37(Final)

222 25 0
                                    

La noche estaba apareciendo poco a poco y los sonidos de las aves iban decreciendo. Ante los nervios, Han Bei no sabía cómo enfrentar aquel hombre que una vez abandonó, todo porque prefirió casarse que enfrentar los problemas futuros. Se lamentaba varias veces por seguir las reglas de su padre. Todo ahora era muy tarde, el tiempo había pasado y debía enfrentarlo, así que, al fin, decidió abrir la puerta de la cabaña.

Al entrar, enseguida recordó a su hijo, pensó lo feliz que debió estar aquí y se sentía mejor al saber que Han Yu nunca fue obligado a hacer cosas horribles.

Sus pensamientos fueron interrumpidos al escuchar un rechinido proveniente del cuarto de la derecha. Se acercó despacio y abrió la puerta poco a poco. La poca luz que daba la vela dentro del cuarto hizo que enseguida reconociera a Rak Mei, solo que este mantenía su cabeza baja junto con su mirada. Sintió como sus nervios lo inundaron y titubeo al querer hablar, su respiración se agitó al tener cerca a aquella persona que adoraba demasiado.

Sonrió al sentir su presencia, pero poco le duro esa pequeña felicidad al ver como Rak Mei levantaba su cabeza y lo miraba agresivamente.

— Mei... — Rak Mei volteaba hacia la parte de atrás del cuarto mostrando su poco interés en Han Bei — Por favor no me ignores...

— No tengo nada que decirte Bei... — Han Bei se fue acercando y puso sus dos manos en los hombros de Rak Mei —.

— Dime que piensas Mei...

— ¿Qué pienso? — La mirada fría de Rak Mei hizo que sus manos apretaran su agarre — ¡Pienso que te odio! ¡Te odio Bei! ¡Te odio! ¡En serio te odio! — Empieza a golpear con sus palmas a los brazos de Han Bei —¡Eso es lo que pienso! ¿¡Estas feliz ahora!? — Han Bei se quedaba callado y aceptaba aquellos golpes, dentro de él, sabía que merecía eso y más —¡Ojalá nunca te hubiera visto de nuevo! ¡Por tu culpa debo verte aquí! ¿¡Cuanto más debes hacerme recordar lo que me hiciste!?

— ¡Se que me equivoqué Mei!

—¡No lo sabes! ¡No sabes nada! ¡No sabes cómo me duele verte! ¡Me duele recordarlo Bei! — Han Bei agarra sus muñecas para que deje de golpearlo y empieza a levantar más la voz —.

— ¡Entonces dime! ¡Dime que es lo que tanto te duele! — Rak Mei lo mira fijamente a los ojos y empieza a ser consciente del tacto de las manos de Han Bei sobre sus muñecas —.

— ¿¡Como pudiste tocar a otra persona que no fuera yo!? ¡Y no lo hiciste una sola vez, lo hiciste dos veces! ¡Tuviste dos hijos y tocaste a alguien más! ¡Me siento horrible! ¡Me siento asqueroso al recordarlo! ¡Me duele el corazón! ¡Me duele hasta respirar! ¿¡Como pudiste tocar a alguien más cuando decías que me amabas!? — Baja la cabeza y cierra sus ojos fuertemente—.

— ¿¡Qué dices!? ¿¡Acaso no fuiste tu quien tuvo hijos primero!? ¡Tu fuiste quien dijo que no le gustaban las mujeres y lo primero que hiciste fue tener un hijo! ¡No solo uno, sino dos!

— ¿¡Eres estúpido!? — Empezó a golpear de nuevo a Han Bei repetidamente — ¿¡Acaso no era obvio que ellos no son mis hijos!? ¡Sin embargo tu no dudaste en acostarte con tu esposa! ¡Yo no podría hacer eso!

— ¿¡Como que no son tus hijos!? — Fue tanta la sorpresa que soltó las muñecas de Rak Mei —.

— ¿¡Acaso eso importa ahora!?

—¡Mei! ¡Yo no sabía que no eran tus hijos!

— ¡Da igual Bei! ¡Déjame en paz! — Han Bei sentía los golpes de Rak Mei cada vez más fuertes, así que tuvo que agarrar de nuevo con cada mano, cada muñeca de Rak Mei —.

一個甜蜜的家 (Un Dulce Hogar) [BL] [Danmei] [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora