一個甜蜜的家 (Un Dulce Hogar) [BL] [Danmei] [FINALIZADA]

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Como siempre, la aldea tenía sonidos repetitivos y parecía una obra de teatro de mal gusto para Han Yi, él odiaba la hipocresía de las personas, las sonrisas, las miradas, los sonidos y, sobre todo, a quienes se autoproclamaban como los regentes de lo correcto.

— ¿Yi? — La voz de su padre hizo que dejara sus pensamientos pesados de lado — Pareces distraído

— Estoy bien, en serio — Escuchar la voz de su padre lo hizo sentir tranquilo y cómodo, pero poco le duro esta dicha ya que la voz de su abuelo arruinó su estado de ánimo —.

— Déjalo en paz hijo, Yi debe estar pensando en cómo ser mejor cada día, ese es su único trabajo ¿No es así Yi? — Su abuelo se le acerca y le apunta con el dedo índice a su cara — Recuerda que no debes equivocarte, jamás debes darnos vergüenza como... — Han Ruan hace una pausa, parecía que se había confundido, pero no le toma importancia y prosigue hablando como si nada — Solo no olvides que debes hacerme caso ¿Entendiste? — Respira hondo y se da la vuelta —.

— Claro que si abuelo...

— ¡Muy bien! ¡Por eso eres digno de nuestra familia Yi! — Para la mayoría de la aldea, Han Yi era considerado el nieto prodigio, el más calmado, el más sensato y él que siempre hacia las cosas correctas, era el nieto que nunca desobedecía —.

— No debo irritarme.... — Para Han Yi, las palabras de su abuelo siempre le habían parecido lo peor del mundo, sin embargo, aceptaba lo que decía siempre con una sonrisa amable, después de todo, Han Yi estaba usando a su abuelo de cierta manera, solo era cuestión de pocos años más para que al fin su abuelo dejara de ser un estorbo para él — Unos años más y mi abuelo dejará de existir... — Al seguir caminando por el pueblo, Han Yi no pudo evitar recordar el día en que conoció a Rak Nerian, el recuerdo hizo que sonriera y deseaba que estuviera a su lado, realmente deseaba que las cosas fueran más sencillas para los pueblos —.

— ¡Que causalidad! ¡No puedo creer que nos encontremos aquí! ¡Es un gusto verlos de nuevo! ¡Señor Han Ruan se ve muy guapo hoy!

— ¿Me veo guapo hoy? No señorita, yo siempre me veo muy guapo ¡Jo, jo,jo! — La alegría de Han Yi desaparece de nuevo al escuchar esa voz irritable de aquella mujer, pero se queda callado ante la situación —.

—¿En serio piensa que creemos que es algo casual que este aquí hoy? — La mujer voltea a ver a Han Yi y le levanta una ceja — No sé qué piensa esa mujer, pero espero que no tenga éxito

— Señorita... Wun Ma ¿Cierto? — Han Bei era igual de amable que su hijo, pero al contrario de Han Yi, él no tenía tanta ira oculta la cual podría explotar en cualquier momento —.

— ¡Así es! — Se acerca de manera cautelosa a Han Bei y le pone una mano a su pecho — La otra noche vine a verte, pero... — La mirada de la mujer se dirige a Han Yi — No estabas, me quede platicando con tu hijo — La mirada de Han Yi era serena, pero dentro de él, había irritación, molestia y aunque quisiera decir mil cosas, debía ser amable por obligación —.

—¿Acaso me acusará de ser un mal hijo? Ya debería saber que ya nadie puede hacerme quedar mal ante mi familia — Desde que era pequeño, su abuelo lo obligó a ser muy tranquilo, le enseñó a demostrarle a las personas del pueblo que era un niño impecable, solo con la intención de crear una imagen de perfección —.

— Recuerda Han Yi, tu deber, así como el de tu padre y yo, es demostrar que nuestra familia no tiene nada de qué avergonzarse, nunca se te ocurra hacer algo que pueda hacer que los demás se rían de nosotros — Siempre las palabras de su abuelo le llegaban a su cabeza para hacerlo sentir cansado y pesado todos los días, por esa razón, solo podía seguir sonriendo como si fuera un ser lleno de paz —.