y tenía razón, en 10 minutos ya estaba esperando en la puerta de mi casa a que yo bajara.
-Hola -Le dije con una sonrisa.
Y él me la devolvió.
-¿Y esas prisas de antes? No me has dejado ni colgar -Le dije.
-Solo quiero que pasemos más tiempo juntos.
-Estoy de acuerdo, ¿Sabías que te queda muy bien esa sudadera?
Era una sudadera suya, azul que ponía "New York" en letras blancas.
-Ay sí cierto, es tuya, iba a devolvértela -Dije haciendo una ademán de quitármela para quedarme con el top de debajo.
-No, te la puedes quedar, te la regalo -Me dijo él.
Yo sonreí.
-Hablando de regalos, mira lo que te he traído de Los Ángeles -Le dije dándole una bolsa.
De la bolsa sacó dos sudaderas, a conjunto. Eran rojas y ponía "Los Ángeles", le gustaba mucho ese tipo de sudaderas.
-Muchas gracias, no tenías porque traerme nada, con que me des tu amor me basta.
-Sí hacía falta, eres de lo mejor que me ha pasado y me haces muchos regalos, te tendría que dar muchos más, eres un buen novio.
Salimos a pasear un poco.
-Se hace tarde, será mejor que vaya a mi casa, si no mi madre me regañará -Dije.
-Vale, sin ningún problema, te acompaño.
-Oh no, no hace falta, puedo ir yo sola, tú ve para tu casa.
-No, si hace falta, si te pasará algo no me lo perdonaría.
Al final me acompañó y después se fue a su casa.
Cerré la puerta y sonreí sentandome en el sofá, realmente estaba tan enamorada.
-Hola cielo, vamos a cenar ¿Quieres que pida unas pizzas? -Me dijo mi madre.
-Sí ¿Porqué no? ¿Hoy habrá noche de pelis?
-Claro ¿Cuál te apetece ver?
-Podemos ver "Enola Holmes" por favor, a mi me encanta y se que a vosotros en el fondo también.
-Pero si la hemos visto un montón de veces.
-Pues "Enola Holmes 2" por favor.
-Bueno está bien, veremos la primera que hace más que no la vemos, voy a avisar a papá y a tu hermana.
Después de un buen rato llegó la pizza y nos pusimos todos a cenar. Luego hicimos palomitas y empezamos a ver "Enola Holmes"
Cuando terminó la pelicula me fui a mi cuarto, me preparé para dormir y hablé con los lafes sobre como nos lo habíamos pasado Magnolia y yo en Los Ángeles y sobre cotilleos y cosas que habían pasado durante la semana en la que no estábamos Magnolia y yo. Estaba bastante cansada así que cuando me sentí cansada me despedí y me fui a dormir, pensando en lo bien que me lo había pasado en Los Ángeles.
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Nada es para siempre
Novela JuvenilAva. Una adolescente normal, con una mejor amiga normal. Las dos son inseparables pero... ¿En qué momento han crecido tanto? ¿En qué momento Ava no conoce tan bien a Magnolia como pensaba? Y sobre todo, ¿Qué importaría si tuvieran unas pocas peleas?