La Eterna Tentación | Tom Kaulitz

Reconciliación a medias -26

— aún no me creo que te haya visto fumar, nunca me lo habría esperado de tí — decía Bill — pero te veías sexy

— no le digas eso Bill — le regañó su hermano

— qué estará pasando con la entrevista? Se supone que sería una pequeña pausa y llevamos dando vueltas por aquí como media hora — reía Gustav

— que le den, solo buscan chisme

— Tom no hables así, es lo normal cuando pasan estas cosas y te recuerdo que lo causaste tú — respondió la chica

— ya vamos a empezar de nuevo?

— solo digo que podrías haberte tapado un poco para que no te reconocieran

— pues yo te digo que me ponga lo que me ponga me reconocen hasta con una máscara

— lo que tú digas

— ya señores conflicto, no se se cansan de discutir? — se quejó Bill

— nunca se cansarán — respondió Georg por ellos

— bueno al menos ya no parece estar tan molesta conmigo

— estás de broma? Estoy MUY molesta contigo, pero no merece la pena ignorarte

— como sea, me sirve — se encogió de hombros el chico

Siguieron hablando de cosas aleatorias hasta que una llamada llegó al teléfono de la chica. Estaban seguros que sería su padre o Eric y le dijeron que simplemente le dijera que ya volvían al lugar pero sin dejarle hablar. Eso hizo, descolgó, dijo la frase y colgó.

— bueno... Y cuando... Cuándo me devolverás... — la chica hacía pausas en la frase sin saber cómo decirlo para que sonara lo mejor posible

— no voy a devolvertela, no pienso dejar que fumes

— oh vamos Tom, ya les dije que no fumo

— me da igual

— y si solo faltaban tres cigarillos y la tienes desde hace años... Cuándo fumas?

— cuando necesito relajarme desesperadamente — le respondió ella a Georg

— pues olvídate de volver a probar un cigarrillo — seguía diciendo Tom

— vamos devuélvemelos, no son tuyos... Juro que no fumaré

— y porqué los quieres si no?

— porque se los robé a mi madre, al menos déjame conservarlos

La chica dijo la frase normal pero los chicos cambiaron su cara cuando mencionó a su madre. Su representante lo pasó bastante mal pero no peor que ella, y ellos lo sabían porque escucharon al señor Wilson hablar de ello con Eric.

Fue hacía ya más de dos años, su madre murió por cáncer, algo que le había ocultado a toda su familia menos a su madre durante el poco tiempo que ella lo supo. Escucharon como su representante le decía que estaba preocupado por su hija, tenía que tomar algunos medicamentos para relajarse después de que le dijera que su madre había fallecido por cáncer. Su hija se sentía mal al no haberse dado cuenta, había visto como el rostro se su madre había estado más apagado últimamente, gastaba mucho maquillaje, a veces se iba de casa durante horas, a veces no la veía por días. Su madre le decía que el trabajo era últimamente algo duro, así que confío en ella.

— mi padre lo dijo cierto? No pongan esa cara, fue hace mucho tiempo — intentó normalizar la situación y Tom le extendió la pequeña caja

— como te vuelva a ver fumando tiro la caja por el retrete — le advirtió Tom alzando el brazo antes de dárselo para que no alcanzara