rutinas y afectos

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Disclaimer: referencias a violencia doméstica, y autolesiones.

Margaret respiraba con dificultad,  su boca aún degustaba la impregnada sangre que había brotado de donde antes se hayaban un par de dientes.

Sus ojos completamente morados e inflamados eran incapaces de abrirse.

Mientras sus huesos rotos le provocaban un dolor tan intenso que sobrepasaba a los calmantes inclusive.

El cabello rubio suelto sobre la almohada, era como un manojo de hilo de oro.

Liu acariciaba la maltratada mano de su madre, mientras su cabeza reposaba sobre una esquina de la camilla.

Jack le había llevado un par de vasos de café, antes de que su amigo le dijera que vaya a casa a descansar.

Y Jeff aun no llegaba.  No tenia idea de a donde podría haber ido su hermano.  Pero esperaba que no estuviera haciendo ninguna idiotez.

Sabía que llegaría en cualquier momento,  ebrio o lacerado y con una ira incontrolable.

La puerta de la habitación se abrió se golpe dejando ver a un castaño de cabeza gacha,  el mayor se levantó paulatinamente, encontrándose frente a una imagen que lo descolocó.

Los ojos y labios hinchados y rojos,  la nariz goteando, y también roja,  como la de el reno norberto. Le daban una apariencia tan frágil a alguien tan osco.

Pero lo que más le sorprendió,  fue ver a Jane con las manos sobre los hombros de su hermanito.

Una sonrisa escapo.  Quizás la ilusión de ver algo más entre ellos, que realmente no existía.

_ voy a esperar afuera ¿si? _ pregunto la muchacha.

Y en el rostro masculino se reflejo lo mucho que le costó alejarse.

_ hola_ comenzó el mayor.

_ ... hola..._ Las lágrimas comenzaron a brotar nuevamente,  y el chico corrió a los brazos de su hermano_ liu, no puedo con esto. No puedo más con esto. Mama, papá escapo y ... y ... todo esto , quiero morir_ más lágrimas inundaron las mejillas ya ardientes de tanta agua.

_ tranquilo,  no estas solo, y juntos podemos jeff_ dijo con cariño, y la mayor comprensión del mundo _ te amo hermanito, gracias por estar conmigo.

Los dolientes ojos celestes captaron aquella imagen, esa que remueve el corazón de toda madre, y entonces su corazón supo, que pese a todo lo que pudo haber hecho mal, no se equivoco en cultivar la hermandad se esos dos.

♧♧♧

_Jane, Jane ¿el esta bien?_ la agitada voz de Nina hacia difícil comprender a la chica lo que su amiga quería.

_ si, el esta con liu. Tranquila, es mejor dejarlos solos, yo voy a volver a mi casa, tengo un trabajode matemáticasqueterminar. _ respondió desde el otro lado de la línea.

_ debo ir ¿ en que habitación esta?_ pero no obtuvo respuesta más que el tono del teléfono.

Un fuerte pisoton directo a la alfombra por parte de la chica alertó a su asustadizo amigo, sabía que la frustración le había ganado a la pelimorada, y quizás eso le provoco una pequeña sonrisa.

_ ¿q-que-e te di-dijo Jane?_ pregunto Toby desde la mesa, donde la cena aún desprendía humo.

Realmente las tardes de estudio con Toby eran divertidas,  y amaba la comida que el preparaba, junto a su madre.

Pero su amado Jeff estaba sufriendo  y ella estaba allí, sin hacer nada.

_ N-ni_ llamo el castaño de tierna apariencia,  antes de ser interrumpido por un tic brusco en su cuello.

Parecía nervioso, lo cual habría extrañado a la chica, si no estuviera ocupada sufriendo por no poder ir a consolar a su Jeff.

_¿ que?_ pregunto desilusionada, volviendo a la mesa.

_ c-creo q-que Jeff, necesita estar s-solo.

_ nadie quiere estar solo Toby, y menos en un momento asi. Deberias saberlo, me llamaste para no estar solo, y ni que te hubiera pasado nada malo_ dijo ella recargando su mejilla, contra su palma, mientras revolvía el plato de pasta tibio.

Ambos estaban solos, la madre de Toby había salido junto con su hermana al cine y volverían en unas horas.

_ y-yo quería, decirte algo_ dijo intentando evitar los tics, pero sus dedos dolían y se movían solos.

_ ¿sabes que? Voy a ir, eso. Dire que soy novia de Jeff y que quiero ver a mi suegra_ dijo dando un salto de la mesa, para comenzar a ponerse su bufanda y abrigo.

_ E-es-spera Ni-i..._ dijo levantándose de la mesa para seguirla, pero entonces se oyó el rápido portazo.

Ella, se había ido.

Toby se dejó caer en la silla y sacó el papel que guardaba en su sudadera.  Al desdoblarlo, volvió a contemplar aquella carta que tanto lo apena a, repleta de dibujos que lo avergonzaba aún más, pero que en su opinión ella entendería.

Pero cuando la veía actuar así, realmente él era quien no entendía.

En ese momento un mensaje llegó a su pequeño celular.

"Aunque el niño se esfuerce por hacerse el hombre, ninguna mujer es feliz luego de una noche con él.  ¿O no pequeño Ben?"

Xoxo gossip x

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