Una rebanada de pastel

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Tommy Shelby x Fem!Lector
Resumen: Tommy está muy estresado en su estudio, vas a verlo y estas emocionada de mostrarle lo que hiciste, el no puede evitar enamorarse mas de ti.

Autor: wouldpollyapprove en Tumblr.

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El sonido de los papeles moviéndose era todo lo que se podía escuchar en la gran oficina mientras Tommy hurgaba entre los montones de papeles en su escritorio

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El sonido de los papeles moviéndose era todo lo que se podía escuchar en la gran oficina mientras Tommy hurgaba entre los montones de papeles en su escritorio. Estaba buscando una factura que había visto antes, sin pensar en ella cuando la había descartado, pero en ese momento ese documento era vital para su trabajo actual. El mismo trabajo que había estado haciendo desde el día anterior cuando llegó a casa después de que el sol se había puesto y su esposa ya se había ido a la cama. Tommy sabía que necesitaba un descanso, había renunciado a dormir en un intento de terminar todo su papeleo, ya que se estaba quedando sin humo. Pero era viernes y quería que todo su trabajo estuviera completo para poder pasar el sábado con su esposa en la carrera, sin pensar en negocios.

Entonces, continuó su búsqueda, deseando haber mantenido todo organizado mientras lo hacía. El cigarrillo que había hecho su hogar entre sus labios antes fue descartado en un cenicero mientras trataba de deshacerse de todas y cada una de las distracciones. Solo necesitaba encontrar ese papel.

Con sus pensamientos hundidos hasta las rodillas, el hombre estaba demasiado ido para escuchar el golpe en la puerta o notar que la puerta se abrió y una figura se deslizó. No levantó la vista de su tarea hasta que las palabras suaves golpearon su oído.

"¿Tommy? ¿Estás bien?" T/N preguntó al verlo prácticamente destrozando su escritorio. Sabía que él estaría absorto en el trabajo cuando ella entrara, pero nunca esperó que estuviera tan frenético por lo que fuera que estaba buscando.

El hombre respiró hondo, enderezándose. "Estoy bien, amor, solo... solo busco un puto papel." Suspiró, escaneando el escritorio por última vez antes de que sus ojos se desviaran hacia su esposa y su dulce sonrisa, que siempre lo hacía derretirse. 

"Oh", ella asintió, sin atreverse a preguntar para qué era el papel. Cuando se casaron, Tommy le prometió que había terminado con los negocios ilegales, pero ella sabía que tomaría tiempo para que eso realmente sucediera. Entonces, hasta que llegó ese día, ambos decidieron que ella no tenía que preocuparse por nada relacionado con el negocio. Estar casada con una Shelby ya era bastante preocupante. "Bueno, entonces te dejo..."

"No, no tienes que irte", se apresuró, haciéndole un gesto para que se quedara. "Necesito un descanso de todos modos. Entonces, ¿por qué entraste?" preguntó, relajando los músculos ante la idea de un descanso muy necesario.

T/N frunció los labios pensando. Ella había entrado para mostrarle algo, pero parecía infantil bajo su mirada. "Bueno, estaba haciendo algo esta mañana", dijo arrastrando las palabras, esperando que él mostrara interés. Su esposo siempre estaba interesado en lo que fuera que ella estaba haciendo, pero a veces no podía evitar sentirse molesta para él porque nada de lo que hiciera equivaldría a su trabajo.

Tommy levantó una ceja mientras alcanzaba su cigarrillo. "¿Y qué fue eso, amor?"

"Podría haber horneado un pastel".

"¿Podrías?"

Su esposa asintió, una sonrisa tiró de sus labios ante su tono divertido. 

Apartándose de su escritorio, caminó hacia ella. "¿Significa esto que quieres que pruebe un poco?" preguntó, ya sabiendo la respuesta cuando se paró frente a ella.

Una brillante sonrisa consumió su rostro mientras asentía, "¡Sí, por favor!"

"Muy bien, muéstrenos el camino, señora Shelby", Tommy reflejó su expresión mientras tomaba su mano entre las suyas y permitía que lo llevara hacia la cocina. Al entrar en la cocina, los ojos del hombre se abrieron ante el pastel de chocolate que estaba en la isla central. De niño siempre colaba postres, nunca tuvo mucho éxito ya que su madre casi siempre lo atrapaba, ya que tenía una horrible golosidad. Había perdido ese gusto por lo dulce después de su muerte, solo para que su esposa lo ayudara a encontrarlo. “Parece celestial”.

T/N sonrió mientras iba a buscar platos. "Tiene fresas en el medio", reflexionó, sabiendo cuánto le gustaba la fruta. Dejó los platos, agarró un cuchillo y cortó el espeso glaseado. "¿Solo una pequeña porción?"

"¿Solo una pequeña porción, ey? Dame eso", se quejó cuando ella le entregó el cuchillo. Bajo su mirada curiosa, cortó dos rebanadas grandes y las colocó en los dos platos. "Ahí tienes."

"¡Tommy! ¿Te vas a comer todo eso?" preguntó, mirando entre la rebanada de pastel y su esposo. 

El hombre se quedó boquiabierto, ofendido de que ella incluso preguntara. "Sí, lo soy", firmó. "Planeo comer hasta el último bocado, porqué mi esposa hizo ese pastel y sé que va a ser delicioso".

T/N puso los ojos en blanco juguetonamente, una risa suave escapó de sus labios, contenta de haberlo hecho tomar un descanso. "Si insistes".

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Imagina - Thomas ShelbyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora