Imagina - Thomas Shelby

Mas que palabras

Tommy Shelby x Fem!Lector
Resumen: Tommy no pudo llevarte al orgasmo. Intensifica en problema pensando demasiado hasta que le dices que hay otras maneras de mostrarte amor.
Advertencia: Obscenidad leve. 

Autor: look-at-the-soul en Tumblr.

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Cuando estabas terminando el último retoque de tu maquillaje, Tommy cerró la puerta del dormitorio y silenciosamente se dirigió hacia ti.

"¿No deberías estar abajo con tu familia?" Sus labios encontraron el camino hacia tu cuello mientras una de sus manos se movía hacia la parte delantera de tu vestido, sobre tu pecho. Presionando su cuerpo contra el tuyo, ya estaba tan duro.

"Necesitaba follarte primero".

Inclinándote sobre tu tocador te pidió que levantaras tu vestido mientras escuchabas su cremallera bajando, mirando su reflejo en el espejo encontraste muchas cosas en sus ojos; lujuria, pasión, deseo, tenía hambre. Sus manos bajaron tu ropa interior con un movimiento fluido y no más después de eso, comenzó a empujar desde atrás.

El tocador se estrelló contra la pared y tu pintalabios rodó por el suelo y lo único que se podía escuchar eran los duros jadeos de Tommy mientras ponía su mano en tus caderas para mantenerte quieta mientras te golpeaba por detrás. Su pecho pegado a tu espalda empujando con fuerza contra ti.

"Voy a llenarte tanto...", gimió en tu oído, "que estarás goteando mi semilla durante días".

"Tommy…"

"Sí... estoy... joder". Sacudió sus caderas casi completamente fuera de ti y con una fuerza primaria, se estrelló contra ti. "¿Puedes sentir eso?" Estaba perdido en el placer. Usar tu cuerpo para satisfacer su necesidad.

Colocando su mano en tu bajo abdomen, podía sentir que se movía dentro de ti, golpeándote fuerte una y otra vez, su ritmo acelerado no te daba tregua.

"Ah". Gemiste en respuesta.

Su mano estaba nuevamente en tu cadera, hundiendo sus dedos en tu piel, sobre tu vestido mientras su miembro se movía dentro y fuera de ti. Enderezando su espalda, pudo ver sus movimientos reflejados en el espejo, sus rizos rebotando al ritmo de sus embestidas.

"¡Justo ahí! me voy a correr". Anunció y en dos embestidas profundas más su cuerpo se detuvo y sentiste su semen fluyendo dentro de ti. "Mierda."

Su cálido aliento en tu oído con su elaborada respiración y luego… nada.

Alejándose de su cuerpo, pronto se dio cuenta de algo importante. "No lo alcanzaste". No estaba seguro de si eso era una pregunta o una afirmación.

Estabas tan confundido como él, él tenía un gran deseo sexual y tú coincidías con el suyo. Pero no esta vez.