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DECIR QUE IRIS ESTABA ENOJADA era quedarse corto. Estaba absolutamente furiosa y sintió que si se quedaba dentro de ese salón de clases, al lado de su idiota compañero de asiento por un segundo más, entonces explotaría. Estaba haciendo todo lo posible para mantener la compostura, especialmente después de que se hizo el nuevo arreglo porque sabía que no había nada que pudiera hacer para salir de eso, pero las constantes molestias y burlas de Seojun no eran de ninguna ayuda. Especialmente dado el hecho de que él conocía los lugares correctos en los que hurgar para sacarla de quicio. Aunque los dos nunca habían sido realmente amigos, conocía a la chica lo suficiente como para saber cómo molestarla.
"Y luego-", dijo Seojun mientras continuaba contando una de sus historias de cuando empezó a andar en motocicleta, a pesar de que a la morena no podía importarle menos. Iris se habría quedado callada si no fuera por el hecho de que su incesante conversación la distraía y no le permitía prestar atención a lo que se le estaba enseñando.
Cuando Iris cerró los ojos para evitar explotar con su compañero de asiento, finalmente se volvió hacia él y lo miró con dureza: "¿Puedes callarte?" dijo mientras apretaba los dientes, "Dios, eres tan molesto." murmuró para sí misma.
Sin embargo, Seojun no pareció ofendido por el comentario. De hecho, parecía enorgullecerse de ello, ya que su misión de molestar a su compañera de asiento estaba funcionando, "Gracias."
Iris lo miró, "Eso no fue un cumplido." dijo ella inexpresiva, pero él en su lugar respondió con una sonrisa descarada antes de continuar con su estúpida historia que hizo que Iris suspirara mentalmente. Esta iba a ser una clase larga.
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Sin embargo, antes de que Iris se diera cuenta, la clase pronto llegó a su fin, y una vez que escuchó el sonido de la campana, no podía estar más feliz ya que finalmente tuvo la oportunidad de alejarse de ese infierno. Así como el resto de sus compañeros comenzaron a empacar sus cosas, listos para irse a almorzar, Iris rápidamente se puso de pie y corrió hacia la puerta, sin siquiera molestarse en esperar a ninguno de sus amigos. Necesitaba un poco de aire fresco, y rápido.
