Sweet Wife (Ziam)©

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Josh abrió los ojos soltando un bajo quejido, dio una mirada a la hora y suspiro, dos y media de la madrugada, se sentó con cuidado y llevo sus ojos hacia su lado, Niall dormía con su boca levemente abierta, babeando la almohada, y Shawn a su lado, dormía con su cabello desrodenado, su camiseta levantada y una de sus piernas cayendo fuera de la cama.

Negó con una leve sonrisa antes de hacer una mueca de dolor, se levantó con cuidado sin querer despertarlos, Shawn había tenido un día agotador en la universidad y Niall trabajaba desde casa pero siempre estaba de un lado a otro quejándose de cosas, si tenía un mal dormir, estaría amargado el día completo.

Bajo con cuidado las escaleras entrando a la cocina, el ardor en su cuello solo lo hacía sentir peor, saco la bolsa de hielo y la colocó sobre la fea cicatriz que reposaba en la unión de su cuello y hombro. Soltó un largo suspiro, a veces deseaba volver al pasado y evitar hacer aquella estupidez, se arrepentirá de sobre manera pero ya no había fiesta atras.

Él era un alfa defectuoso.

— ¿Te duele? — La voz de Horan desde la puerta de la cocina lo hizo elevar su mirada, hizo una mueca asintiendo despacio

— Si, pero vuelve a dormir — Pidió el alfa — Debes descansar

Niall ignoro su petición, se acercó con cuidado sentándose en las piernas del mayor, quito la bolsa de hielo y dejó un suave beso sobre la cicatriz antes de apoyarse en su hombro — Tranquilo, alfa, te cuido

Devine soltó un largo suspiro, rodeo la cintura del rubio con sus brazos, manteniéndolo cerca — Lo se, siempre lo haces

Niall y Josh se habían conocido desde que eran niños, eran los mejores amigos, iban juntos de arriba a abajo sin separarse, aunque, Horan siempre había notado un sentimiento distinto hacia el castaño, estaba enamorado, y eso le rompia el corazón, porque él era un beta, Josh era un alfa, jamás estarían destinados, jamás estarían juntos.

Y el día en que Josh se dejó marcar por un Omega, con solo quince años simplemente le demostró que Josh Devine nunca jamás sería suyo.

Hasta aquel horrible día.

« Niall frunció su ceño llevando sus ojos hacia la puerta, los golpees en esta lo asustaron un poco, eran golpees tan fuertes que pensaba que la madresa se quebraria, así que se apresuró a tomar el bate de el paragüero y lo alzó mientras caminaba a la entrada su casa, al abrir la puerta estuvo por lanzar un golpe cuando se encontró con los ojos de su mejor amigo.

Josh Devine tenía dieciocho años, tres años después de haberse dejado marcar tontamente, era un alfa ya de buena estatura, cabello levemente largo, hombros anchos y brazos levemente fuertes, Niall tenía diecisiete, un beta de altura promedio, y cuerpo atlético.

— ¿Por que tocas así la puerta? ¿Quieres que te mate de un balazo, pedazo de porquería? — Bufo Horan

— N-Ni — La mirada de Josh se elevó, para sorpresa de Niall, su mejor amigo tenía sus ojos llenos de lágrimas, su mano seguía cubriendo su cuello mientras temblaba ligeramemte — M-Me dueele, la marca, Sofía está rompiendo el lazo

El bate hizo un fuerte ruido cuando cayó al suelo cuando Horan lo dejó caer, se apresuró a tomar al contrario para llevar a la sala, dejándolo caer en el sofá, obligó al castaño a quitar su mano, dejando a la vista la herida, Niall no supo que sentir en ese instante, el asco, la preocupación, la desesperación se convinaron en su estómago y lo hicieron removerse con rabia, la marca estaba abierta, algo de sangre caía de ella, parecía una fea herida podrida, que para el alfa ardía como si el mismo fuego del infierno se pegará a su piel  lo quemara a carne viva.