La Eterna Tentación | Tom Kaulitz

El corazón tras la máscara -5

(Antes de nada quiero avisar que la historia mejorará, voy por el capítulo 25 y la verdad me sorprendí a mi misma)

Inesperadamente, los chicos no estaban discutiendo como todos esperaban que pasara, por poco tiempo. Los adultos se fueron a seguir hablando de la gira así que Georg, Gustav y Bill observaban y escuchaban atentamente la conversación de Tom y ____, que era cada vez más intensa.

— y no crees que deberías conocerme antes de pensar todo eso de mí? — repetía Tom

— ya te lo he dicho, tu problema es que crees que soy estúpida como la mayoría de chicas que no se dan cuenta de que tú solo quieres un poco de diversión

— al menos se divertirme y sabes? A lo mejor no soy tan mujeriego como piensas, te sorprendería ver mi comportamiento como pareja

— pues sí, me sorprendería, pero el día que te vea ser una buena pareja juro que comeré carne cruda

— te lo recordaré cuando lo sea

— no hace falta, no lo serás — a Tom le sacaba de quicio cada palabra que ____ soltaba por su boca, desde su punto de vista, él no era tan mujeriego como ella lo pintaba

— estoy perdiendo mi tiempo ya que TÚ NUNCA SERÁS CAPAZ DE RAZONAR — subió el tono de voz poco a poco en cada palabra para que la chica entendiera bien lo que pensaba sobre el tema

— ahora soy yo la mala?! Es increíble Kaulitz, ni si quiera eres capaz de admitir los errores de tu propia personalidad!

— TAL VEZ ES PORQUE NO SON ERRORES

Tom se acercó a ella con una rapidez amenazante. Al juntar la expresión fría de Tom con su altura y su físico, impone demasiado cuando está molesto. Al ver cómo ____ daba un paso hacia atrás con miedo en los ojos por primera vez desde que la conoció se dió cuenta que no era tan dura como parece, entonces los labios de Tom se fruncieron un poco, formando una sonrisa de superioridad.

Eso no le gustó nada a ____, que comprendió lo que acababa de hacer: demostrarle a Tom que en el fondo era más débil de lo que pensaba. Tenía dos opciones, seguir discutiendo con él asumiendo el riesgo de que su inestabilidad emocional se la jugara, o salir de esa habitación para ignorarlo hasta que se canse. Optó por la segunda, su sensibilidad se la estaba jugando antes de tiempo, cada vez sentía más presión en la garganta y eso significaba lágrimas seguras.

— estás bien? — Bill se preocupó por ella al ver cómo salía rápidamente evitando que la vean, así que la siguió hasta que está entró en el baño

— estaba llorando? — preguntó Gustav llegando a su lado

— no lo sé, y Georg? Se quedó con Tom?

— sí, vamos con ellos? No estoy seguro que vaya a salir pronto — refiriéndose a la chica

— vamos — después de pensarlo accedió, pensó que sería mejor dejarla sola

____ solo intentaba relajarse, era demasiado sensible para las discusiones. Normalmente siempre solía sentirse mal después de éstas pero la primera que tuvo con Tom no se sintió nada mal, al contrario, se sintió genial después de plantarle cara a su estúpido orgullo.

Esta era distinta. Sentía que se había pasado pero a la vez que Tom se lo merecía. Aunque también se sentía estúpida por haber hecho saber a los chicos que en realidad sólo es una niña sensible e insegura detrás de toda esa ira e indiferencia.

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— no fue tan grave

— se encerró en el baño, Tom