Necesidad Enfermiza●Emmett Cullen●

Capítulo 1

Caminaba a paso relajado por la playa, estos días todo ha estado muy tranquilo. Mi hermano se ha empezado a juntar con Sam nuevamente. Y eso me alegra, cuando Sam se empezó a alejar de él, lo lastimo mucho, pero veo que ya arreglaron las cosas.

Jared también empezó a juntarse con ellos. Así que ahora solo quedamos yo y Jake. Aunque este último está más interesado en una chica. No la conozco, pero según el, es hermosa.

Hace unos días Jake me invito al cine. Iríamos con la misteriosa chica y sus amigos. La verdad no tenía muchas ganas de ir, pero iría solo por la comida gratis.

Empecé a caminar nuevamente hacia la reserva, más bien, hacia mi casa. Paul casi nunca viene, creo que esta enamorado o algo así, pero hace tiempo no veo a mi hermano.

Nuestro padre era todo un conquistador, creo que Paul heredó eso de el. Mamá vino a hacer un artículo sobre la reserva y ahí conoció a papá. El era un hombre soltero y con un pequeño niño de 3 años.

-disculpa?- dijo la voz de una chica. Yo me acerqué.

-te puedo ayudar?- pregunte. Ella asintió. Su cabello era castaño, era bastante largo, como hasta media espalda. Sus ojos eran marrones y su piel era blanquecina. No era muy alta pero lo suficiente. Se veía más o menos 2 años menor que yo.

-sabes donde queda la casa de los Black?- imagino que ella es la misteriosa chica.

-como te llamas?- le pregunte algo desconfiado.

-Isabella Swan- con que la hija del sheriff.

-soy Oliver- le dije mientras le hacía señas con mis manos para que me siguiera. Estuvimos caminando unos minutos en silencio, algo incómodo.

-vives en la reserva?- pregunto curiosa. Yo trague mi comentario sarcástico.

-así es- me limite a contestar. Una vez vi la casa de Jake me detuve.- ahí es- le dije. Ella me sonrio agradecida.

-muchas gracias Oliver- yo asentí y me fui. Al llegar a casa me di una ducha fría. La necesitaba.

Saque la pizza sobrante de ayer y la calenté. Prendí la televisión y me dispuse a comer. Y así paso mis tardes aburrido. No sirvo para arreglar autos, así que Jake no me quiere por el taller, no soy bueno con las personas así que el señor Black no me quiere por la cafetería, y creo que lo único en lo que soy bueno es en comer y no engordar.

La puerta se abre sacándome de pensamientos. Por ella entra Jake con una enorme sonrisa.

-y bien?- me pregunto. Yo lo mire confundido.- Bella, que te parecio?- yo me encogí de hombros.

-es linda- le dije mientras cambiaba el canal del televisor.

-mañana es lo del cine, no lo olvides- me recordó. Yo asentí. Nos quedamos un rato viendo películas hasta que se tuvo que ir.

Recogí todo el desastre de comida que había en la mesita y la cocina. Deje todo limpio. La puerta se abrió. Mire de reojo a ver quien era. Aquí tiene la costumbre de abrir y no tocar.

Paul entró empapado del agua de la lluvia. Se sacudió un poco huyendo de las gotas y se volteó. Me miro con una pequeña sonrisa.

-como has estado Oli?- me pregunto. Yo sonreí.

-bien, ya sabes, dentro de lo que cabe- susurre. Nuestra madre, o más bien, mi madre había fallecido hace unos meses. Nunca supe como, pero fue algo fuerte. Especialmente para Paul, en ese momento no contaba con el apoyo de su mejor amigo, Sam.

-me alegro- me dijo despeinando mi cabello, siempre me hacía eso cuando pequeño.

-y tu?- le pregunte. El se tenso un poco más no dijo nada- Paul debes hablarle conmigo soy tu herm- me interumpio.