Necesidad Enfermiza●Emmett Cullen●

Capítulo 15

Una vez llegamos a su casa y me asegure de que estuviera bien, me fui a ver a Emmett. Las crías aún dormían. Por suerte, no sabría que hacer si despiertan.

Primero, no soy su madre. Es muy probable que me vean como enemigo.

Segundo, no tengo nada de experiencia con niños, y aunque ahora están en su forma de coyote para protegerse, en algún momento canbiaran a su forma humana.

Una vez pise el territorio cullen Emmett apareció en mi campo de visión. Su mirada iba de mi hacia las crías.

"Sucedió algo" dije tímidamente.

El solo me miro confuso. Caminamos en silencio mientras le iba contando lo que sucedió. El había tomado a las crías en sus brazos para darles Calor.

-y que paso con la coyote?- me pregunto. Yo negué sin saber que decir.

- solo se que me dijo algo de unos volutris, o velutres, no se- el se tenso.

-Vulturis- yo lo mire serio. - son la realeza vampirica- yo me tense.

-por que les interesa asesinar a los protectores?- el se encogió de hombros. - genial acaban de dejar a otros 3 niños huerfanos- el coloco su mano em mi cintura atrayendome a él.

-nada te pasará, ni a ellos- susurro dejando un beso en mi cuello.

-tengo miedo- confesé. El me miro atento.- a penas y puedo mantenerme vivo , como voy a mantener a 3 criaturas más?- susurre preocupado- además tambien esta Jake, tengo que cuidarlo y el se mete en muchos muchos problemas- Emmett sonrio.

-si sabes que no estas solo verdad pequeño?- susurro.- esta Carlisle, Esme, Alice, Jasper- susurro - estoy yo, no te vamos a dejar solos, y a estas hermosuras - acaricio sus patitas- las vamos a cuidar bien y en cuanto a Jake pues que te puedo decir- dijo divertido. Yo sonreí.

Deje un pico en sus labios.

-bien, parece que habrá que adelantar nuestra casa- yo sonreí.

-así parece- el dejo un beso en mis labios.

Una vez llegamos a la casa Cullen todos nos esperaban nerviosos. Rosalie suspiro aliviada al verme. Edward me miraba sorprendido.

Si vas a leer mi mente pelos de escoba, avísame, hay algo llamado privacidad.

El rodó los ojos.

-tenemos que hablar- Carlisle asintió mirando las crías que llevaba en mis brazos.

Les conté todos los detalles de lo sucedido, incluyendo la parte de los vulturis. Carlisle estaba igual de confuso que yo pero me prometió que me ayudaría a investigar luego de la boda que es en una semana.

Rosalie estaba enternecida con los pequeños que habían cambiado de forma y ahora eran pequeños bebes de unos 4 meses. Las crías nacen en su mayoría, en su parte animal y luego cambian a la humana. Por lo que un mes de nacido en su forma de animal equivale a 4 en su forma humana.

Luego de su primer cambio de animal a humana ambas mitades tienen la misma edad, así que ahora ambas mitades serán de 4 meses.

Alice hablaba sin parar de lo bellos que se verian el día de la boda con sus ropitas pues dos de ellos eran niñas. Jasper sonrio al ver como su esposa se emocionaba y señalaba ropa de bebe en las revistas.

Todos hablaban de lo hermosos que eran. Se que en esta familia nada les faltara a esos pequeños, y tal vez no puedan crecer con su familia biológica pero me prometo cuidarlos y hacerlos felices.

Un llanto hizo que todos hiciéramos silencio. El pequeño había despertado. Sus ojos llorosos nos miraban curiosos y asustados.

-hola pequeño- susurro Esme tomándolo al hombro. El comenzó a removerse tratando de huir de su tacto.

-creo que no quiere que lo cojan- dije algo incómodo pues no se como tratar a un niño pero esta claro que no quiere que lo cojan.

El bebe escucho mi voz y miro en mi dirección. Sus ojos volvieron a llenarse de lagrimas y estiro sus brazos hacia mi.

No No No No.

-corrección- hablo Sebastian- no quiere que Esme lo coja- hizo una pausa con una sonrisa divertida- quiere que tú lo cargues- fijo remarcando el" tú ".

Esme se acerco con una sonrisa y lo estiro hacia mi. Joder. Con cuidado lo tomé en brazos haciendo que instantáneamente deje de llorar.

Lo cargue con cuidado haciendo que recueste su cabeza de mi hombro. Sus ojos azules me miraban curiosos y una pequeña sonrisa se asomaba por sus labios.

Es hermoso.

Sus cabellos castaños resaltaban su piel de manera tierna. Tenía un lunar en su pierna derecha que iba desde el tobillo hasta su rodilla.

Otro llanto se escucho. Las dos pequeñas habían despertado. Miraban a todos con temor. Rosalie se acerco rápidamente tomándolas en brazos. Ellas sonrieron al ver su rostro.

- mira que preciosas- le susurro a Sebastian.  Pude ver como sus ojos se cristalizaban.

Entiendo el sentimiento que está cruzando con su cuerpo. Y eso me confirma que estos niños van a estar más que bien en esta familia.

Una de las pequeñas miro a Edward y le alzo sus brazos para que la tomara. El la miró sorprendido. Más con una sonrisa la tomó en brazos. Isabella lo miraba con una sonrisa. Ella tomó la manita re la bebe haciendo que esta le huya a su toque y la mire mal.

Todos reímos divertidos.

Las dos pequeñas escucharon la risa de Emmett y sus ojitos brillaron. Ambas se removieron buscando a Emmett. El sonrió emocionado al ver eso. Con cuidado de que no se cayeran, las tomo al hombro y comenzó a moverlas tiernamente.

-deben tener hambre- dijo Jasper. Los pequeños comenzaron a llorar nuevamente al escuchar a Jas.

-supongo que si- dijo Esme con una sonrisa- creo que tengo puré para que coman- dijo guiándonos a la cocina.

Rosalie abrió la nevera tomando tres envases llenos de puré. Jasper nos repartió unas cucharas y con cuidado comenzamos a alimentarlos.

El pequeño se embarro de puré sacándome una sonrisa. Sus regordetas mejillas estaban llenas de pure. El río un poco al sentir la textura en su rostro.

Las pequeñas miraban curiosos en nuestra dirección. Yo les sonreí y con cuidado coloque al pequeño en la barra y tome a la pequeña. Pegue mi cadera a la barra para que el bebé no se cayera. Emmett se acerco con la otra niña y me dejo un beso en la frente.

Podría acostumbrarme a esto. ¿Que tan difícil puede ser cuidar a un niño?
Más bien, a tres.

Fácil, ¿no?