Young Love

297 20 1
                                    

Young Love

Luego de aquel brindis la incomodidad se sintió en la mesa y ya todos se estaban despidiendo para marcharse. Aemond termina su copa de vino y se levanta para marcharse. Rhaeliz espero que este saliera de el comedor para disculparse y salir tras el.

Ella no sabía porque lo hacía, no entendía p cual era su necesidad te ir tras el. Su acciones ignoraban por completo sus pensamientos y actuaban  con el corazón

-Aemond!-la princesa lo llama al ver a este al final del pasillo. Aemond se voltea y ve a la princesa acercarse a el.-Como estas?-pregunta dándole una sonrisa.

-Bien-Responde seco.  La princesa esperaba más del príncipe pensaba que al menos iba a preguntarle como estaba ella pero no dijo nada. Este al notar el silencio incómodo se dio la vuelta para irse. Pero al princesa toma su mano para detenerlo.

-llevamos tiempo sin vernos no vas...-Aemond hace que la princesa suelte su mano.

-No me importa como estes, así que si no tienes nada más que decir.-esté nuevamente intenta marcharse pero la princesa se lo impide.

-Pensé que quedaba algo de aquel Aemond que me quería-responde la princesa con algo de tristeza en su tono.

-No soy aquel Niño que te seguía como perrito por todas partes. Que te quede claro no deseo ser tu amigo o tan siquiera estar cerca de ti-responde este con odio en su tono. Rhaeliz a el notar el tono frío del príncipe no lloró ni mucho menos se sintió mal, se sentía enojada el no tenía derecho de hablarle así.

-Solo quería ser amigable pero por lo que veo eres un imbecil -le dice la princesa con actitud. Esto sorprendió a el príncipe ya que Rhaeliz jamas le había hablando a el de esa manera. Este la agarro por el brazo y de una manera brusca la atrajo hacia su pecho. Esta acción hizo que ambos quedaran lo suficientemente cerca para sentir sus respiración. Rhaeliz no tardo en mirar los carnosos labios del príncipe. Este al darse cuenta forma una sonrisa malévola en sus labios.

-Yo soy el imbecil?-pregunta con ironía. Rhaeliz vuelve su mirada a el ojo de Aemond  .-Dejas que veas con quien te vas a casar-susurra casi en los labios de la princesa. Este baja su mirada por unos segundo a el cuello de la princesa y observa el collar que le había regalado-Bonito collar-dice con sarcasmo.

-Suéltame-Rhaeliz con su mano libre empuja a el príncipe haciendo que esté la suelte con algo de brusquedad.

-Felicidades te casarás con un gran hombre-la ironía en su tono era muy evidente. Le da una falsa sonrisa a la princesa y da la vuelta para marcharse.

Rhaeliz sintió tanto coraje al notar la manera sarcástica y hostil en la
cual le estaba hablando el príncipe que con amabas manos tomó el collar que Aemond le había regalado y se lo arrancó del cuello tirando este a el suelo con coraje.

-Por lo que veo no puedes alejarte de el-la voz del príncipe Jace suena a las espaldas de la princesa.  Rhaeliz se gira para ver a el principe Jace con sus ojos aguados.

-Jace yo lo sient...-El principe la interrumpe.

-No Tienes porque disculparte Rhae-este posa su mano en la mejilla de la princesa. -No quiero volver a verte sufrir por su culpa-

-tranquilo no lo haré-responde la princesa con media sonrisa. Jace le da un beso en la mejilla y se marcha.  La princesa tomó un breve suspiro y vuelve a el salón del comedor donde se encontraba Aegon. Al entrar la princesa observa que el único que quedaba en la mesa era Aegon. Este tenía varias copas de vino frente a el y se notaba algo inestable. Este al ver a la princesa le da una falsa sonrisa sus ojos estaban rojo y padecía estar aver estando llorando.

Hurts Donde viven las historias. Descúbrelo ahora